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- Comensales: 2
Probablemente muchos relacionen el queso feta con Grecia, pero, en realidad, este tipo de queso fresco ligeramente arenoso y ácido es muy popular en muchos países del Mediterráneo oriental. Si te gusta - porque es de esos ingredientes que lo odias o lo amas - te conquistará en unas pechugas de pollo rellenas con feta y espinacas o en un gazpacho de melocotón con brochetas de feta, pero una alternativa que os fascinará para este queso es hacerlo en el horno, ligeramente tostado y condimentado como en esta ensalada de hoy.
Una ensalada de legumbres cuya base son unas lentejas pardinas cocidas y condimentadas muy ligeramente que luego se potenciarán gracias al delicioso chutney de piña (si sois amantes de esta fruta en versión salado no os perdáis esta ensalada de piña y pepino) que será el hilo conductor de toda la preparación, aunque también podríais hacer un chutney de mango y quedaría igual de bien.
La receta de hoy es tremendamente fácil y se sale de lo que estamos acostumbrados normalmente en España, pero sigue esa línea tan atractiva que se ve mucho en Estados Unidos, los países nórdicos o Inglaterra con exponentes como Ottolenghi (al que deberíais seguir si no lo hacéis ya).
Usamos las lentejas como base de la ensalada que, por supuesto, podréis comprar ya cocidas o cocerlas vosotros; tarea que no cuesta ningún tipo de esfuerzo y con la que conseguiréis que estén más sueltas y sabrosas porque podréis aportar algunas hierbas, especias o condimentos al agua donde se cuezan.
Y después nos aprovechamos del chutney de piña a modo de vinagreta prácticamente, no añadiendo mucha azúcar y aprovechando así la acidez de la piña con toda la gracia de las especias, el jengibre y también del pochado de la cebolla morada. Al queso feta, para asarlo en el horno o también hacerlo a la plancha, podréis añadirle el punto que más os guste como condimento y así haréis vuestro plato "combinado" personalizado al gusto de cada uno.
Cómo hacer ensalada de lentejas, queso feta y chutney de piña
Ingredientes
- Queso feta en cubos, 150 g
- Lenteja pardina cocida, 200 g
- Espinaca baby, 30 g
- Orégano, 1 cucharadita
- Pimienta negra molida, 1/4 cucharadita
- Comino negro molido, 1/4 cucharadita
- Sal, c/s
- Aceite de oliva virgen extra, 3 cucharadas
Chutney de piña
- Piña, 4 rodajas
- Cebolla morada, 1 ud
- Aceite de oliva, 2 cucharadas
- Cayena, 1 ud
- Cilantro en bolas, 1 cucharadita
- PImienta rosa, 1 cucharadita
- Azúcar moreno, 100 g
- Cúrcuma, 1 cucharadita
- Jengibre fresco, 1 cm
Paso 1
Pochar la cebolla.
Paso 2
Añadir las especias, la piña y el azúcar y preparar el chutney
Paso 3
Asar el queso feta condimentado.
Paso 4
Montar la ensalada
Paso 1
Si vais a cocer vosotros las lentejas tendréis que cocerlas a partir de agua fría, con ésta abundante en la olla, sal y las especias que queráis. Si usáis olla exprés estarán en 20 minutos, pero si utilizáis una olla normal tendréis que esperar una hora más o menos. Tendrán que estar enteras, no muy pastosas. Habrá que colarlas y dejarlas enfriar completamente.
Paso 2
Elaborar el chutney. Para ello pelar la cebolla y picarla finamente. Ponerla en una olla con un poco de aceite y sal y dejar pochar a fuego suave, pero no demasiado, que caramelice ligeramente. Mientras tanto pelar y picar la piña en dados pequeños.
Paso 3
Añadir las especias al chutney y también la piña, removiendo muy bien. Incorporar el azúcar moreno, bajar el fuego y tapar dejando cocinar 15 minutos. Entonces, cuando todo haya soltado su líquido destapar y dejar cocinar 15-30 minutos más, al gusto de cada uno. Personalmente prefiero que para usarlo en esta ensalada lo dejemos más líquido, no muy denso. Tened en cuenta que al enfriarse se queda aún más compacto.
Paso 4
Trocear el queso feta y aliñarlo con los condimentos y un poco de aceite. Hornear con el horno precalentado a 250 ºC durante 10 minutos, o hasta que esté dorado por encima. Reservar.
Paso 5
Mezclar las espinacas con las lentejas y aliñar con aceite y sal. Disponer por encima de la preparación el chutney de piña, al gusto de cada uno y con cuidado de quitar el trozo de jengibre para que nadie se lo coma, terminando también con los dados de queso feta dorados previamente. Se podrá rematar por encima con alguna hierba aromática si se desea.