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Las empanadillas significan, para mí, infancia. Recuerdo comerlas mucho de pequeña, hacer un sencillo relleno en casa y disponer montoncitos de ese relleno sobre las obleas (si son con la masa casera, pues mejor), que me encantaba doblar y aplastar sus bordes con un tenedor dejando esa forma de borde rallado. Esta última tarea era mi favorita, era como jugar a las cocinitas. Pero qué pena porque ya se ven muy poco, o nada, en cartas de restaurantes, y es que han sido totalmente opacadas por las argentinas, y tengo la sensación de que también se han dejado de hacer en muchos hogares.
En casa eran muy típicas las clásicas, de atún y tomate, que no tienen más lío que abrir una lata de atún (o bonito), un bote de buen tomate frito, o mejor si es casero, y que tuneábamos, de vez en cuando, con algo de huevo cocido bien picadito, o aceitunas verdes para darle un extra de jugosidad. Nuestras empanadillas son además un recurso facilísimo de comida, muy socorridas incluso para aprovechar alguna sobra de comida, y se preparan con tan solo haber tenido la previsión de tener un paquete de obleas refrigeradas en nuestra nevera. Por su puesto que la masa se puede hacer casera, pero el objetivo es facilitarnos una comida rápida y ya las venden muy decentes en la sección de refrigerados de cualquier mercado.
He querido hacer honor, por tanto, a esta receta tradicional, pero dándole un sabor algo diferente. Esta es una receta de la que, además, podéis tirar cuando tengáis restos de un pollo asado, al que simplemente añadir un sofrito, pasas y especias que nos recordarán un poco a Marruecos. Acordaos de remojar previamente las pasas en un poquito de agua caliente, porque, aunque se puede no hacer, estas mejorarán en textura quedando menos secas y más integradas en el conjunto. He optado por la versión clásica de freírlas en aceite de oliva, pero se pueden cocinar al horno pintadas por encima con un poco de huevo batido para darles brillo y espolvoreadas, opcionalmente, con un poco de sésamo.Y si por lo que sea, os sobra algo de relleno, bien lo podéis utilizar para hacer otras elaboraciones como puedan ser unos canelones.
Cómo hacer empanadillas de pollo y pasas
Ingredientes
- Obleas para empanadillas, 20 ud
- Cebolla, 1 ud
- Chalota, 1 ud
- PImiento rojo, 1/2 ud
- Pimiento verde, 1/2 ud
- Aceite de oliva virgen extra, 4 cucharadas
- Sal, c/s
- Pimienta negra molida, 2 cucharaditas
- Pechuga de pollo, 2 ud
- Pasas sultanas, 3 cucharadas
- Aceite de oliva suave, abundante para freír
Paso 1
Pochar las verduras
Paso 2
Cocer el pollo y desmecharlo
Paso 3
Mezclar todos los ingredientes del relleno
Paso 4
Hacer las empanadillas y freír
Paso 1
Estas empanadillas se pueden hacer o bien con restos de pollo o con pollo cocinado ex profeso para la ocasión. Si quisiéramos hacerlas desde cero, sólo tendríamos que cocer el pollo en una olla a fuego mínimo durante 15 minutos. Luego, retirar el pollo y dejar enfriar durante 10 minutos. Tras este tiempo, habría que desmecharlo con la ayuda de un tenedor o simplemente de los dedos. Luego podríamos trocearlo con unas tijeras o con el cuchillo también. Remojar también las pasas en agua caliente.
Paso 2
Pelar la cebolla y la chalota y picarlas en cuadraditos pequeños - brunoise - y pochar la cebolla a fuego suave con aceite de oliva y sal. Tapar para que el calor se condense y el pochado sea más uniforme. Remover constantemente para que no se pegue.
Paso 3
Cortar los pimientos, habiéndolos lavado previamente y habiendo retirado el pedúnculo y las semillas, y ponerlos a freír de la misma manera, con aceite y sal. Podemos hacerlo junto o separado. Durante unos 20 minutos hasta que estén bien tiernos y empiecen a coger color.
Paso 4
Cuando tanto la cebolla como el pimiento se hayan enfriado bien habrá que mezclarlos con el pollo deshebrado, las pasas, la harina de almendra y las especias para hacer el relleno de nuestras empanadillas.
Paso 5
Disponer las obleas de empanadilla extendidas encima de la mesa y poner encima el relleno, así es más rápido. Hay que tener cuidado de no pasarse de cantidad de relleno para que la empanadilla cierre bien.
Paso 6
Ir cerrando una a una cada empanadilla y sellarlas bien con el tenedor.
Paso 7
Calentar en una sartén honda abundante aceite y freír en él las empanadillas hasta que se doren por ambos lados. Sacar con la ayuda de una espumadera a un plato con papel de cocina para que absorba el exceso de grasa.
Trucos y consejos
Una vez formadas, las empanadillas se pueden congelar perfectamente. Luego las freiremos sin necesidad de descongelar pero un poco más para asegurarnos que se han hecho por dentro.