Ya os hablamos hace un tiempo de Slow Food, un colectivo que defiende la comida local, sostenible y natural. Uno de los sectores en los que se centra esta asociación es el de la pesca, en este caso a través del evento bienal Slow Fish. Se celebra cada dos años en Génova, y en este 2017 tiene lugar entre los días 18 y 21 de mayo.
¿Qué es Slow Fish?
Del mismo modo que ponemos especial cuidado en los vegetales que comemos y tratamos de conocer de dónde vienen, si tienen sustancias químicas añadidas o no, o si son productos locales y no importados de otros países, también deberíamos hacer lo mismo con los pescados que consumimos.
Conocemos qué tipos de carne son más o menos apropiados, o qué especies terrestres están en peligro de extinción. Sin embargo, nos resulta más complicado evaluar la situación de las especies marinas, puesto que es un medio más desconocido y enigmático para el ser humano.
No obstante, es también determinante, tanto para nuestra salud como para la de nuestro mundo, que conozcamos bien el mundo de la pesca y sepamos qué comprar, qué consumir, e incluso qué pescar.
Esta es precisamente la esencia de Slow Fish. Es un evento, como hemos mencionado de carácter bienal, que pretende dar a conocer el medio marino y proteger las especies que lo necesitan.
Además, Slow Fish también trabaja para redescubrir sabores olvidados, profundizar en el conocimiento de los diferentes tipos de pescados que consumimos y evaluar globalmente la situación de nuestros mares y las especies que en ellos habitan.
Las recomendaciones de Slow Fish para comprar y comer pescado
Desde Slow Fish recomiendan seguir una serie de pautas para comprar y consumir pescado que todos nosotros deberíamos seguir si queremos colaborar a un consumo y una alimentación responsable. Como ellos dicen, esta guía nos sirve para saber cuáles son ‘los pescados para el paladar y los pescados que debemos dejar en el mar’.
Sigue los siguientes pasos y estarás colaborando con la filosofía Slow Fish, comprando y consumiendo pescado de manera sostenible.
Conoce el pescado que compras
Tanto si compras pescado envasado, como si lo haces en una pescadería, tienes derecho, como consumidor, a conocer esta información. Si comprar pescado envasado, los siguientes datos deben estar en una etiqueta, mientras que si lo haces en puesto de mercado, podrás preguntarlos dircetamente a tu pescadero.
Esta información responde a las siguientes preguntas:
- ¿Cuál es el nombre del pescado?
- ¿De dónde llega?
- ¿Ha sido pescado o es de criadero?
- ¿Cómo ha sido pescado o criado?
Quizás a veces, en los puestos de las pescaderías, no está clara la procedencia del pez. Sin embargo, hay unos números que identifican este asunto, y son los siguientes:
- 31: Atlántico Noroccidental
- 37: Atlántico Nororiental
- 37: Mar Mediterráneo
- 51/57: Océano Índico
El pescado, mejor de temporada
Como ocurre con todos los alimentos, hay épocas del año en las que es mejor consumir unos u otros. En el caso de la fruta y la verdura elegimos aquellas variedades que crecen de forma natural en zonas locales, parta favorecer el consumo de productos ecológicos y de kilómetro 0, cultivados de manera natural.
En el caso de los pescados, entendemos que son de temporada cuando las especies no se encuentran en una fase de reproducción. Además, también debemos tener en cuenta si el pescado que consumimos es local, o al menos, si se encuentra lo más cercano posible a nuestra zona. Así evitamos gastos y viajes innecesarios en transporte.
En primavera, por ejemplo, algunos de los pescados de temporada son la lubina, el besugo, la caballa o la breca. Estos dan paso, en verano, a otros como la dorada, el lenguado, la sardina o la anchoa.
Pezqueñines no, gracias
Seguro que muchos de nosotros recordamos la famosa campaña de concienciación en la que se trataba de mentalizar a la sociedad de no comprar peces de pequeño tamaño: ‘Pezqueñines no, gracias’. Pues esa es la idea.
Cada pescado tiene una talla bajo la cual no deberíamos consumirlos. Si lo hiciéramos, estaríamos entorpeciendo el proceso de desarrollo y reproducción de la especie. Y en consecuencia, estaríamos poniendo en peligro el equilibrio de toda la cadena.
Aquí os dejamos con algunas de las medidas mínimas para ciertos tipos de pescado. Podéis consultar todas las que se pescan en el Mar Cantábrico y en el Mar Mediterráneo en la legislación actual española sobre este asunto.
- Salmonete: 11 cm.
- Caballa: 18 cm.
- Lenguado: 20 cm.
- Sardina: 11 cm.
- Merluza: 20 cm.
Quién participa y asiste a Slow Fish
Slow Fish es el punto de encuentro entre muy diversos grupos de la sociedad que se relacionan de algún modo con el mundo de la pesca y el consumo de pescado.
Por ejemplo, a este evento acuden pescadores y pescaderos, pero también cocineros para saber más sobre cómo manipular el pescado; así como grupos escolares, para concienciarles desde pequeños sobre la importancia de elegir bien lo que comen y compran, en este caso en lo relacionado con el pescado.
Asimismo, asisten a Slow Fish todas aquellas personas comprometidas con el mundo de la alimentación sostenible y la comida local.
Las actividades de Slow Fish
En este evento se pueden encontrar todo tipo de actividades relacionadas con los productos de mar. Los asistentes tendrán la oportunidad de conocer nuevas especies, saber cuáles de ellas están en peligro de extinción o cuál es el ciclo de vida de cada uno de ellos.
Pero además de toda esta información sobre los peces, también se han programado conferencias, actividades especiales para los más pequeños, y cómo no, un lugar donde se podrán degustar los mejores productos de mar de la mano de cocineros con experiencia que aplican las mejores técnicas para prepararlos.
De esta forma, siguiendo los consejos que hemos compartido nos estaremos asegurando de que lo que consumimos y compramos sigue unos procesos adecuados. ¿Sueles tener todo esto en cuenta a la hora de hacer la compra?