Si hablamos de empanadas - ninguna como la empanada de pulpo que hacemos en España, ya lo sabemos -  en Estados Unidos en realidad hablamos de los Pot Pie, una receta que puede ser lo más sencilla o compleja del mundo según lo que queramos y que heredaron de la cocina de los inmigrantes europeos, sobre todo los italianos, españoles y alemanes.

Los americanos la suelen preparar con pollo, por eso si buscáis en internet encontraréis muchas referencias sobre el chicken pot pie pero como toda buena empanada en realidad admite en su interior todo tipo de rellenos según la imaginación de cada uno.

El nombre se hereda de utilizar las ollas de hierro para darle forma y es por eso por lo que yo he empleado mi sartén de hierro para prepararla, porque además queda una forma muy bonita.

En esta ocasión lo he preparado literalmente de restos de la nevera porque tenía un trozo de lomo de cerdo ibérico y también unos ajetes y unos espárragos pero en realidad podríais hacer el mismo proceso con lo que os apeteciera o tuvierais a mano. Ya sabéis que soy firme defensora de intentar comprar menos y aprovechar todo más, que no se tire nada y dar juego a los ingredientes de temporada. Cocina real, cocina saludable. 

Hablamos de una empanada que podréis hacer con hojaldre pero también con masa de empanada o masa quebrada y que en su interior cuenta con un poco de bechamel para amalgamar todo el conjunto y que quede tremendamente untuoso, es un puntazo esta adicción en su interior porque hace que quede cremoso y que quieras comer más y más.

De hecho, generalmente la bechamel o velouté se prepara directamente en el relleno donde se sofríe todo pero yo he preferido separarlo para que tanto la carne como los vegetales no se sobrecuezan demasiado. Podríamos también sustituir la leche por caldo al gusto para hacer más bien una velouté antes que una bechamel y quedaría también fabuloso. Os aconsejo probar con calabaza dentro y con guisantes, también con beicon, carne de pavo o incluso los restos del pollo asado del día anterior. Esta es una perfecta receta de aprovechamiento. 

Cómo hacer empanada de carne con bechamel

Paso 1

Picar bien todas las verduras y trocear también la carne. Saltear la carne a fuego máximo con un poco de aceite y de sal para que se dore, reservar. En esa misma sartén pochar los ajetes (o puerro, o cebolla, o lo que queráis) a fuego suave hasta que queden bien tiernos. 

Paso 2

Precalentar el horno a 200 ºC con calor arriba y abajo, si ponéis el ventilador tendréis que bajar el horno a 180 ºC (y esto se aplica como regla general). Añadir los espárragos cortados a la sartén, remover ligeramente e incorporar las puntas. Remover bien para que se cocine ligeramente y reservar. 

Paso 3

Preparar la bechamel derritiendo la mantequilla y cocinando en ella la harina, removiendo bien para que la harina se cocine durante un par de minutos. Incorporar la leche y cocinar bien sin parar de remover mientras que la bechamel se cocina. Cuando ya coja cuerpo añadir la sal y la pimienta y reservar. 

Paso 4

Mezclar la carne con las verduras y la bechamel y condimentar al gusto con las especias que se quieran. 

Paso 5

Colocar la base de hojaldre en el molde, subiendo bien por los bordes. Pinchar la masa con el cuchillo y rellenar con el preparado que ya teníamos, cubrir por encima con el resto sellando bien todo para que no se salga la masa y retirando los excesos. Hacer una pequeña chimenea en el centro y pincelar con el huevo batido. 

Paso 6

Hornear durante 25 minutos aproximadamente o hasta que esté bien tostadito. Dejar reposar para que se enfríe ligeramente antes de cortar y servir.