Ni todas las variedades de maíz sirven para hacer palomitas ni el maíz es el único cereal que se infla cuando lo calentamos. Lo que sucede es que el maíz, dependiendo de la variedad, se infla de forma más artística y por eso es algo más popular.
Pero aunque ahora no caigas, seguro que en algún momento has comido arroz inflado como, por ejemplo, ese arroz de los restaurantes chinos sobre el que echan una salsa caliente y parece que chisporrotea, o los mismos crispis de los paquetes de cereales para el desayuno, o trigo inflado, que son los más habituales, aunque también podríamos inflar otros cereales como la cebada, la avena, el sorgo, el amaranto o, incluso sin llegar a ser un cereal, la quinoa.
Cómo hacer palomitas con otros cereales que no sean maíz
En principio, la técnica para hacer estallar los granos de cereal es idéntica a la de hacer las palomitas de maíz, es decir, se ponen los cereales en la sartén muy caliente y se remueven con cuidado hasta aunque para revienten, algunos otros prefieren cocer previamente los granos de cereal, secarlos y, finalmente, inflarlos.
En algunos casos, como en el del maíz, el estallido de las palomitas es tan brusco que deben hacerse con la tapa puesta, en otros en cambio es más leve y pueden hacerse sin tapar. También hay que contar con que algunos cereales, si no se cuecen previamente, requieren temperaturas muy elevadas y exactas para inflarse y necesitan aceite como si de una fritura se tratase.
En el vídeo que os pongo a continuación podéis ver que basta con “freír” cualquier variedad de arroz a la temperatura correcta (230ºC en este caso) para que los granos se inflen y queden como los de la foto de portada.
En este otro vídeo, nos muestran la otra forma de hacerlo, que consiste en cocer el cereal -arroz, trigo, avena…-, escurrirlo, ponerlo estirado sobre una bandeja para que se seque hasta deshidratarse -podemos hacerlo dejando la bandeja al sol, si el tiempo lo permite, o dejando la bandeja en el horno el tiempo suficiente a una temperatura de unos 90 – 100ºC- y finalmente freír los granos en aceite hirviendo. La misma técnica puede emplearse con otros cereales como el trigo, la espelta, la avena o la cebada y es importante utilizar un colador que nos permita retirar los granos rápidamente cuando se inflan para evitar que se quemen.
Cómo inflar cereales sin freírlos
También es posible inflarlos sin freír, calentando una olla a fuego vivo y, cuando esté a punto de humear, añadir unas gotas de agua que han de evaporarse inmediatamente, así sabremos que está a la temperatura que necesitamos. En ese momento añadimos una pequeña cantidad del cereal que queremos inflar, sin que lleguen a cubrir todo el fondo de la olla. Los mantendremos al fuego moviendo la sartén de vez en cuando para que no se quemen y los apartaremos del fuego en cuanto dejemos de oír los pequeños estallidos.
Palomitas de sorgo, las más parecidas a las de maíz
Cereales como el arroz, el trigo, la avena o la cebada se inflan pero no saltan, en cambio el sorgo sí salta con bastante fuerza, de manera parecida a como lo hacen las palomitas de maíz, por lo que si elegimos este cereal debemos tapar la olla que utilicemos para prepararlas.
¿Para qué podemos utilizar los cereales inflados?
Los cereales inflados podemos usarlos para preparar barritas de cereales, para dar un toque crujiente a ensaladas, como topping para helados, yogures o boles de frutas. En el caso del arroz, como os comentaba más arriba, para preparar platos chinos como el ku-bak.