Revuelto de tomate, huevo y queso, la receta perfecta para tus tostas del desayuno

Todos hemos oído alguna vez, de nuestras madres y abuelas, aquello de que el desayuno es la comida más importante del día, pero lo cierto es, que siéndolo o no, debemos procurar intentar comer proteínas y vegetales de primera calidad para empezar el día con fuerza, reduciendo los azúcares según dicen ahora cada vez más los nutricionistas. 

Está claro que es la opción más rápida, pero un yogur con granola casera a la que además se le puede dar un segundo uso haciendo unas barritas de cereales caseras o unos boles de frutas que no nos llevarán mucho tiempo en la cocina; también un pudding de chia que incluso se puede dejar preparado el día anterior son también opciones a tener en cuenta.

Ahora bien, si somos de salado, el desayuno estrella son sin lugar a duda los huevos. En todas sus versiones y formas. Por supuesto, no nos podemos olvidar de los huevos Benedict, pero tampoco de los duros en diferentes formatos o en los huevos pasados por agua. Aunque mucha gente tiende siempre a una receta estrella: el revuelto.

Este revuelto con tomates cherry y queso no nos llevará más de diez minutos, y nos aportará la energía necesaria para afrontar el día de una manera más saludable. Utilizaremos tomates cherry pues tienen más textura y menos agua (además concentran más antioxidantes), y un queso de elección propia, pero que funda bien. Sea cual sea el tipo de queso elegido, es mejor comprarlo entero y rallarlo en el momento.

Esta tostada nos puede servir para desayunar, merendar, para una cena o incluso un almuerzo ligero. Si os gustan las tostas, podéis probar también una tostada de aguacate con salmón y huevo poché o, ahora que es temporada de higos, una tostada con hijos, mojama y ricotta que es una combinación sensacional.

Tosta de revuelto de tomates

Paso 1

Lavar los tomates cherry y cortarlos en daditos pequeños. Batir también los huevos en un bol y agregar un poco de pimienta negra molida.

Paso 2

Saltear los tomates cherry en una sartén con un poco de mantequilla a fuego medio hasta que queden sin agua. Añadir un poco de sal.

Paso 3

Cuando los tomates ya estén listos, rallar abundante queso que funda bien y mezclar a fuego suave, para que se derrita por completo. Entonces, agregar los huevos batidos previamente con la pimienta negra y un poco más de sal. Ir removiendo constantemente con la ayuda de una espátula, para que no se queden demasiado cuajados por ninguna zona. Lo haremos siempre a la temperatura más baja.

Paso 4

Cuando veamos que el revuelto ya está listo, retirar del fuego y seguir removiendo un par de minutos para que el calor residual no nos juegue una mala pasada.

Paso 5

Tostar en la sartén o en la tostadora el pan elegido, añadir un poco de aceite de oliva. Servir el pan recién tostado con, por encima, el revuelto. Rallar un poco más de queso si se desea y consumir al momento.