Las palmeras son unas plantas muy populares en España y en todo el mundo, pero quizás sean también las menos comprendidas dentro del reino vegetal. Podemos encontrar palmera de interior y de exterior, y aunque las asociamos con las playas y las islas tropicales, existe una enorme variedad de palmeras. De hecho, algunas prefieren los terrenos áridos y el sol, mientras otras crecen en lugares con sombra y terrenos con humedad. Por lo tanto, hay una gran diferencia en cuanto a sus cuidados, estén plantadas en el jardín o en maceta dentro de casa... Además, no son de las plantas más sencillas de cuidar. ¡Descubre cómo cuidar una palmera de forma correcta!
Trucos y consejos para cuidar una palmera
1. Cuidar una palmera en exterior
Igual que sucede con otras plantas de jardín, las palmeras suelen adaptarse mejor en el exterior que en interior, siempre y cuando se planten en un terreno idóneo con la luz y demás condiciones oportunas. Estos son los aspectos que debes tener en cuenta para cuidar una palmera en exterior:
Luz
Es cierto que las palmeras son plantas tropicales y subtropicales, por lo que necesitan bastante luz y climas cálidos para crecer de forma saludable. A pesar de que existen algunos tipos de palmera que pueden vivir en interior, la gran mayoría disfruta del sol, así que lo primero que debes hacer es conocer el tipo de luz y la temperatura del lugar donde quieras colocarla. Así, podrás adquirir un tipo de palmera acorde con la luz que puedas proveerle.
Riego
Es posible que pienses que, por el hecho de tratarse de una palmera, no necesita un riego frecuente, pero la verdad es que sí necesitan agua, sobre todo al principio de su crecimiento. Cuando establezcas la palmera en el terreno, solo será necesario un riego por semana, incluso menos, y también es muy importante que el terreno tenga un buen drenaje. Y es que, igual que el exceso de riego, los encharcamientos son fatales para esta planta.
Sustrato
Como acabamos de mencionar, el terreno ideal para las palmeras debe tener un buen drenaje. Es cierto que hay algunas clases de palmeras, como las que generan cocos, que pueden adaptarse a terrenos salinos y húmedos, pero aun así, el terreno debe drenar el agua de forma correcta, sobre todo en las capas superiores, pues ahí es donde se encuentran las raíces. Por regla general, los mejores terrenos para la gran mayoría de las palmeras suelen ser arenosos, bien porosos y sueltos, pero esto puede variar según el tipo de palmera.
Mantenimiento general
Una palmera de interior y de exterior es una de las plantas más fáciles de mantener, pero eso no quiere decir que podamos dejarla en el olvido. Si la cultivas en una zona tropical, con mirarla será suficiente para que crezca en perfectas condiciones, pero si vives en una zona templada, tendrás que ofrecerle unos cuantos mimos.
En resumen, asegúrate de cultivar tu palmera en un lugar bastante soleado y cálido durante todo el año. También es fundamental que escojas una palmera que se adapte al clima de tu zona, y recuerda no podarla, deja que las hojas se vayan secando en la misma planta hasta que broten de un simple tirón.
2. Cómo cuidar una palmera en interior
Una de las plantas favoritas para decorar interiores es la palmera, pues no solo sirven para poner un toque de color verde a nuestros espacios, sino también para aportar altura y elegancia a las estancias.
Sin embargo, la mayoría de las palmeras necesitan bastante luz, así que, a pesar de ser una planta de interior, tendrás que buscarle el lugar ideal. A continuación, te ofrecemos unos trucos y consejos para cuidar una palmera de interior:
Luz
Sin la luz necesaria ninguna planta es capaz de sobrevivir, y las palmeras no son una excepción. Una palmera de interior y de exterior debe recibir una buena cantidad de luz solar, aunque sea indirectamente. Por ello, lo ideal es colocarla cerca de una ventana, una puerta de cristal o en un patio o terraza donde la luz entre fuerte pero de manera difuminada.
Riego
Es cierto que en interior los riegos deben ser más esporádicos que en exterior, pues el sol no evaporará los excesos de agua del terreno. Por eso, antes de regarla debes esperar a que el terreno esté bien seco. Para comprobarlo, puedes introducir un dedo en la tierra; si notas que aún está húmeda, espera unos días más antes de volver a regarla. Cuando riegues, asegúrate también de que todo el sustrato quede humedecido, y elimina el exceso de agua que salga por los agujeros para el drenaje. Recuerda que los encharcamientos no son buenos, sobre todo en interior, ya que pueden ocasionar hongos y que las raíces se pudran.
Sustrato
Igual que ocurre con las palmeras en el exterior, el sustrato de las de interior debe ser suelto y con un buen drenaje. Aunque existan palmeras que prefieren los terrenos húmedos, esto no quiere decir que puedan sobrevivir con las raíces encharcadas. Puedes usar el mismo sustrato que se emplea para cultivar cactus y suculentas, pero si tienes dudas, pregunta en el establecimiento donde compres tu palmera.
Mantenimiento general
Como sucede con todas las plantas de interior, lo fundamental será el cuidado que le brindes. Dentro de casa no están expuestas a las inclemencias del medio ambiente, así que dependen principalmente de ti.
Recuerda que, para cuidar una palmera en interior, debes evitar los excesos. Si la riegas mucho se pudrirán las raíces, en cambio, acabará secándose si la riegas poco. Por lo tanto, además de los trucos y consejos para cuidar una palmera que te hemos ofrecido, mantén siempre un término medio.
Por último, no coloques tu palmera de interior y de exterior en áreas demasiado frías, ni cerca del aire acondicionado, la calefacción, o en espacios donde el ambiente sea muy reseco.