El Mercat del Olivar, ubicado en pleno corazón de Palma de Mallorca, es un vibrante mercado que encarna la esencia de la gastronomía y la cultura local. Fundado en 1951, es un crisol de colores, aromas y sabores en el que abundan los productos frescos y donde turistas y vecinos se encuentran para explorar la auténtica cocina mallorquina.
[La sobrasada de Mallorca favorita del rey Juan Carlos: desde 10€ y dónde puedes comprarla]
Al recorrer sus pasillos, el visitante se sumerge en un festín para los sentidos. Desde puestos de frutas y verduras cultivadas en la fértil tierra de la isla, hasta mariscos recién capturados en las aguas del Mediterráneo. Además de comercios donde adquirir alimentos, el edificio también alberga pequeños restaurantes y bares donde tapear y degustar platos típicos de la región (aunque, ¡ojo!, el Ayuntamiento ha comenzado a limitar la hostelería para que no se pierda la esencia original del mercado).
Entre todos esos estímulos culinarios nos encontramos con Pedro Rigo, de Gastroteca Mauricio, un restaurante ubicado en la planta superior del mercado que ofrece experiencias gastronómicas privadas para grupos o particulares. Rigo nos da una visita guiada por el Olivar (una de las actividades habituales que ofrece a sus clientes) y nos muestra algunos de los comercios más imprescindibles, en los que bien merece la pena comprar alguna que otra delicia.
1. Los quesos y embutidos de Aceitunera Balear
Los quesos de Aceitunera Balear son un testimonio del arte quesero local, elaborados con leche de la más alta calidad y siguiendo técnicas ancestrales. Desde los suaves y cremosos hasta los intensos y curados, la variedad es impresionante y cada queso cuenta su propia historia de sabor.
[El restaurante que estrena chef en un nuevo hotel de lujo en Mallorca entre el mar y la montaña]
Junto a los quesos, los embutidos de Aceitunera Balear son otro de sus puntos fuertes. Jamón ibérico, chorizo, salchichón o fuet son solo algunos de los muchos bocados que se ofrecen, todos ellos con los mejores ingredientes y el cuidado artesanal que caracteriza a esta empresa.
2. Las especias de Liagiba Los Sabores del Mundo
Una parada imperdible en el Mercat del Olivar, donde los amantes de la gastronomía pueden deleitarse con una amplia variedad de productos internacionales. Este rincón culinario es un verdadero viaje sensorial que lleva a los visitantes a explorar los sabores de todo el mundo sin salir de la isla.
Desde especias exóticas hasta delicias gourmet de diferentes rincones del planeta, Liagiba ofrece una selección cuidadosamente curada de productos que satisfacen incluso a los paladares más exigentes. Los clientes pueden descubrir ingredientes esenciales para la cocina étnica y alimentos listos para consumir que reflejan la diversidad culinaria global.
3. Los jamones de Iván Aleixandre
Con una reputación que precede a su nombre, esta parada esencial para los amantes del jamón otorga una experiencia única de sabor y calidad. La pasión por el arte del jamón se refleja en cada detalle, desde la cuidadosa selección de las mejores piezas hasta el proceso de curación que garantiza un producto final excepcional.
[El primer restaurante nikkei de Mallorca al que se puede llegar en barco]
Los clientes pueden deleitarse con una amplia variedad de jamones para llevar a casa o para degustar en la propia tienda, desde los clásicos ibéricos hasta opciones más exclusivas y gourmet. Además, el equipo de expertos está siempre dispuesto a ofrecer asesoramiento personalizado y recomendaciones para garantizar una experiencia culinaria inolvidable.
4. Los cafés de Cafès Llofriu
Especialistas en cafés de todo el mundo desde el año 1866. Ya sea que prefieras un espresso intenso, un aromático café con leche o un suave café descafeinado, este es tu sitio. Además de sus cafés recién tostados, también cuentan con una selección de productos complementarios, como tés gourmet y chocolate caliente o cafeteras y teteras para lograr una experiencia cafetera completa.