A los postres sin horno habría que hacerles un monumento. Son fáciles de hacer y, con apenas unos minutos de trabajo, el resultado es tan bueno como aquellos que pasan por cocciones lentas o llevan más trabajo. La tarea se facilita aún más si cabe, cuando estos se hacen en formato vasitos, pues el tiempo de reposo que suele ser necesario para que estos cojan cuerpo, se reduce drásticamente en comparación a si se hace en formato tarta. Además, son más fáciles de transportar y de servir.

Parece así un pecado, comprar cualquier postre industrial de los que se encuentran en la sección de refrigerados del supermercado, pudiendo pecar igualmente elaborándolo en casa y evitando así conservantes e ingredientes poco naturales. Estos vasitos requieren pocos ingredientes y muy poco tiempo de preparación y, además, se congelan de fábula por lo que es buena opción tenerlos en la recámara para momentos en los que se quiera resolver sin trabajar.

Es el caso de estos vasitos de crema de chocolate, con topping de galletas. Ideales para aquellos que aman el chocolate, son el perfecto fin de fiesta para una comida de diario o celebración. Eso sí, en pequeñas dosis, pues la crema resultante es saciante y de textura densa, por lo que habrá que escoger para su presentación, unos vasos de tamaño tirando a pequeño.

Esta crema está pensada para amantes del chocolate, como bien pueden ser también los brownies con almendras o la tarta de galletas y chocolate estilo la tarta de la abuela, utilizando una tableta de chocolate con el 70 % de cacao, pero puede emplearse igualmente otro chocolate con un porcentaje menor o hacer una mezcla de varios.

Incluso se pueden utilizar chocolates con sabores, que se encuentran fácilmente en grandes superficies, con el toque picante del chile, naranja, o café para ir variando la receta si esta se convierta en un básico de nuestro recetario, bien pudiendo incorporar uno mismo esos sabores también de manera casera con trocitos de naranja confitada, polvos de chili, o café soluble, por ejemplo, una vez se tenga el chocolate derretido.

Cuanto mejor sea la calidad de la tableta, eso sí, mejor resultado se obtendrá, pues es un postre que no lleva muchos ingredientes y la diferencia entre ingredientes de calidad u otros peores será clave.

Esta crema se ha de dejar reposar un mínimo de una hora en la nevera, pero merecerá la pena la espera, igual que sucede con estos otros postres en formato vasitos como el banoffee, el tiramisú de cerveza Guinness o la tarta selva negra

Cómo preparar vasitos de chocolate y galleta paso a paso

Ingredientes

  • Queso crema o mascarpone, 150 g
  • Chocolate negro 70 %, 120 g
  • Nata para montar, 50 ml
  • Azúcar glás, 1 cucharada
  • Cacao en polvo, 1 cucharada
  • Galletas tipo Digestive, 8 u
  • Sal, una pizca

Paso 1

Triturar las galletas

Paso 2

Derretir el chocolate

Paso 3

Hacer la crema de chocolate

Paso 4

Enfriar los vasitos y colocar la galleta

Paso 1

Derretir el chocolate troceado, al baño María. Para ello, colocar un cazo con agua casi hasta llegar al borde, a calentar sobre el fuego, y sobre este, asegurando de que toque el fondo del recipiente toque el agua, colocar un bol con el chocolate.

Se podrá hacer en la función de descongelar del microondas igualmente, a intervalos cortos de unos segundos, removiendo entre cada intervalo. Esto evitará que el chocolate se queme.

Paso 2

Añadir una vez derretido la sal y el cacao el polvo, opcionalmente, para un sabor mayor a chocolate.

Paso 3

Con la ayuda de un tenedor, remover el queso crema (para lo que será útil haberlo dejado a temperatura ambiente unos minutos antes) y mezclarlo con el azúcar glas.

Paso 4

Montar la nata con la ayuda de unas varillas eléctricas. Mezclar el chocolate derretido, con la nata y el queso crema hasta obtener una crema bien homogénea.

Paso 5

Pasar inmediatamente a los vasitos individuales y refrigerar automáticamente para que cojan buena consistencia.

Paso 6

Triturar las galletas, bien con una batidora, o un vaso batidor. También se pueden colocar en una bolsa y darle golpes con la ayuda de un rodillo de cocina. Colocar el polvo de galletas en los vasitos sobre la crema de chocolate y refrigerar hasta el momento de consumir.