¿Es posible convertir una ensalada en un delicioso plato caliente? Definitivamente sí. Y llevando todos los mismos aromas e ingredientes. Sin muchos cambios sino con la transformación del calor pertinente. La ensalada Caprese es una de las recetas italianas que más lejos han llegado en el mundo, junto con la carbonara, el ragú (mal llamado boloñesa), la pizza y el tiramisú. Efectivamente, acabamos de hacer el menú que cualquier restaurante italiano, hasta en China, tendría.

La clásica ensalada Caprese se elabora a partir de tomate, queso mozzarella fresco, aceite de oliva virgen extra y albahaca. Añadiendo luego un poco de sal y de pimienta negra. Las preparaciones pueden ir de lo más básico y triste hasta lo más elaborado y refinado que uno se pueda pensar.

La base de esta receta es una salsa rápida de tomate, elaborada a partir de tomates enteros en conserva, pero también se podría pensar en un salteado rápido de tomates cherry o en utilizar los tomates cherry asados que se tengan en la nevera (algo que es tremendamente recomendable y que nos puede sacar siempre de un apuro). Luego, sólo habría que cocer los ñoquis y agregar un poco de mozzarella al final, consiguiendo un plato más similar a una ensalada. 

Pero esta receta va por el camino del calor, con su salsa, su suculencia, su queso derretido que se funde con el tomate y que, al meter la cuchara y tirar, se estira haciendo finos hilos deliciosos. La albahaca siempre al final y mejor si es troceada con las manos, pues resulta siempre más aromática. 

Es un plato tremendamente sencillo y básico que se puede hacer todavía más sencillo utilizando algún tomate frito de confianza o casero; mejor si se opta por esta segunda opción.

Si alguien quiere, también podría elaborar los ñoquis caseros, de patata o de boniato, o podría cambiarlos por raviolis, por alguna pasta corta tipo macarrones o por pasta larga como espaguetis.

Si se quisiera, una vez terminado el plato se podría llevar un minuto al horno, con el grill encendido, para crear una capa tostada superior que le daría un punto más de suculencia al plato. Otra opción es dejar preparada la receta con antelación y terminar calentando en el horno para que no haya que hacer nada cuando llegue la hora de comer.

Cómo hacer ñoquis a la caprese

Ñoquis a la caprese Clara Villalón

Ingredientes

  • Tomates pelados en lata, 500 g
  • Aceite de oliva virgen extra, 3 cucharadas
  • Sal, c/s
  • Pimienta negra molida, al gusto
  • Gnocchi de patata, 300 g
  • Mozzarella de Búfala fresca, 1 u
  • Albahaca fresca, 8 hojas

Paso 1

Preparar la salsa de tomate

Paso 2

Cocer los ñoquis

Paso 3

Trocear la mozzarella y la albahaca

Paso 4

Mezclar todo

Paso 1

Disponer en una sartén u olla baja los tomates enteros pelados y añadir el aceite de oliva. Poner a sofreír a fuego suave e ir rompiéndolos poco a poco. Cuando empiece a borbotear, bajar el fuego al mínimo y tapar para que no salpique mucho y se cocinen en su propio jugo. Durante unos treinta minutos. De vez en cuando, ir abriendo y rompiendo los tomates.

Paso 2

Mientras tanto, cortar el queso mozzarella en rodajas no muy gruesas. Separar las hojas de albahaca del tallo y trocearlas ligeramente si se desea.

Paso 3

Cuando el sofrito de tomate ya esté listo y concentrado, añadir un poco más de aceite de oliva virgen extra en crudo y poner a punto de sal y de pimienta negra.

Paso 4

En un cazo con abundante agua y un poco de sal, cocer los gnocchi durante un par de minutos o hasta que floten. Se deben incorporar cuando el agua ya esté hirviendo.

Paso 5

Retirar los ñoquis del agua con la ayuda de una espumadera y llevarlos directamente a la sartén u olla en la que reposa el sofrito de tomate. Mezclar con cuidado de no machacar mucho los ñoquis de patata. Cuando todo esté incorporado, agregar la mozzarella dispuesta por toda la sartén y la albahaca y dejar que el queso se funda ligeramente durante un par de minutos. Servir inmediatamente. También se podría gratinar si se deseara.