El salmón ahumado es un producto que aguanta bastantes días en la nevera, más que el pescado fresco, y que podemos consumir sin necesidad de cocinarlo, por lo que es una opción rápida para consumir pescado.

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Desde el punto de vista nutricional, los pescados ahumados conservan prácticamente todos los nutrientes presentes en el pescado fresco -proteínas de calidad, ácidos grasos omega-3 y diferentes vitaminas y minerales-.

Por la propia técnica de elaboración, en los pescados ahumados aumentan ligeramente el contenido de proteínas y sodio. La aplicación de calor en la técnica del ahumado hace que se desnaturalicen las proteínas, permitiendo que la carne se ablande y sea más digerible.

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Según indica la Fundación Española de la Nutrición, el salmón ahumado es una fuente de proteínas, ácidos grasos insaturados -saludables-, minerales como potasio, fósforo o selenio y vitaminas D, niacina, B6 y B12.

Respecto al salmón fresco, indica la citada fundación, que el salmón ahumado «presenta un contenido algo mayor de proteínas (25,4 g respecto a 18,4 g) y menor de grasas (4,5 g frente a 12 g). El contenido en minerales disminuye levemente para todos los oligoelementos, excepto en el caso del sodio, que aumenta. Debido a este aporte extra de sal, el consumo de este producto debe ser moderado en quienes deban seguir dietas con control de sodio».

«El consumo de alimentos ahumados es totalmente seguro para toda la población, a excepción de las embarazadas, que deben evitar el consumo de pescado crudo, y son opciones muy versátiles para incluir en cualquier momento del día. Así, incorporar por ejemplo salmón ahumado para cenar es una forma diferente, fácil y deliciosa de añadir más pescado en nuestra dieta», confirma Yaiza Quevedo, responsable de Nutrición y Salud del grupo Angulas Aguinaga.

Un producto típico de las fiestas que también es para el día a día

Aunque el salmón ahumado es un producto que asociamos a aperitivos de comidas de fiesta, sus buenas propiedades nutricionales y su facilidad a la hora de consumirlo hace que también sea un producto a tener en cuenta para nuestros menús diarios.

Desde Royal nos sugieren tres recetas muy sencillas que podemos preparar en distintos momentos del día.

Montaditos de salmón ahumado

Paso 1

Mezclamos la mantequilla blanda con el queso azul ayudándonos con un tenedor y untaremos con esta pasta los panecillos.

Paso 2

Para preparar el montadito, sobre una mitad del pan untada con la pasta anterior, colocamos la rúcula, el aguacate en láminas y el salmón ahumado.

Paso 3

Tapamos con la otra mitad del pan.

Ensalada de salmón ahumado en frasco

Paso 1

Colocar todos los ingredientes en un frasco formando capas.

Paso 2

Preparar nuestro aderezo favorito en un pequeño frasco aparte.

Paso 3

Mantener en la nevera hasta el momento de consumir. En ese momento, mezclar con el aliño.

Bocaditos de salmón ahumado

Paso 1

Tostamos las rebanadas de pan. Lo de quitarle la corteza es opcional, si te molesta, se la quitas y si no, pues se la dejas.

Paso 2

Cortamos las rebanadas en triángulos, las untamos con el queso crema y les ponemos un poco de sal y pimienta recién molida por encima.

Paso 3

Cubrimos con las lonchas de salmón ahumado y rematamos con un poco de cebollino fresco picado.