Pepito de secreto ibérico con cebolla caramelizada, parmesano y reducción de Cabernet Sauvignon
Un delicioso pepito de secreto ibérico gourmet con cebolla caramelizada, parmesano y reducción de vinagre de Cabernet Sauvignon.
28 septiembre, 2017 21:50- Total: 45 min
- Comensales: 2
En ocasiones pensamos que los bocadillos son comida rápida, sin gracia o que se hacen con cualquier cosa. Hay bocadillos, y bocadillos. El que os presento hoy, el pepito de secreto ibérico con cebolla caramelizada, parmesano y reducción de Cabernet Sauvignon, lo hacen el rey de los bocadillos en casa. Te aseguro que cuando acabes de leer la receta desearás ponerte a prepararlo. La mezcla de sabores y la jugosidad del secreto ibérico, hacen de cada bocado un auténtico placer en el paladar.
Ingredientes para hacer el pepito de secreto ibérico
- Secreto ibérico, 400 g
- Queso parmesano, 100 g
- Cebolla mediana, 1 ud
- Azúcar moreno, 4 cucharadas
- Vinagre de Cabernet Sauvignon, 265 ml
- Rúcula y canónigos
- Pimienta negra
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal en escamas
- Pan de cristal o chapata, 300 g
- Tomate maduro, 2 uds
- Aceite de oliva virgen extra, 3 cucharadas
Tan sólo necesitaras seguir los pasos que te detallo a continuación y el éxito está asegurado. Podríamos decir que es un bocadillo gourmet y por lo tanto requiere de una cierta elaboración si lo comparamos con otro tipo de bocadillos más comunes.
Elaboración del pepito de secreto ibérico con cebolla caramelizada, parmesano y reducción de Cabernet Sauvignon
01: Cocinar la cebolla
Empezaremos echando el aceite de oliva virgen extra en la sartén a fuego medio – bajo. A continuación, echamos la cebolla cortada en juliana. Tapamos y dejamos que sude durante unos 15 o 20 minutos a fuego bajo. Una vez veamos que ha empezado a transparentar, agregamos 2 cucharadas de azúcar moreno y 15 ml de vinagre Cabernet Sauvignon. Removemos y dejamos que caramelice durante aproximadamente otros 15 minutos. Reservamos.
02: Preparación de la reducción del vinagre de Cabernet Sauvignon
En un cazo a fuego medio echamos 250 ml de vinagre Cabernet Sauvignon. Dejamos que reduzca aproximadamente hasta la mitad. En ese momento agregamos 2 cucharadas de azúcar moreno. Disolvemos bien y dejamos que siga reduciendo hasta conseguir una textura algo espesa. Cuando enfríe, la textura se hará más espesa, por eso no conviene reducir en exceso. Una vez conseguida la textura deseada, reservamos.
03: Asar la carne
Ponemos la sartén o plancha a calentar sin nada de aceite ya que el secreto ibérico contiene bastante materia grasa y no necesitamos más. Echamos la pimienta negra por ambos lados del secreto ibérico y una vez que la plancha esté humeante, marcamos por ambos lados hasta que se dore. Automáticamente bajamos el fuego para que se acabe de cocinar perfectamente ya que normalmente suelen ser filetes bastante gruesos. Cabe recordar que la carne de cerdo debe quedar bien cocinada para evitar cualquier riesgo de intoxicación alimentaria. Cuando veamos que ya está bien hecho retiramos de a plancha y echamos unas escamas de sal Maldon.
04: Montaje del bocadillo
Abrimos nuestra barra de pan de cristal o chapata en dos. Podemos calentar ligeramente el pan en la tostadora. A continuación, untamos con tomate el pan y ponemos la carne, el queso parmesano por encima, la cebolla caramelizada y la salsa al gusto. Por último, agregamos los brotes que teníamos reservados.
05: Servir
Sin dejar pasar más tiempo servimos directamente este bocadillo gourmet. Debemos consumirlo en el momento justo después de acabar su preparación. Es cuando el queso se habrá fundido por el calor que desprende el secreto ibérico y todos los ingredientes estarán en su punto óptimo.
Resultado
Como podéis observar a simple vista el pepito de secreto ibérico nos invita a degustarlo sin pensárnoslo dos veces. No obstante, lo recomendable antes de hacer este delicioso bocadillo, sería tener una buena mise en place. Es decir, disponer de todos los ingredientes preparados con antelación y a mano con tal de que al acabar de cocinarse la carne, podamos montar el bocadillo sin demoras.
Es un bocadillo que va perfecto para una cena informal con los amigos y al que podemos acompañar de una ensalada o de unos chips de patatas. Os aseguro que no quedarán ni las migas.