El hecho de que su precio sea mucho más asequible que el de otros mariscos no debería quitarle méritos a este marisco tan popular. Los mejillones son un alimento nutritivo y muy versátil a nivel gastronómico.
Si optamos por comprar producto fresco -su buen precio hace que no merezca la pena comprarlos congelados, pues el ahorro será irrisorio y la pérdida de calidad será muy grande-, los mejillones gallegos son de fantástica calidad y no son difíciles de encontrar en los mercados y en las pescaderías de las grandes superficies de la capital.
Así pues, si te has ido a la compra a última hora pensando en comprar marisco para preparar algún aperitivo en la cena de Nochebuena y te encuentras con unos mejillones de Boiro, de Lorbé, de Cabo de Cruz o de Villagarcía de Arosa, no lo dudes, hazte con los kilos que necesites y prepara un festín con el que deleitar a toda la familia.
17 recetas con mejillones fáciles y baratas
Al tratarse de un marisco, los mejillones solo necesitan de una brevísima cocción para estar listos por lo que, con muy poco esfuerzo, podemos tener un plato de mejillones listo para tomar en muy pocos minutos, pues. Incluso cocinados de la forma más simple, con un golpe de vapor para que se abran y rociados con limón recién exprimido, son un verdadero manjar.
Crema de mejillones
Estamos acostumbrados a que los mejillones sean una tapa fría para tomar de aperitivo. Pero ¿cómo te quedas con este pedazo de crema? La versión económica de la crema de marisco que te solucionará la Navidad sin hacerte un roto en el bolsillo.
Mejillones con salsa café de París
La salsa café de París es más conocida por el mítico entrecot del mismo nombre al que suele acompañar, pero esta crema especiada hecha a partir de una mantequilla magistralmente condimentada es también perfecta para preparar otro tipo de platos.
En realidad, la salsa no es más que el resultado de fundir la mantequilla sobre el alimento caliente, pero, a pesar de su simpleza nos consigue trasladar a algún punto de la geografía entre Francia y Bélgica en un santiamén.
Mejillones con vinagreta de limón y albahaca
Una alternativa rápida al escabeche es la vinagreta, pues no necesita de cocción al fuego y enfriamiento posterior para ser consumida. Ambas preparaciones comparten los toques ácidos y el punto de especias que más nos gusten para conseguir que el alimento al que acompañan se luzca.
Mejillones en salsa puttanesca
Con sabores de Italia y servidos sobre una cama de puré de patatas. Se trata de una receta que podemos servir como primer plato o en cucharitas individuales como aperitivo. En ambos casos, el éxito está garantizado.
Mejillones al curry
Lo mejor de servir los mejillones con su concha es que esta sirve para comerse la salsa a cucharadas sin que nadie te mire mal.
En este caso, la salsa de curry verde con leche de coco, combina tan bien con los mejillones que no vas a dejar ni una gota en el plato.
Mejillones cocidos al vapor de albariño
Es la forma más habitual de comerlos en las fiestas populares de Galicia, en las que se consumen kilos y kilos de este bivalvo. Cocer mejillones en casa como si fueras gallego no tiene ningún misterio y el resultado es un festival.
Mejillones en escabeche
Usando como base unos mejillones cocidos, se pueden preparar múltiples recetas, como los mejillones en escabeche, protagonistas absolutos a la hora del aperitivo.
Mejillones en salsa marinera
Se pueden presentar con los mejillones con la concha entera, con media concha o sin ella, sobre todo cuando se trate de grandes cantidades y no tengamos una olla suficientemente grande para que quepan todos.
Ahora bien, es recomendable dejar al menos la media concha que contiene al mejillón porque gran parte de la gracia de estos mejillones en salsa marinera está en usar la concha como cuchara que llenaremos de salsa para comerla junto al mejillón. Un vicio.
Mejillones con tomate y albahaca
Los mejillones y la salsa de tomate siempre han formado un matrimonio muy bien avenido, especialmente si la salsa es casera como en esta receta que te proponemos.
Ensalada de mejillones con tomate
Cuando se hacen mejillones en escabeche, hay que hacer muchos, para que sobren, porque se conservan genial en la nevera y con ellos se puede preparar esta deliciosa y refrescante ensalada, perfecta para convertir el escabeche en un plato único sorprender a todos a la hora del aperitivo.
Mejillones en salsa de vieira
Hacedme caso, preparad estos mejillones en salsa de vieira. Si no tenéis conchas de vieira y las de los mejillones se os antojan pequeñas, podéis usar cazuelitas individuales para gratinar. El resultado es de chuparse los dedos y os aseguro que no echaréis de menos el haber gastado un dineral en un marisco más caro.
Mejillones rebozados
Si tenéis que organizar un picoteo para mucha gente, no lo dudéis, los mejillones no pueden faltar, pues son un éxito tanto si la receta es sencilla como si es un poco más elaborada como la de estos mejillones rebozados.
Será también un éxito si ofrecéis diferentes aperitivos a base de mejillones.
Mejillones en salsa picante
No sé si en otros sitios se les llama así a los mejillones con salsa picante, pero yo cuando pienso en esta receta no puedo evitar recordar los míticos tigres rabiosos de la calle Torreiro en A Coruña. Todo un lujo si se acompañan de una buena taza de vino de Ribeiro.
Mejillones de roca en salsa picante
Se diferencian de los mejillones de batea en que son de tamaño más pequeño y se limpian con facilidad, aunque a la hora de servirlos son menos vistosos. La salsa picante que los acompaña se hace en un visto y no visto.
Al ser más pequeños, son muy fáciles de comer y resultan tan adictivos que desaparecen de la mesa en un abrir y cerrar de ojos.
Empanada gallega de mejillones
Una receta que es el summum de la galleguidad y que es mucho más fácil de hacer de lo que piensas. Esta empanada de mejillones será el motivo por el que te harán la ola si la preparas la próxima vez que lleves algo de comer a casa de alguien.
Las empanadas viajan bien y se conservan bien si sobra algo (aunque si está tan rica como esta, lo más probable es que no sobre nada).
Mejillones encapotados
En otras zonas en cambio, se conocen como mejillones tigre a estos mejillones encapotados, que llevan una bechamel de marisco con la que se rellena la concha, se rebozan y se fríen. Un escándalo lo buenos que están.
Son como una croqueta enorme dentro de una concha de mejillón y, cuando los pruebas, ya no quieres parar de comerlos.
Mejillones tigre de Clara Villalón
Tanto nos gusta esta receta que no he podido resistirme a dejaros también la versión que prepara nuestra compañera Clara Villalón. Tienen un toque picante irresistible y son toda una reivindicación de esta tapa que se ha quedado un poco viejuna, pero que triunfa siempre que desfila por la mesa.