Con el confinamiento por el coronavirus muchos españoles decidieron adoptar o adquirir un perro. Y es que, los perros son fieles compañeros que suelen expresar su felicidad y cariño hacia los humanos. Tienen una sorprenderte capacidad para aprender toda clase de habilidades, pero se deben tener ligeras nociones sobre cómo adiestrar a un perro.

Adiestrar una mascota requiere paciencia y constancia, pero los resultados son muy gratificantes. Además, no puedes olvidar la importancia de que tu animal se sienta a gusto y motivado durante las sesiones de adiestramiento.

En qué consiste el adiestramiento canino

Adiestrar a un perro consiste en enseñar a tu can a responder de forma concreta a una orden verbal y/o señal gestual. Puesto que la línea que separa el adiestramiento de la educación es muy fina, te explicamos las principales diferencias entre ambos conceptos.

1. Diferencias entre educar y adiestrar a un perro

Si después del confinamiento por coronavirus te has dado cuenta de que quieres adoptar un perro, lo primero que debes tener en cuenta es la diferencia entre educar y adiestrar, así como la finalidad que tienen cada uno.

El objetivo de educar a un perro consiste en guiarlo durante su aprendizaje desde que es cachorro para que aprenda a comportarse y adaptarse en distintas situaciones cotidianas, logrando así que se sienta seguro y tranquilo.

Por el contrario, el adiestramiento tiene la finalidad de enseñarle a que realice una acción concreta después de una orden, como por ejemplo, "dame la pata". Sin embargo, muchas veces confundimos ambos conceptos, pues al enseñar a un perro a sentarse le estamos enseñando a que obedezca a una orden concreta.

2. El uso del refuerzo positivo y negativo

Durante el proceso de aprendizaje con nuestro perro se emplean métodos para establecer una asociación entre un estímulo y la respuesta producida del animal mediante el condicionamiento. Al mismo tiempo, se trata de averiguar las necesidades y habilidades de tu can para fomentarlas.

Para ello utilizamos el uso de refuerzos, lo que hace referencia a un elemento añadido que motive al animal a realizar el aprendizaje. Estos refuerzos pueden ser de dos tipos:

  • Refuerzo positivo. Consiste en darle al animal un estímulo que realmente lo motive, como un premio en forma de comida, juego, palabras cariñosas, caricias…, cuando realice la conducta deseada. De este modo, el perro volverá a repetir la acción para recibir de nuevo el premio.



  • Refuerzo negativo. Se basa en retirarle al animal un estímulo molesto o repulsivo. Por ejemplo, estirarle de la correa contra el suelo para que se eche pues, en el momento en que lo haga, dejará de sentir presión. El perro volverá a repetir la conducta para evitar o huir de ese estímulo desagradable.

Los beneficios que reporta adiestrar a un perro en positivo son fundamentales para establecer un vínculo entre el perro y su dueño. La segunda técnica no es recomendable ya que, a pesar de dar resultados rápidos, no crea ese vínculo de confianza con el animal y contribuye a formar un carácter inseguro, pudiendo desarrollar comportamientos perjudiciales o no deseados.

3. Cuándo adiestrar a un perro

Si acabas de adoptar un perro, debes saber que tenga la edad que tenga puede ser adiestrado, pues aprenden a lo largo de toda su vida. Sin embargo, no es lo mismo enseñarle cosas nuevas a un cachorro que a un perro adulto, ya que los cachorros se encuentran en una etapa en la cual aprenden sin parar de todo lo que les rodea.

Por esta razón, un perro adulto no estará tan receptivo a nuevos aprendizajes y le costará mucho más asimilarlos. Además, será importante atender a sus capacidades físicas y cognitivas si te planteas enseñarle cosas nuevas, ser muy paciente y mantener una actitud positiva y motivadora cada vez que estés con él.

Cómo adiestrar a un cachorro

Puede que después del confinamiento por coronavirus hayas decidido adoptar un perro. Si es un cachorro, adiestrarlo será una tarea de lo más gratificante, pero requerirá paciencia y constancia. Lo primero que debes enseñarle es que acuda a tu llamada, a pasear sin tirar de la correa, a coger y soltar objetos, sentarse y echarse, dar la pata…

También debes educarle para evitar ciertas conductas que podrían ser problemáticas en un futuro, como reprimir la mordida, aprender a hacer sus necesidades fuera de casa o ayudarle a que se sienta seguro cuando se queda solo en casa o tienes visita. Estos son algunos consejos para adiestrar a un perro cachorro:

1. Establece una rutina

En primer lugar, debes planificar una rutina en la cual dediques todo el tiempo a enseñarle un mandato. No es recomendable que las sesiones duren más de 10 o 20 minutos, pues se aburrirá y distraerá con facilidad aprendiendo a no obedecer, y hazlo a diario para crear una rutina.

2. Ofrécele un premio

Ofrece a tu cachorro el premio que más le guste para que lo asocie con algo valioso y aumente su motivación y atención. Por eso no aconsejamos premiarle con algo que tenga a diario, como caricias, juegos o su propio pienso. Mejor hacerlo con un premio especial solo durante la sesión.

3. Marca objetivos acordes a sus capacidades

No puedes pretender que tu cachorro consiga hacerlo todo a la primera, debes ir poco a poco mediante pequeñas metas, incrementando la dificultad de forma progresiva. De lo contrario, el cachorro no entenderá qué quieres y se frustrará.

4. Prémialo para motivarlo

Mantenlo motivado de manera constante para que tu cachorro se sienta a gusto y forme un vínculo fuerte contigo, pero, sobre todo, para que aprenda a obedecerte.

5. No le riñas

Las sesiones de obediencia deben ser algo positivo, de manera que el uso de castigos solo generará estrés y miedo en tu cachorro. Para evitar conflictos, ten una actitud positiva a la hora de adiestrar a un perro.

También te puede interesar...