Si todavía no estás enganchado a la moda de la cocina a baja temperatura empiezas a llegar tarde, así que ponte las pilas y date prisa porque tienes que empezar a enterarte de qué va esto. La cocina a baja temperatura nos encanta en Cocinillas porque es fácil y sale todo riquísimo. ¿Necesitas más para convencerte? No te preocupes, tenemos 6 razones para empezar a cocinar a baja temperatura.
La cocina a baja temperatura no es algo nuevo. Aquí escribimos un artículo sobre el tema en el que te explicamos a fondo qué es, cómo funciona, ventajas, instrumentos y muchas otras cosas, pero lo que pretendo con este artículo es darte unas pocas claves para convencerte de que esto realmente es útil, fácil y da unos resultados increíbles a tus platos.
6 razones para empezar a cocinar a baja temperatura
Cuánto más tiempo cocinas menos trabajas
En serio, no te estoy tomando el pelo. Un plato que se preparara en 30 ó 45 minutos suele llevar bastante o mucho trabajo, pero preparar un plato cocinado a baja temperatura por lo general siempre es muy fácil. Yo me dedico a muchas cosas y tengo mucho trabajo, pero me encanta cocinar y no puedo dejarlo. Aunque lo que realmente me gusta es comer bien, y por eso me enganché a esto de la cocina a baja temperatura.
¿No te crees esto de mucho tiempo y poco trabajo? Echa un ojo a esta receta de guiso de ternera a baja temperatura en olla de cocción lenta y verás. Con 10 minutos de preparación previa y 6 horas de cocción consigues un resultado que ya quisieran los restaurantes de alta cocina de guisos de ternera. ¿Que no existe eso? Pues ya estamos tardando en montar un restaurante de alta cocina con guiso de ternera, porque este se lo merece.
Volviendo al tema, un plato que lleva 6 horas y casi nada de trabajo con un nivel de principiante total que tiene un resultado increíble. Vas a flipar, y solo necesitas una de estas que cuesta unos 40€:
Resultados de ‘toma pan y moja’ sin esfuerzo
Cuando cocinamos a baja temperatura conseguimos unos platos riquísimos en sabor, pero además con texturas espectaculares y que conservan mejor los nutrientes y propiedades de los alimentos que utilizamos.
Probad a cocinar al vacío durante una hora una chuleta de cerdo y veréis lo que se puede llegar a hacer con lo que normalmente es una carne seca y dura. Es increíble lo que una olla de cocción lenta puede hacer con ternera de tercera, queda tan tierna como el solomillo.
Pero con productos que en cocciones normales tienen texturas y sabores buenos también podemos mejorar, como es el caso del salmón, que tiene una textura mantequillosa que te hace la boca agua y no pierde nada de sabor en la cocción.
Todo esto además hace que sea más barato y sano cocinar con baja temperatura. Y por supuesto, con el mínimo esfuerzo.
Ensucias mucho menos la cocina
Hay muchas técnicas para cocinar a baja temperatura, pero a mi las que más me gustan son sous vide al vacío y en olla de cocción lenta. Lo bueno de estas dos técnicas es que ambas ensucian muy poco, y platos que suelen requerir sartenes y ollas con aceite que ensucian mucho no son ya necesarias.
Lo de ensuciar, como todo, es al final relativo. Pero yo he notado que al preparar platos más complejos y con mejores resultados en sabor y textura he acabado con la cocina más limpia que cuando no conocía esto de cocinar a baja temperatura.
Repite los mismos resultados una y otra vez
Lo bueno de cocinar a baja temperatura no es solo que sale todo riquísimo, es que podemos repetir una y otra vez los mismos resultados. Clavados. Iguales. Riquísimos. Sin trampa.
Para mi esto es importantísimo. Cuántas veces una de nuestras recetas ha acabado en un fiasco porque el pollo no estaba del todo hecho, el pescado pasado o el cordero como una piedra. Esto ocurre, y ocurre por una sencilla razón, por no cocinar a baja temperatura. O lo que es lo mismo, cocinamos con temperaturas superiores a la que queremos en el producto para acortar los tiempos. Cuando lo hacemos a baja temperatura lo hacemos a la temperatura a la que queremos el producto, por lo que es muy difícil que se nos pase. Y por eso es tan fácil repetir resultados.
Os pongo un ejemplo. Yo hago unas costillas de cerdo envasadas al vacío que cocino durante 12 horas. Es mucho tiempo, sí, pero poniendo siempre la misma temperatura y tiempo consigo el mismo resultado todas las veces que la hago. Nada de costillas poco hechas o pasadas y secas, siempre perfectas. Y no he fallado, ni una vez.
Disfruta de tu familia y amigos mientras cocinas
Que la cocina a baja temperatura lleve tanto tiempo se puede mirar de dos formas. Podemos ser negativos y pensar que es muy lento, o podemos ser positivos y pensar que todo ese tiempo que tendríamos que estar dedicando a cocinar ahora se lo podemos dedicar a otras cosas.
Preparar unos chuletones a la plancha es fácil, pero lleva su trabajo y requiere técnica y experiencia para dejarlos perfectos. Pero lo que más necesita es echarle tiempo, y si tenemos invitados en casa es tiempo que no disfrutaremos con ellos. Fijaos lo fácil que es hacer ese mismo chuletón a baja temperatura como os cuento aquí, y lo bueno es que podemos dejar todo listo antes de que lleguen los invitados y darles un toque final antes de servir, nada más. Vamos, que preparamos la comida antes de que llegue nadie, luego nos preocupamos solo de disfrutar y tomarnos unas cervezas con ellos, y cuando haya que comer le damos un toque final a la plancha.
Cocinar a baja temperatura lleva mucho tiempo, pero es tiempo que podemos aprovechar para hacer otras cosas que nos gustan más. O dedicarnos a elementos más creativos de la cocina como un postre, una salsa o alguna preparación más elaborada.
Es motivador para los más cocinillas
Me encanta cocinar pero soy un cocinillas de los auténticos. Para mi un auténtico cocinillas es aquél que tiene poco tiempo pero necesita cocinar cosas ricas, que no le vale con cualquier cosa. Es la filosofía que siempre ha habido detrás de Cocinillas y es lo que intentamos transmitir.
Con el tiempo cada vez me motivaba menos la cocina porque me falta tiempo, y al final siempre repito lo mismo. Los fines de semana estaban bien para explorar nuevas técnicas de cocina, pero a la larga acaba cansando. Empezar a cocinar a baja temperatura, al ser una forma fácil de cocinar platos con muy buenos resultados, es perfecto para recuperar la motivación por el mundo de la cocina.
Es más, animo a los más principiantes a probarlo porque es una forma genial de entrar en platos elaborados. ¿Sabes la maravilla que es irte por la mañana a trabajar y llegar para encontrarte una fabada asturiana que ha estado cocinándose durante 7 horas? No tiene precio. Anímate a empezar a cocinar a baja temperatura porque ya tardas.