El bagel es un pan redondo con un agujero en el centro de origen polaco. Para los que conozcáis este riquísimo pan sabréis que tiene una masa diferente a otros panes, y es porque antes de meterlo al horno hay que cocerlo en agua, y eso le da un toque especial.

Ingredientes para hacer Bagels caseros

  • 500 gramos de harina de fuerza
  • 300 ml de agua templada
  • 1 cucharada grande de aceite de oliva virgen extra
  • 1 cucharada de azúcar blanco
  • 1 cucharada pequeña de sal
  • 25 gramos de levadura fresca

Yo nunca he sido gran fan de los bagels, pero más por desconocimiento que porque no me gusten. Los redescubrí en un local de Londres en los que ponen unos bagels con roast beef y mostaza picante que uno no puede ni creerse. De verdad, de las mejores cosas que he comido en mi vida, y encima es barato. Otro día os hablaré a fondo de este sitio, porque considero que es de visita obligada en Londres.

Preparación de los Bagels caseros

Lo primero que tenemos que hacer para preparar bagels caseros es hacer la masa. Si tenemos un robot de cocina hay que juntar harina, azúcar, sal y levadura desmenuzada y mover 15 segundos a velocidad 1. Después añadimos agua y aceite y tenemos unos 10 minutos a velocidad 3.

Si no tenemos robot es lo mismo pero a mano, que lleva un gran trabajo. Es importante amasar bien, y tendremos que estar unos 15 minutos de trabajo constante, que es la parte más complicada de la receta.

Una vez amasado dejamos reposar aproximadamente una hora hasta que doble el volumen.

Ahora tenemos que dar forma a los bagels. Para ello sacamos trozos de masa a los quedamos forma de bola, aplastamos y desde el centro hacemos un agujero para ir creando ese aro tan característico. El agujero debe ser grande, porque siempre va a quedar más pequeño al final del proceso, así que no te preocupes por esto. Igualmente se hinchará la masa, así que no pasa nada si te parece demasiado fina. Fíjate en las fotografías.

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Ahora pasamos por una sartén sin aceite durante 2 minutos por cada lado para tostarlo ligeramente. No queremos que lleguen a dorarse, sólo que sellen mediante una pequeña capa dura.

Calentamos una olla con agua y una cucharada de azúcar. Cuando rompa a hervir bajamos el fuego hasta justo el punto en el que desaparece el hervor. Entonces metemos los bagels en tandas para que quepan sin molestarse entre ellos durante 3 minutos por cada lado. Es decir, 3 minutos, volteamos y otros 3 minutos. Deja secar en papel de cocina para eliminar el agua sobrante.

Ahora sólo queda hornear, para lo cual precalentamos el horno a 200ºC. Introducimos los bagels pintados con clara de huevo batida y bajamos a 190ºC. En unos 25 minutos nuestros bagels caseros estarán listos para disfrutar, aunque mejor dejar antes que se enfríen.

Resultado

Estos bagels caseros son pan diferente, tierno por dentro y crujiente por fuera. Un acompañamiento típico es con salmón y queso crema, pero lo puedes usar para lo que quieras, por ejemplo al día siguiente tostado con mantequilla y mermelada.

Y si te atreves con el roast beef y la mostaza picante… en fin, necesito volver a Londres a por uno de esos que os he contado antes.

Tiempo: Aproximadamente media hora más una hora de fermentación

Dificultad: 4/5

Digestión: 3/5

Precio: 2€

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