Indudablemente adictivas son las albóndigas de carne bañadas en salsa casera de tomate y su multitud de variantes como las albóndigas a la meuniere, las albóndigas en salsa de la abuela, las albóndigas de cordero a la menta, las albóndigas de calamares y langostinos o las albóndigas de sardina con tomate.

Pero bien sea por dietas restrictivas, elección personal o simplemente por querer variar la dieta, el uso de la proteína puede quedar relegado en aras de incrementar el tan recomendado consumo de legumbres y cereales distintos al trigo.

Con esta premisa, estas albóndigas de lentejas y quinoa, podrán considerarse veganas si se siguen a pies juntillas los ingredientes de la receta. Pero son totalmente personalizables para aquellos que sean vegetarianos o sean de los que comen de todo.

Así, por tanto, la levadura nutricional se podría intercambiar por queso parmesano en polvo, y el caldo podría ser de carne o de pollo en vez de verduras.

Igualmente pueden emplearse solo lentejas o sustituir la quinoa por otro cereal como pueda ser el arroz.

En cuanto a la salsa, es común en dietas veganas el uso de los anacardos, como en este requesón vegano, pero estas albóndigas bien se podrán acompañar de una salsa de tomate u otra que se desee. Esta masa de albóndigas va bien con casi todo. Habrá que aliñarla, eso sí, muy bien, para que no resulte plana de sabor, para lo cual será necesario mezclarla con un buen sofrito, especias y la levadura nutricional (o parmesano en su defecto).

Fuente de proteína vegetal, estas albóndigas son también aptas para celiacos (ojo con la avena, que puede contener trazas, en cualquier caso, habría que escoger aquella certificada y libre de estas) y aportan vitaminas, minerales y ácidos grasos omega 6 tan beneficiosos para el cuerpo.

Otras alternativas para disfrutar sin carne podrían ser las berenjenas guisadas con quinoa, unos canapés de sobrasada vegetal, unos tacos veganos o la mousse de chocolate vegana

Cómo hacer albóndigas de lentejas y quinoa

Albóndigas de lentejas y quinoa Clara Villalón

Ingredientes

Para las albóndigas

  • Lentejas, 100 g
  • Quinoa, 100 g
  • Copos de avena, 30 g
  • Pimiento verte tipo italiano, 1 u
  • Cebolla pequeña, 1 u
  • Dientes de ajo, 2 u
  • Levadura nutricional, 4 cucharadas
  • Sal, c/s
  • Pimienta negra molida, c/s
  • Orégano, 1/2 cucharadita
  • Aceite de oliva virgen extra, 2 cucharadas

Para la salsa

  • Anacardos crudos, 50 g
  • Agua, 100 ml
  • Vinagre de manzana, 1 cucharadita
  • Mostaza, 1 cucharadita
  • Harina de arroz, 1 cucharada
  • Caldo vegetal, 100 ml
  • Sal, c/s
  • Pimienta negra molida, 1/2 cucharadita
  • Perejil fresco, para terminar y decorar

Paso 1

Cocer las lentejas y quinoa

Paso 2

Preparar las albóndigas

Paso 3

Hacer la salsa

Paso 4

Terminar las albóndigas con la salsa

Paso 1

Lo primero será cocer la legumbre y la quinoa, y poner los anacardos a remojo en cuenco cubiertos de agua.

Opcionalmente habremos dejado las lentejas a remojo unas horas antes. Estas se cocerán en una olla con agua y sal hasta que estén tiernas, durante unos 20-30 minutos.

Por otro lado, lavar la quinoa, y ponerla a cocer con el doble de agua, en una olla con sal. Esta tardará unos 15 minutos.

Paso 2

Picar muy finamente la cebolla, el pimiento y los ajos. Pochar primero la cebolla en una sartén con un poco de aceite, y cuando esté transparente añadir el pimiento y el ajo.

Paso 3

En un bol grande, añadir las lentejas, la quinoa, los copos de avena, el sofrito, la levadura nutricional y las especias. Integrar todo bien con la ayuda de un tenedor, y triturar levemente para conseguir la masa de las albóndigas. Probar entonces la masa, y corregir si fuese necesario de especias y levadura nutricional según el gusto hasta que se considere están bien aliñadas.

Paso 4

Colocar un cuenco con agua, humedecer las manos, y tomar con ellas porciones de masa para darle forma a las albóndigas. Una vez terminada, se llevarán a la nevera durante 1 hora. Esta masa se puede dejar preparada igualmente con anterioridad, incluso el día de antes.

Paso 5

Mientras tanto, preparar la salsa. Escurrir los anacardos y colocarlos en un vaso triturador con el resto de ingredientes de la salsa, excepto la harina y el caldo vegetal.

Paso 6

Verter en una sartén a fuego medio, e incorporar la harina para espesar la salsa. Una vez la harina esté bien integrada, añadir el caldo en varias tandas hasta conseguir una textura cremosa. Rectificar de sal y pimienta si fuese necesario.

Paso 7

Una vez hayan reposado en la nevera, en otra sartén, con un poco de aceite, marcar las albóndigas por todos los lados y añadirlas a la salsa de anacardos.

Paso 8

Servir con unas hojitas de perejil fresco, y más levadura nutricional o queso.