No hemos llegado aún a la mitad del invierno y aún nos quedan unas cuantas semanas en las que los termómetros registrarán valores mínimos. Pero como en Cocinillas no vamos a dejar que eso nos quite el buen humor, os proponemos 10 deliciosas recetas de sopas de invierno para no enterarnos ni de que hace frío.
10 sopas de invierno con sabores de medio mundo
Porque hay mucha vida más allá de la sopa de pollo con fideos, os proponemos recetas para todos los gustos, veganas, vegetarianas, tradicionales e internacionales. Algunas hechas a fuego lento durante horas y otras improvisadas en pocos minutos, el caso es que todas serán una cena deliciosa para las noches más frías.
Sopa de setas shitake
Para los amantes de la cocina asiática esta acabará siendo una sopa de cabecera, pues está lista en solo unos minutos y además es muy ligera y fácil de digerir.
Ramen hecho a la manera tradicional
El ramen está de moda, y por si fuera poco, disfrutar de un buen ramen en casa no es difícil. Tú eliges si quieres cocinarlo de la manera tradicional o si prefieres tomar algún atajo como en la receta que te propondremos más abajo.
Sopa de cebolla exprés
En invierno nunca debería faltar una olla de caldo limpio en la nevera, porque eso nos permite improvisar sopas maravillosas sin perder más tiempo que el que tarda en calentarse el caldo. Como esta sopa de cebolla simplificada que nos ha llevado 3 minutos de reloj.
Sopa de miso y tofu
Quizá no es tan conocida como el ramen, pero la sopa de miso es otra sopa típica de Japón que aparte de estar buenísima es nutritiva, ligera y reconfortante, sobre todo cuando notas que estás pillando un resfriado. En esta ocasión, os proponemos una versión vegana -sin caldo dashi- que está para chuparse los dedos.
Caldo gallego
Y saltamos de Japón a nuestra tradición, pues si hay una receta que es seña de identidad de mi querida Galicia es el caldo gallego. Una sopa que históricamente ha formado parte de nuestra gastronomía y que originariamente era el principal sustento de la población. Es curioso, porque cuando el dinero escaseaba, el caldo gallego era una sopa hecha a base de habas, patatas y grelos que se cocían con un poco de unto -grasa rancia- para darles sabor. Si uno se para a pensarlo, se trata de una sopa muy equilibrada que aporta carbohidratos de asimilación lenta, fibra, las proteínas de la legumbre y una cantidad mínima de grasa.
Después de esta minireflexión nutricional, para los que no viváis en Galicia y os cueste encontrar los grelos, os doy una buena noticia, y es que el caldo también se puede hacer con berza o con repollo y ahora, desde que las berzas están de moda y se llaman kale, se venden en todas partes.
Sopa de huevo rápida
Otra sopa, que recuerda lejanamente al típico gazpachuelo malagueño, pero en versión ultramegarrápida es esta sopa de huevo que se prepara en lo que se calienta el caldo -o el agua si no tienes caldo- y para la que solo necesitas un huevo y un poco de aceite y vinagre.
Ramen fácil con lo que tienes por casa
Y como lo prometido es deuda, aquí va otra forma de preparar un ramen delicioso pasando menos trabajo.
Sopa de verduras perfecta
Otra sopa de las de toda la vida para las que no hay una receta concreta, pero sí unas pequeñas reglas que os contamos en su momento para conseguir la sopa de verduras perfecta.
Sopa de pescado rápida
Y si lo que buscas es una sopa para sorprender en una cena formal, esta sopa de pescado y marisco te hará quedar como un chef. Y no se lo digas a nadie, pero se hace en un momento en el microondas.
Sopa de cebolla ligera
Y terminamos con una receta de sopa de cebolla un poco más elaborada, para cuando no tengamos los ingredientes tan a punto como en el caso de la receta exprés. En esta se tarda un poquito más, pero es igual de fácil.
Y esta es nuestra propuesta para llenar las soperas este invierno y calentar el estómago antes de irnos a dormir.