Desde Japón nos llega otro producto que está triunfando entre los españoles; el edamame. En concreto, desde que el edamame del Mercadona comenzó a venderse como novedad entre sus productos congelados, se ha convertido en el aperitivo favorito de los defensores de la comida natural. Incluso se ha agotado en muchos locales, y te contamos por qué.
El edamame es la soja tierna recolectada y comercializada todavía en la vaina, una de las muchas formas en que es consumida en Japón. Las propiedades del edamame son muchas, es rico en proteínas vegetales, bajo en calorías y muy fácil de preparar.
Una forma diferente de comer soja
El edamame puede compararse a las habas frescas o a los guisantes tiernos de temporada que podemos comprar dentro de sus vainas. Son tan suaves que se pueden comer en crudo, como ocurre con la soja, que también es una legumbre que crece en forma de habas tiernas antes de tomar esa forma seca y dura semejante a las alubias.
Es un alimento común en muchas partes de Asia y son muchas las recetas de edamame que se conocen. La primera referencia escrita a este alimento se encuentra en un manuscrito japonés del siglo XIII, en el que un monje budista agradecía una donación de edamame en su templo.
El término edamame designa más al plato preparado que al producto en sí, aunque se emplea para ambos. En la actualidad es un ingrediente muy popular en Japón y se toma como aperitivo, antes de una comida, acompañado de cerveza o como parte de un menú de platos variados.
Formatos de edamame que podemos comprar
El edamame del Mercadona llega importado desde Asia en varios formatos, pero todos ellos pasan por la congelación. Y es que las vainas de habas de soja sin madurar son delicadas y tienen una vida útil muy corta, así que la forma más sencilla de comercializarlo es congelado, facilitando así la conservación en casa.
Es posible encontrarlo en crudo o precocido y con la vaina completa, aunque también se ofrecen envases listos para consumir o cocinar, pero son habas descongeladas que no pueden volver a congelarse.
Otro lugar donde podemos encontrar edamame es en las tiendas especializadas en comida asiática o japonesa. Podemos encontrarlo ya desvainado, es decir, las habas comestibles peladas, congeladas y crudas, o como parte de algún plato preparado.
Existen muchas recetas de edamame y cocinarlo en casa es de lo más sencillo, ya que se pueden cocer en agua o al vapor. Solo debes poner abundante agua a calentar y añadir las vainas cuando esté hirviendo. Cuece durante tres o cinco minutos, escurre el edamame del Mercadona y enfríalo con agua. Si ya estaba cocido, tardarás todavía menos en prepararlo pero, en cualquier caso, lee las indicaciones del frabicante.
Se pueden servir directamente, templadas o frías, o puedes marinarlas con aderezos, salsas o saltearlas. En este caso, conviene cocer las vainas al dente antes de pasarlas por la sartén, wok o plancha, siempre con el fuego fuerte y de forma breve.
El edamame se sirve entero y se come introduciendo la vaina completa en la boca, sujetándola por una punta para extraer las habas del interior, absorbiendo los sabores y jugos de la vaina. Suele acompañarse de salsas y se pueden desenvainar para incorporarlas en múltiples recetas de edamame.
Cómo comer edamame: ideas y recetas
Podrás disfrutar de todas las propiedades del edamame aportando un toque extra de sabor con diferentes especias, salsas y aderezos. Estas son algunas ideas:
- Sal, pimentón dulce o picante, según tus gustos, y ajo granulado.
- Salsa de soja, vinagre de arroz para sushi y wasabi.
- Sésamo tostado y jengibre fresco rallado.
- Queso parmesano, ralladura de limón y aceite de oliva.
- Salsa de yogur, zumo de limón y una mezcla de especias zaatar.
- Mezcla de especias shichimi togarashi y aceite de sésamo.
- Sal maldon, aceite de oliva y vinagre de Jerez.
Si desenvainas las habas son un ingrediente perfecto para completar ensaladas, arroces, sopas, pastas, salteados… Combinan a la perfección con casi cualquier ingrediente, como verduras y legumbres, pescados, carnes y mariscos.
Además, también puedes sustituir los guisantes o habas tiernas de tus recetas favoritas por edamame. Ayudan a enriquecer las ensaladas de arroz y pasta de forma fácil, dan color y textura a la quinoa o pueden ser una alternativa diferente al hummus, el pesto u otros patés vegetales.
Propiedades del edamame
Como hemos visto, las recetas de edamame son tantas como tu imaginación conciba pero, además, esta legumbre es una importante fuente de proteínas de origen vegetal, hierro y calcio. Es también un aperitivo sin gluten y bajo en calorías que, si lo consumes de forma habitual, tiene efectos muy positivos sobre la salud, destacando las siguientes propiedades del edamame:
- Ayuda a reducir los niveles de colesterol dañino.
- Su alto contenido en hierro y proteínas convierten estas vainas verdes de soja en un alimento muy enérgico. Además, el consumo de hierro de origen vegetal aumenta la fertilidad en las mujeres.
- Reduce los problemas de riñón que suelen presentar los diabéticos de tipo 2. Esta enfermedad hace que se expulsen mayor cantidad de proteínas a través de la orina. Sin embargo, el edamame les permite digerir mejor la proteína de origen vegetal que la de origen animal, reduciendo la cantidad de proteínas que eliminan a través de la orina.
- Mejora la salud de los huesos gracias a su importante fuente de magnesio y calcio, que ayuda a mantener unos huesos fuertes y sanos disminuyendo la pérdida ósea.
- Ayuda a mantener el sistema inmunológico fuerte y sano.
- Otra de las propiedades del edamame es que aporta antioxidantes a nuestro organismo.
- Por último, es una importante fuente de fibra. ¿A qué esperas para probarlo?