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Si se desea cambiar el registro en las recetas con salmón, esta versión estilo Cajún es muy fácil de preparar, rápida también y tremendamente aromática. Este plato es perfecto tanto para una ocasión especial como para el día a día y la forma de cocinarlo, simplemente con el grill del horno hará que el salmón pueda quedar tremendamente jugoso.
La gracia de esta receta recae directamente en las especias, por supuesto, que mezcladas con la mantequilla y con la miel da lugar a una preparación maravillosa que si hacemos de más podremos conservar para ponérsela por encima a cualquier carne, pasta o incluso para untar un sándwich relleno de queso. Para la mezcla de especias Cajún lo más fácil suele ser comprarlas tal cual pero si no se encuentra así, se podría hacer un preparado casero a partir de pimentón, ajo en polvo, cebolla en polvo, orégano, tomillo, cayena molida, semillas de mostaza y pimienta blanca.
Lo primero será batir la mantequilla, que tendrá que estar a punto pomada, y luego ya se mezclará con las especias y con la miel. El secreto está en que el único calor del horno sea el del grill y lo más aconsejable es no cerrar el horno nunca, para que así el salmón quede poco hecho en su interior y, en consecuencia, más jugoso. Este truco lo podríamos utilizar también para otras recetas con salmón como el salmón al horno con cebolla y tomate, el salmón con salsa de cava, el salmón teriyaki con ensalada de algas o el salmón al horno con bacon y cebolla caramelizada.
De acompañamiento, en esta ocasión han sido unas patatas baby cocidas previamente y troceadas con su propia piel y unas piparras en crudo que se cocinan únicamente con el calor del horno. Pero también podrían ser unos tomates cherry asados o una ensalada verde como la ensalada de aguacate, calabacín y queso o una ensalada de col asiática. Si sobra cantidad, este salmón quedará perfecto desmigado y convertido en una crema de salmón estilo Cajún o para terminar un plato de pasta.
Receta de salmón con especias Cajún
Ingredientes
- Lomo de salmón, 700 g
- Mantequilla, 100 g
- Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharaditas
- Mezcla de especias Cajún, 2 cucharadas
- Pimentón ahumado, 1 cucharadita
- Pimienta negra molida, 1/2 cucharadita
- Ajo molido, 1/2 cucharadita
- Sal, 1 cucharadita
- Miel, 2 cucharadas
- Patatas baby cocidas y piparras, de acompañamiento (opcional)
Paso 1
Batir la mantequilla
Paso 2
Mezclar con las especias y la miel
Paso 3
Untar el salmón con sal y aceite de oliva
Paso 4
Terminar en el horno con la mantequilla de especias
Paso 1
Limpiar muy bien los lomos de salmón, quitar las espinas que puedan tener con la ayuda de unas pinzas y trocear el salmón en porciones individuales. Lo mejor será hacer de una plancha de salmón de 700 gramos, cuatro trozos lo más parecidos posible. Reservar en la nevera. Nunca pasar por agua dulce.
Paso 2
Batir la mantequilla, que tendrá que estar a punto pomada, con la ayuda de unas varillas hasta conseguir blanquearla y que quede esponjosa. Como si se montara.
Paso 3
En un bol, mezclar todos los ingredientes del condimento. Añadir a la mantequilla dos cucharadas de las especias (al gusto de cada uno, si queremos que sea más potente sólo habrá que añadir más especias. Incorporar también la miel y batir muy bien.
Paso 4
Trocear las patatas baby hervidas previamente, y enfriadas, y disponerlas en el fondo de la bandeja de horno junto con las piparras. Untar el salmón con un poco de aceite de oliva y añadir un poco de sal y disponerlo sobre la bandeja con la piel hacia abajo.
Paso 5
Calentar el grill del horno a tope y, cuando esté bien caliente, introducir la bandeja durante 2 minutos.
Paso 6
Poner unas perlas de la mantequilla especiada encima del salmón y también algo encima de las patatas y volver a introducir en el horno, en una posición elevada, durante unos cinco o seis minutos hasta que empiece a dorarse por encima.
Paso 7
Espolvorear con un poco más de la mezcla de las especias si se desea y dejar reposar un par de minutos antes de servir. Retirar el salmón y mezclar las patatas y las piparras con lo que quede en la bandeja para que se impregnen de todo el sabor.