Tarta de queso y café, un postre fácil de hacer y difícil de olvidar

La tarta milhojas es una de las más populares de España y la receta de hoy parte de ese concepto haciendo un hojaldre caramelizado fino y rellenándolo de una crema de queso y café. La base de esta crema de queso y café es una crema pastelera tradicional, pero que sustituye la leche por un poco de café y queso mascarpone que da más cuerpo a la crema.

La elaboración de la crema tiene el mismo inconveniente que la de la crema pastelera o crema inglesa y es que hay que tener mucha delicadeza para que no se cuaje en el fuego. Clave es la utilización de unas varillas en todo el proceso. A los amantes del café también les encantarán recetas como el café de pistacho, el caramel macchiato frappucino o el café Dalgona.

Lo malo de esta tarta es que, una vez se monta, se tiene que comer rápidamente porque el hojaldre se 'moja' y se empieza a quedar correoso. No es una tarta que se pueda elaborar y se deje hecha con antelación en la nevera. Lo que sí se puede es dejar el hojaldre caramelizado por un lado y la crema preparada y en frío por el otro y montar la tarta cuando a cada uno le interese. La decoración por encima puede ser siempre al gusto de cada uno.

Cómo hacer un milhojas de hojaldre, queso y café

Paso 1

Precalentar el horno a 180 ºC. Cortar la plancha de hojaldre a la mitad, será lo que se utilice de la misma. A su vez, ese trozo se parte a la mitad de nuevo que es lo que se empleará. Disponer el hojaldre sobre un papel de horno encima de una bandeja apta para el horno, espolvorear con el azúcar glas toda la superficie y tapar con otro papel de hornear. Poner una bandeja encima y algo de peso para que el hojaldre no se infle. Meter en el horno y dejar que se caramelice durante unos 10 minutos. Hay que tener mucho cuidado porque se corre el riesgo de que se queme con mucha facilidad. Tras este tiempo, sacar del horno y dejar enfriar.

Paso 2

Para hacer la crema de café y queso, lo primero será hacer el café. Un café espresso alargado hasta la cantidad necesaria. Separar las claras de las yemas, las claras no se utilizarán en este caso.

Paso 3

En el bol con las yemas añadir el azúcar y la fécula de maíz y mezclar bien con unas varillas. En un cacillo calentar un poco el café si se ha enfriado y verter sobre la preparación anterior. Añadir también la leche y el queso mascarpone. Mezclar bien.

Paso 4

Poner todo en el cacillo de vuelta y llevar al fuego a potencia media, removiendo constantemente. Es importante remover con varillas para que no se corte la preparación. Tenemos que esperar a que espese, pero con cuidado y delicadeza, dar mucho fuego puede significar cortar la crema.

Paso 5

Cuando la crema ya tenga consistencia, separar del fuego y añadir la mantequilla que se derretirá con el calor residual de la preparación. Tras esto, verter en una manga pastelera y dejar enfriar completamente. En la nevera tardará unas 12 horas.

Paso 6

Cuando se vaya a montar la tarta, cubrir una parte del hojaldre con la crema de queso y café y poner el otro hojaldre caramelizado por encima. Decorar la capa superior con el azúcar glas y el polvo de chocolate o cacao al gusto de cada uno. Se pueden hacer formas utilizando plantillas.