Si llegas a la noche de Reyes con la energía justa después de sobrevivir a las reuniones familiares que se solapan estas fiestas y no sabes qué comprar para sorprender a tus consanguíneos, la solución es sencilla: regala vino. Pero no un vino caro, que si has llegado hasta aquí es porque has sabido mantener en su sitio la paciencia y también la cartera. Estas siete referencias te harán quedar como un Rey Mago sin agotar tus reservas de oro, incienso y mirra. Además, te chivamos la explicación que tienes de darle a tu cuñado cuando abra el paquete. De nada.
La tendencia
Alba Balbaína, de Bodegas Barbadillo es un nuevo vino tranquilo, una apuesta de la bodega sanluqueña por los blancos de albariza y los vinos de crianza biológica elaborados con el mosto flor de la uva palomino y con crianza sobre lías. Su particular sabor es el complemento ideal de pescados y mariscos, ensaladas de ahumados, arroces y verduras. Una pequeña joya que se suma al movimiento de recuperación de los tradicionales vinos de pasto que experimenta el Marco de Jerez, con un precio imbatible: 11 euros.
El vegano
El Lagar de Moha es la primera y única bodega biodinámica de la D.O. Rueda. Los tratamientos utilizados en la viña son de origen natural, con la idea de mantener y aumentar la biodiversidad en el viñedo y que la uva exprese de una forma mucho más genuina sus características propias. Sus vinos no sólo son ecológicos, sino también veganos, como Sapienta, un verdejo elaborado en depósitos de hormigón con las levaduras presentes en la piel de la uva y una crianza sobre lías durante 4 meses. Precio: 9,90 euros
El premiado
Blaneo Garnacha 2021 ha sido elegido mejor tinto de esta variedad en la Selección de los Vinos D.O. Navarra 2023 y galardonado con una Medalla Gran Oro en el Concurso Internacional Virtus 2023. Un vino de calidad, procedente de viñedos de más de 80 años y elaborado con la dedicación que caracteriza a Masaveu Bodegas, en Pagos de Araiz (Olite), con ocho meses de crianza en barricas de roble francés y americano. Una garnacha expresiva y potente, que convence a la primera copa. Precio: 15,80 euros
El clásico contemporáneo
La cuadrilla Vintae aprovecha las navidades para la puesta de largo del nuevo vino que lanzaron este otoño y que les está dando muchas alegrías. Hacienda López de Haro Reserva Blanco 2018 es un blanco riojano con crianza, que se une al camino de creación de clásicos contemporáneos que la bodega lleva años trazando. Elaborado a partir de viura, malvasía, tempranillo blanco, garnacha blanca y turruntés, mezcladas en viejos viñedos de 80 años en la Sonsierra y el Alto Najerilla, y con una crianza de 18 meses en barrica, este vino encierra la complejidad del terruño y su alianza con el paso del tiempo para rendir homenaje a los míticos vinos finos riojanos. Precio: 14,95 euros
La sorpresa
No llega a los 12 euros y ha sido el único Ribera del Duero seleccionado por Wine Spectator entre los 100 mejores vinos del mundo. Sólo cinco tintos españoles se han colado en la prestigiosa lista en 2023 y, entre ellos, Bela 2021 es la representación ribereña. Perteneciente al grupo CVNE, este tempranillo se elabora a partir de viñas propias en la bodega del mismo nombre ubicada en Villalba de Duero. Un tinto que aúna la redondez, el equilibrio y la historia de una región icónica, con un estilo tradicional y una crianza de 6 meses en barricas americanas y francesas. Precio: 11,75 euros
El chispeante
La Chalada es un blanco de aguja natural, semidulce, 100% verdejo y totalmente diferente al resto de referencias elaboradas por Vinos Sanz, una de las bodegas más antiguas de Rueda, centrada desde 2003 en aportar un toque de frescura y personalidad a sus vinos, sin perder la tradición y el saber hacer de una casa fundada hace más de 150 años. Un vino goloso, desenfadado y divertido, con una delicada nariz y un gran equilibrio, que pide servirse muy frío y disfrutar sin miramientos. Precio: 8,45 euros
La añada perfecta
Maite Sánchez, enóloga de Bodegas Arrayán en el corazón de la Sierra de Gredos, asegura que la de 2018 es una de las mejores añadas de La Suerte de Arrayán. Una garnacha de viñas de entre los 60 y 80 plantadas a 750 metros en la villa de la que toma su nombre, situada en El Real de San Vicente (Toledo). Altitud, cepas viejas y suelo granítico son los tres pilares en los que se sustenta la singularidad de este tinto extraordinariamente fresco y elegante. La autenticidad del paisaje y el terroir en la copa. Precio: 15 euros