Pastel de leche griego, galatopita o Ruffled milk pie, postre fácil y vistoso
Sorprenderás a todos con esta galatopita o pastel de leche griego, mucho más fácil de hacer de lo que piensas y con un resultado muy vistoso.
27 enero, 2019 13:26- Total: 1 h
- Comensales: 4 - 6
Este pastel de leche griego, llamado Galatopita en su país de origen, es mucho más sencillo de lo que en principio pudiera parecer, y una forma muy original de presentar unos ingredientes a los que estamos más que acostumbrados. Traducido al inglés como Ruffled milk pie (pastel arrugado de leche), combina a la perfección la cremosidad del flan con el delicioso y delicado crujiente de la masa filo.
Ingredientes del Pastel de leche griego
- Masa filo, 250 g
- Leche, 400 ml
- Huevos, 3
- Azúcar, 125 g
- Limón, monda
- Esencia de vainilla, 1 cucharadita
- Canela en rama, 1
- Mantequilla, 80 g
- Azúcar glas, 25 g
Preparación del Pastel de leche griego
01: Hornear la masa filo
Antes de nada precalentamos el horno a 175ºC, con calor arriba y abajo.
En un cuenco derretimos la mantequilla aproximadamente 1 minuto en el microondas, bajar un poco la temperatura, parar a mitad de tiempo y remover. Yo suelo taparla con un trozo de papel de cocina por si acaso, si se calienta demasiado puede explotar y provocar un pequeño y sucio desastre en nuestro microondas.
Con la ayuda de un pincel engrasamos el molde con la mantequilla derretida.
Extendemos en la mesa la masa filo y pincelamos la primera lámina con un poco de la mantequilla. La arrugamos a lo largo como si fuera un acordeón o un abanico, sin pararnos mucho, no tiene que quedar perfectamente doblada, simplemente con la mantequilla por fuera para no engrasarnos todas las manos y ya está.
La enrrollamos sobre si misma y la colocamos en el centro del molde. Seguimos con el resto de las hojas, pincelando y arrugando, y podemos ir colocándolas alrededor de la primera o formando pequeños círculos por todo el molde, queda precioso de ambas formas, una gran flor, o un ramillete de flores. En cuanto hagas un par ya le coges el truco y acabarás en un periquete.
Metemos en el horno 10 minutos, quedará crujiente y ligeramente dorada.
02:Preparar la mezcla para la crema de leche
Mientras tanto calentamos la leche en un cazo con la monda de limón, una rama de canela y una cucharadita de esencia de vainilla. Cuando empiece a hervir bajamos un poco el fuego y al cabo de un minuto retiramos.
Batimos los huevos en un bol junto con el azúcar, y le añadimos la leche, a la que le hemos retirado la rama de canela.
03: Pasar la mezcla de la crema al molde
Vertemos esta mezcla en el molde, por encima de la masa filo, y metemos nuevamente en el horno, pero sólo con calor abajo para que cuaje pero no se queme la masa filo, a 175ºC, durante 20 minutos, comprobando que esté cuajada pinchando con un palillo y que éste salga limpio.
04: Servir el pastel de leche griego
Cuando esté fría la espolvoreamos con azúcar glas con ayuda de un colador para que quede mejor repartido, y servimos.
El resultado es espectacular, muy rica y muy vistosa, pero ya véis que muy sencilla de preparar. El momento del corte es sorprendente, un crujido que dejará a todos intrigados y expectantes, y finalmente agradecidos y deseosos de que les paséis la receta!
Notas
La masa filo es una masa que viene en muy muy finas láminas, no es una masa sencilla de hacer en casa, muy laboriosa y delicada, así que suelo comprarla en el súper cada cierto tiempo. Las masas refrigeradas dan mucho juego a la hora de preparar todo tipo de tartas, empanadas o quiches, claro está que una buena masa casera no tendrá comparación, y no son todas tan laboriosas como la filo, pero estas te sacarán de muchos apuros, sobre todo cuando no tenemos mucho tiempo.