Hacer pan es una de esas actividades que con la cuarentena y el estado de alarma nos está teniendo entretenidos entre horneados y fermentaciones y esto ha servido para que más de uno se de cuenta que hay mucho oficio y tesón en cuanto a masas se refiere. Es una verdad como un templo que la frustración del principiante a panadero casero suele ser bastante grande hasta conseguir dominar ciertos conceptos y lograr panes realmente gustosos y es por eso por lo que este pan naan es una opción maravillosa para todos aquellos que se están iniciando.

Ingredientes

Sin Masa Madre:

  • Harina de fuerza, 375 g (si no tenéis, pues harina normal, no de repostería)
  • Agua, 150 g
  • Nata fresca o creme fraiche, 100 g (o leche entera)
  • Sal, 6 g
  • Levadura seca de panadería, 3 g
  • Mantequilla derretida o ghee, 4 cucharadas
  • Ajo picado, queso rallado o especias, opcionales
  • Aceite para engrasar los boles en los que dejamos reposar la masa

Con masa madre:

  • Harina de trigo, 325 g
  • Masa madre, 100 g (*)
  • Agua, 100 g
  • Nata fresca o creme fraiche, 100 g (o leche entera)
  • Sal, 6 g
  • Levadura seca de panadería, 2 g
  • Mantequilla derretida o ghee, 4 cucharadas
  • Ajo picado, queso rallado o especias, opcionales
  • Aceite para engrasar los boles en los que dejamos reposar la masa

Paso 1

Mezclar todos los ingredientes y amasar bien.

Paso 2

Dejar fermentar hasta que doble el volumen

Paso 3

Dividir en ocho porciones y dejar reposar otra vez durante 30 minutos.

Paso 4

Estirar y cocinar en una plancha muy muy caliente.

Paso 5

Pincelar con la mantequilla.

(*) Si te animas a preparar la versión con masa madre pero te da pereza hacer la tuya propia puedes usar esta de Molino de Alcuneza.

Este pan sin horno lo podéis hacer con y sin masa madre, no conlleva fermentaciones complicadas ni larguísimas, lo hacemos en la sartén evitando encender el horno y, además, está buenísimo. El naan es un tipo de pan indio que aparece siempre al lado de sus currys y que tiene como principal característica cocinarse pegado a las paredes de los hornos tandoori, a altas temperaturas, algo que en casa conseguimos más que decorosamente con una buena sartén bien caliente.

El resto del trabajo sólo conllevará un amasado concienzudo y la delicadeza de estirar el pan y ponerlo sobre la plancha. Después se puede pincelar con ajo triturado, se le puede añadir especias por encima o también podemos optar por la opción con queso: estirar el pan, poner queso rallado, hacer una bolita tipo pañuelo y volver a estirar.

Paso 1

Mezclar todos los ingredientes del pan y amasar bien, a conciencia. La harina de trigo puede sustituirse por un poco de harina integral, que quedaría aún más tradicional como lo hacen allí. Empezar el amasado en el bol y luego llevarlo a la mesa de la cocina y seguir. Tiene que ser una masa que no se quede pegada a las manos, bastante manejable. 

Paso 2

Hacer una bola y ponerla en un bol aceitado, tapar con un papel de plástico y dejar fermentar en un lugar cálido lejos de corrientes de aire. Tardará aproximadamente 3 horas en doblar el volumen pero esto dependerá de las condiciones de cada casa, lo mejor es ir observando la masa. 

Paso 3

Volcar la masa sobre una superficie engrasada con un poco de aceite, cortar en 8 porciones y hacer 8 bolitas. Dejar reposar tapadas con papel plástico durante 45 minutos. 

Paso 4

Calentar una sartén, mejor si es de hierro, a fuego muy fuerte. Estirar cada bolita hasta conseguir una lámina de unos 3mm de grosor y llevar a la plancha, sin aceite ni nada. Dorar por ambos lados durante unos segundos. 

Paso 5

Pincelar fuera del fuego por las dos caras con ghee o mantequilla derretida. 

Trucos y Sugerencias

Para conservarlo bien se recomienda dejarlo entre un paño tapado, con cuidado de que este paño no emane olores de jabón o suavizante u otras cosas. Se puede hacer con antelación, aunque no está tan rico obviamente, y después darle un golpe de calor en el tostador u otra vez por la plancha.

El pan naan se puede utilizar también para hacer wraps o sándwiches, ya que es elástico y muy jugoso y queda perfecto con cualquier cosa dentro. 

La opción de masa madre tiene resultados casi idénticos que la opción sin ella, en esta receta hemos usado la de Molino de Alcuneza, que nos aporta todo el sabor dulzón de la espelta y de los años durante los que han trabajado con ella. Para mí un aporte lujoso que eleva el pan un punto más allá pero también es cierto que si vuestra masa madre es muy ácida os recomiendo no utilizarla para este pan y sobre todo os animo a prepararlo incluso si no la tenéis, porque es muy fácil de hacer y los resultados son deliciosos.