El turrón es un dulce de origen español que tiene un gran protagonismo en las fiestas navideñas, donde se convierte en un imprescindible en cualquier mesa. Aunque en el mercado podemos encontrar cada vez más opciones entre las que elegir, algunas de ellas con sabores muy exóticos y alejados de las elaboraciones tradicionales, existe la posibilidad de que puedas preparar esta delicia de una forma simple por ti mismo/a y con solo dos ingredientes.

El turrón navideño puede ser blando o duro en su textura, lo que dependerá de la forma en la que se elabore. En el caso del primero nos encontramos con un postre que se prepara con masa molida de miel, azúcar, clara de huevo y almendras, mientras que, si se prepara el duro, habrá que optar por una masa de miel, azúcar, clara de huevo y almendras enteras, que pueden estar acompañadas de oblea.

Al contrario de lo que pueda parecer, hacer un turrón navideño es mucho más rápido y sencillo de lo que se piensa, y es que con solo estos dos ingredientes podrás prepararlo de manera sencilla en casa: 300 gramos de azúcar y 200 gramos de maní tostado sin sal.

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Una vez reunidos ambos, el primer paso de la receta consiste en hacer el caramelo, para lo cual se debe añadir el azúcar a una olla y revolver hasta que se consiga alcanzar esta consistencia, debiendo quedar este dorado y translúcido. Cuando lo haya hecho, retirar del fuego y agregar el maní tostado sin sal, mezclando bien para que la legumbre se impregne del caramelo.

Hecho lo anterior solo habrá que colocar la preparación en una placa aceitada y aplastar con una cuchara para distribuir la mezcla de manera uniforme. Finalmente, se deben cortar en caliente las porciones y esperar a que se enfríe para que esté listo para comer y disfrutar esta Navidad.

Si quieres disfrutar de otros sabores, tan solo tendrás que cambiar el maní por nueces, pistachos, almendras o cualquier otro ingrediente similar, y conseguirás preparar un turrón casero con el que sorprender a tus comensales en estas fiestas.

¿Es sano el turrón?

La Navidad es para muchos un sinónimo de grandes atracones gastronómicos, en un momento del año en el que la agenda de cenas y comidas copiosas está más apretada que el resto del año. En estas fechas tan especiales los dulces tienen un lugar privilegiado en la mesa, y aunque hay algunos típicos de esta época como los polvorones o el roscón de reyes, el rey indiscutible es el turrón.

Hay quienes se preguntan acerca de lo saludable que es ingerir este dulce, y en este sentido hay que recalcar que, al igual que sucede con cualquier otro alimento, debe ser consumido sin excesos, pero en este caso también se debe ser consciente de que nos encontramos ante un dulce bastante calórico. No obstante, no todo es malo, ya que es una buena fuente de fibra y contiene grasas que ayudan a reducir el colesterol malo (LDL) y subir el bueno (HDL).

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Entre los principales ingredientes de este dulce acostumbramos a encontrar la almendra o la miel, que en ambos casos tienen propiedades muy beneficiosas para la salud, por lo que, al contrario de la creencia popular, el turrón es un alimento saludable. No obstante, en el caso de los diabéticos, de los alérgicos a alguno de sus ingredientes o de tener tendencia al sobrepeso, habrá que prescindir de comerlo, o en su defecto hacerlo en mínimas cantidades para no sufrir ningún problema de salud.

Por otro lado, aunque hablemos de que se trata de un postre saludable, solo lo será cuando se consuma de forma moderada, lo que no siempre es sencillo porque su irresistible sabor se convierte en una adicción. Para que te hagas una idea, por 25 gramos de turrón, que viene a ser una barra del grosor de un dedo y medio de anchura, aporta 115 calorías.

¿Qué turrón es el más sano?

Todo turrón que esté próximo a lo artesanal y esté alejado de lo industrial será lo más saludable, si bien hay que recalcar que aquellos elaborados a base de almendras son los más naturales. Por lo tanto, aquellos turrones que añaden otros ingredientes para ofrecer otros sabores, como es el caso del licor, el chocolate, la yema de huevo u otro condimento, son más grasos y esto hace que sean menos sanos. De hecho, cada vez es más frecuente que nos encontremos con turrones que tienen otros frutos secos como base, además de opciones con frutas deseadas.

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Por otro lado, en lo que respecta a los turrones sin azúcar, es aconsejable pararse a leer su composición con detenimiento, ya que, aunque a priori se asocie a que estos son sanos, el hecho de que no contengan azúcar o lleven una cantidad inferior a la habitual, normalmente son igual o más calóricos que los otros.

De esta manera, aunque lo más saludable, siempre será preparar tú mismo el turrón de Navidad de forma casera, como en la receta que te traemos y que puedes elaborar rápidamente con solo dos ingredientes, en el caso de que acudas al supermercado, trata de optar por aquellos turrones que sean más sanos, para lo cual debes fijarte en su composición.