Hoy en día ser celíaco es mucho más fácil que hace 10 o 15 años. No es que ya no haya que andar con extremo cuidado con la contaminación cruzada o que se pueda comer de todo sin preocupaciones pero se han dado pasos de gigante. Cada vez hay más gente que está familiarizada con la enfermedad y también hay más productos sin gluten (y los que no lo son marcan los alérgenos en las etiquetas). Incluso muchos restaurantes han adaptado sus cocinas y menús.
Sin embargo, pese a todos estos avances y la inestimable lucha de la Federación de Asociaciones de Celiacos de España (FACE) llenar el carro de la compra de un celíaco sigue sin ser igual de fácil que llenar el de alguien que no sufre la enfermedad. La calidad y el sabor de algunos productos sigue sin estar a la par, la variedad es mucho más reducida y su precio es mucho más elevado. Por eso, aquí van unos cuantos consejos para comprar comida sin gluten y no morir en el intento.
¿Qué supermercado tiene más comida sin gluten?
A día de hoy la inmensa mayoría de supermercados e hipermercados españoles cuentan con productos sin gluten, tanto genéricos como convencionales y específicos, en sus lineales. Algunos los agrupan en los estantes de dietética mientras que otros los colocan en sus respectivas secciones.
Aún así, no todos tienen la misma variedad. De hecho, la presencia de productos sin gluten en los estantes varía incluso entre tiendas de la misma cadena. Algo que complica bastante las cosas cuando viajas, puesto que puede que un supermercado tenga un gran surtido en tu ciudad y en otra sea de lo más pobre.
¿Dónde ahorrar comprando comida sin gluten?
Al igual que ocurre con el resto de productos, la mayoría de supermercados ofrece en sus lineales las principales marcas sin gluten del mercado. Muchos de ellos tienen un precio más elevado que sus alternativas con gluten por lo que muchas cadenas han empezado a ofrecer alternativas más económicas a través de sus marcas blancas.
La más conocida de todas es Hacendado, de Mercadona, que cuenta con más de 1.000 productos sin gluten y que además intenta que el etiquetado sea lo más claro y preciso posible. Carrefour también cuenta con su propia gama de productos de marca blanca sin gluten. Una gama que, al igual que las que han lanzado Eroski, Día o Alcampo, va creciendo poco a poco. Casi todos aseguran ser entre un 15% y un 20% más económicos que los productos de otros fabricantes, lo que cesta a cesta supone una gran diferencia.
También los hay que ofrecen descuentos, como Supermercados BM que ha llegado un acuerdo con las asociaciones de celíacos de Euskadi (EZE), Navarra (ACN) y Cantabria (ACECAN) para ofrecer un descuento del 5% en todas las compras (sean productos con o sin gluten) a sus socios.
Cuanto más grande mejor
Pese a que se calcula que a día de hoy hay más de 500.000 celíacos diagnosticados en España y que los productos sin gluten se han puesto “de moda” por alguna extraña razón, todavía son algo de nicho. Por lo tanto, si lo que buscas es variedad y cantidad lo mejor es que vayas a los hipermercados más grandes de tu ciudad en vez de a los super de barrio. Incluso siendo de la misma cadena, la variedad y cantidad de productos sin gluten tiende a ser mayor cuanto más grande sea la tienda.
También en supermercados alternativos
Otra buena opción es a ir a supermercados alternativos, desde los ecológicos hasta los dietéticos. En casos como el de los supermercados Veritas no importa mucho el tamaño, puesto que siempre tienen una gran variedad de productos sin gluten disponibles. Puede que no sean especialmente baratos, pero a cambio estos productos suelen ser mucho más sanos y equilibrados al no contener tantos azúcares añadidos.
No te dejes engañar
Durante años la FACE ha trabajado con todo tipo de fabricantes y productores para no sólo fomentar los productos aptos para celíacos si no también etiquetarlos correctamente. Sin embargo, lo que en un principio tenía un objetivo meramente informativo se ha acabado convirtiendo en un reclamo de marketing.
Una práctica que, como aclaran desde la FACE, puede llevar a confusiones al insinuar que un producto se diferencia al carecer de gluten cuando ninguno lo lleva. Algo que va en contra del reglamento de prácticas informativas leales del etiquetado recogidas en el artículo 7 del Reglamento 1169/2011. Puesto que “la información alimentaria no debe inducir a error al insinuar que el alimento posee características especiales, cuando, de hecho, todos los alimentos similares poseen esas mismas características”.
La FACE pone como ejemplo la leche de vaca, donde en ninguna de sus formas contiene gluten. Que una marca indique que su leche carece de estas proteínas no va a influir a una persona familiarizada con la celiaquía pero si puede influir en alguien primerizo o que no sufre la enfermedad. La cesta de la compra de un celíaco ya es bastante cara como para elegir un producto sin gluten por llevar esta pegatina en vez de por el resto de sus cualidades.
Mira más allá de la sección “sin gluten”
Los seres humanos somos bastante simples, basta que nos digan no a algo para que lo queramos con más fuerza que nunca. Se por experiencia que con la comida con gluten pasa algo parecido, pero tampoco hay que obsesionarse con ello.
No tienes porqué estar constantemente buscando alternativas sin gluten a alimentos que lo llevan cuando hay miles de platos que son aptos por naturaleza. En Singlutenismo puedes encontrar una gran recopilación de productos genéricos que no llevan gluten por naturaleza. Eso si, no te olvides cocinarlos con precaución si no quieres acabar contaminándolos.