La uva maturana, la 'cabernet riojana'.

La uva maturana, la 'cabernet riojana'.

Vinos

El avance imparable de una nueva variedad de uva tinta, con aroma a pimiento verde, en Rioja

La maturana es conocida por mucha gente como la cabernet riojana. La familia Diez Corral es una de las bodegas que la ponen en valor. 

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Enrique Calduch
Publicada

Poco a poco se está introduciendo y poniéndose de moda. Se trata de una variedad de uva, genuinamente riojana, marginal hasta hace nada, que se llama maturana. De poca producción, algunos bodegueros animosos se han lanzado a elaborar vinos tan sólo con esta uva, y el resultado está siendo excelente.

Pondremos como ejemplo una joven bodega ubicada en Anguciana, un pueblecito de unos 400 habitantes, situada a 5 kilómetros de Haro, en plena Rioja Alta, y propiedad de la familia Diez del Corral.

La variedad reina de Rioja es la tempranillo. También es la dominante en Ribera del Duero, donde tradicionalmente se conoce como tinta fina o tinta país. Igualmente, en Toro también llamada tinta de Toro. En toda la zona de La Mancha donde se la conoce como cencibel. En Cataluña, donde se la llama “ull de llebre”. “Arauxa”, es su nombre en Galicia. Si cruzamos a Portugal, allí se la conoce como “tinta roriz”. Hace pocos años logró superar a la blanca airén, manchega, y convertirse en la variedad de uva más utilizada en España.

Pero volvamos a Rioja. El estilo tradicional e histórico riojano es elaborar vinos de coupage o mezcla, más que monovarietales. Así con la tempranillo se han realizado habitualmente mezclas con algo de graciano, mazuelo, y garnacha, por supuesto. Y ahora ha aparecido la maturana. Representa el 0´2% de la superficie de viñedo en Rioja, tan sólo unas 170 hectáreas.

Se descubrió en 1990 en la localidad riojana de Navarrete, unas 35 cepas que se estudiaron, se clonaron y se fueron replantando bajo la supervisión del Consejo Regulador. Aporta a las mezclas, sobre todo con tempranillo, estructura, acidez y color, suficientes virtudes como para usarla mucho; pero no es así, porque tiene un problema, que es sensible a la podredumbre cuando, por ejemplo, previa a la vendimia, llueve y hace calor.

Se la considera de la familia de la trousseau o bastardo del sur de Francia; y está marcada por las piracinas, es decir, que tiene un profundo aroma a pimiento verde. Algo parecido con la cabernet sauvignon, por eso mucha gente conoce a la maturana como la 'cabernet riojana'. Empezó utilizándose en mezclas, pero debido a su originalidad algunas firmas están elaborándola sola.

También, y como información general, aparte de la tinta, existe una maturana blanca, igualmente de poca producción, y que está dando unos excelentes resultados para hacer este tipo de vinos, ampliando con originalidad la paleta de los vinos blancos riojanos.

La maturana de la familia Diez Corral

La familia Diez Corral disponen desde varias generaciones de unas cinco hectáreas en el pueblecito de Anguciana, bajo los montes Obarenes. Cuatro de ellas en una finca conocida como La Piconada. Son muy jóvenes en el mundo del vino.

Viñedos de maturana de la familia Diez Corral.

Viñedos de maturana de la familia Diez Corral.

En realidad, es una aventura en la que participa toda la familia. El abuelo Carmelo fue el iniciador que plantó los viñedos y comenzó una pequeña comercialización. Su hijo Ricardo fue el que inició la explotación en firme con la compra de barricas y la planta embotelladora, apoyado por sus cuatro hijos; siendo el pequeño de todos, Juan, el que lleva la comercialización y el enoturismo. Su primera cosecha salió en 2020.

Elaboran cuatro vinos con la marca La Piconada. Un rosado de viura y garnacha, fresco, agradable y equilibrado; un blanco de chardonnay y tempranillo blanco fermentado en barrica y con siete meses de reposo sobre lías, con una nariz intensa de fruta blanca y una boca untuosa, con grasa y volumen (12 euros). Y luego, para los tintos se han decantado por la “maturana”.

Los vinos que elaboran la familia Diez Corral.

Los vinos que elaboran la familia Diez Corral.

Hacen un crianza, que junto con la tempranillo habitual introducen un porcentaje de esta uva. En el mercado está la añada 2020 que tiene 12 meses en barrica, y que resulta muy agradable, con frutos rojos en nariz y recuerdos de la madera de la crianza; mientras que en boca es de buen paso, redondo, rico (12 euros).

Y por fin un monovarietal de maturana que es lo que les distingue, y les da la originalidad de las pocas bodegas que hacen este tipo de vinos. De la añada 2021, La Piconada Maturana tiene una nariz donde de entrada salen los aromas típicos e inevitables de pimiento verde, para luego ir dejando paso a fruta roja, especias, recuerdos balsámicos; y una boca muy sabrosa, salina, muy original y agradable (13´50 euros). Enhorabuena por la idea a los Diez del Corral.

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