Cómo dejar de fumar para mejorar la calidad de vida
Si te estás planteando dejar de fumar, te damos la motivación que necesitas para decidirte. Sigue nuestras recomendaciones para comenzar tu nueva vida.
22 enero, 2019 10:22Dentro de los deseos más destacados cuando comenzamos un nuevo año están perder peso y dejar de fumar.
En principio todos sabemos lo perjudicial que es el hábito del tabaquismo. En la actualidad existen dos elementos principales y potencialmente perjudiciales para la salud como es la obesidad y el tabaco.
Estudios recientes han demostrado que las principales causas de defunción en todo el planeta son la cardiopatía isquémica y las enfermedades cerebrovasculares originadas en gran medida a consecuencia del tabaquismo. Si observamos las estadísticas de España, el coste para atender las enfermedades que ocasiona el tabaco ascendió a 6.000 millones de euros. Pero no nos dejemos llevar por la negatividad y pensemos que dejar de fumar es algo alcanzable y que lo han conseguido millones de personas.
Primero veamos las ventajas que tiene dejar de fumar:
- En muy poco tiempo se respira con mayor facilidad y se deja de tener esa dichosa tos que ni los caramelos ni la miel calman.
- Baja la presión arterial y el ejercicio físico se hace con mucho menos esfuerzo.
- La salud mejora considerablemente y se reducen significativamente las probabilidades de tener enfermedades cardíacas, cataratas, infartos, tumores así como, otras muchas enfermedades que originan esta mala costumbre.
- La piel tiene mejor aspecto, desaparece el amarillamiento de las uñas y de los dientes causado por la nicotina. Los alimentos, a su vez, recuperan su sabor y el sentido del olfato mejora en muy poco tiempo.
Pero tampoco vamos a decir que es fácil conseguirlo. Hay mucho mérito en todos aquellos que lo han logrado y debería premiarse con una reducción de impuestos a los exfumadores.
Muchos fumadores tienen miedo a dejar de fumar por no sentir los síntomas de la abstinencia, aunque está demostrado que en una semana esos síntomas desaparecen. Pero no solo se fuma por la dependencia a esta perversa sustancia química además, se hace por costumbre.
El fumador lo hace por un hábito ya interiorizado que provoca que no pueda hacer su vida diaria sin el acompañamiento de la nicotina. Existen múltiples circunstancias que constatan lo esencial que es el tabaco para la vida de los fumadores, con ejemplos como comenzar con el primer cigarrillo del día cuando vas a trabajar o a estudiar, coger sin darse cuenta un cigarrillo cuando se habla por teléfono o la necesidad de tener el tabaco cerca en alguna reunión con amigos. Es más, algunos constatan que después de cada comida no puede faltar ese "pitillo" y que el café no sabe igual si no es acompañado por un cigarrillo.
Existen algunas recomendaciones para dejar el tabaco que pueden ayudar a conseguirlo y que son fáciles de poner en práctica:
- En España casi en ningún lugar público se puede fumar: cines, tiendas, restaurantes, bares, etc., aumentar la afluencia a "lugares sin humo" provocará poco a poco que se pase del tabaco.
- Pasar más tiempo con personas no fumadoras, facilitará la disminución en las ganas de fumar.
- Hay que aferrarse a los motivos por los que se desea dejar de fumar: mejorar la salud y la de los allegados, que la casa y el coche no huelan como un cenicero, ahorrar, etc., éste último es muy importante ya que un fumador adulto español gasta más de 280 euros anuales en tabaco. Así que lo primero que habría que hacer al dejar de fumar es conseguir una hucha y poner diariamente el dinero que se gastaría en tabaco así, en poco tiempo, te podrás permitir esos caprichos que antes no podías.
- Pensar en el extraordinario ejemplo que darás a tus hijos al dejar de fumar.
- Es importante imaginar la radiografía mental de cuando se aspira el humo de un cigarrillo: las toxinas llegan a los órganos del cuerpo con gran rapidez transportadas por la sangre, esto provoca literalmente la degradación y el origen de daños irreparables en el propio organismo.
- Hay que tener presente que el cuerpo ayuda a sanar por cada minuto que pasa sin fumar un cigarrillo. Al principio uno se puede sentir físicamente peor, pero en tres o cuatro días el organismo recompensa eliminando la nicotina y aumentando el bienestar. Está demostrado que a la media hora del último cigarrillo la frecuencia cardíaca y la presión arterial baja. Al día siguiente el nivel de monóxido de carbono que contiene la sangre se normaliza. Después de dos meses y medio las funciones pulmonares mejoran considerablemente. A los ocho meses desaparecerá esa tos de "perro"con la que te levantas. Un año después los riesgos de padecer enfermedades coronarias y los diferentes tipos de cáncer disminuyen al 50%. A los quince años después de dejar de fumar, tendrás los mismos riesgos de padecer cualquier enfermedad que las personas que jamás han fumado.
Pasemos a unos pequeños consejos para poder conseguir dejar de fumar:
- Comunicar a los compañeros, amigos y familiares tu deseo de dejar de fumar, esto evitará que te ofrezcan tabaco.
- Indicar a tus familiares más allegados cómo pueden ayudarte en tu nueva vida.
- Caminar al aire libre y siempre que se pueda, hacerlo por lugares sin contaminación para llenar los pulmones de aire fresco.
- Estar siempre ocupado, sobre todo ocupar las manos, puede ser el mejor momento para dedicarse a realizar esas manualidades que siempre han sido de tu agrado: construir barcos en miniatura, pintar, escribir, hacer ganchillo, etc.
- Si la tentación es muy grande masticar chicle o comer caramelos ayuda pero ¡ojo! no hay que cambiar un vicio por otro, mucha gente deja de fumar comiendo a todas horas y eso también es perjudicial para la salud.
- Asistir a sesiones de relajación, escuchar música, ir al gimnasio, realizar clases de pilates o yoga, etc.
- Beber todo el agua que se pueda es estupendo para la hidratación y ayuda a eliminar las toxinas del cuerpo.
- Tirar los cigarrillos, las cerillas, los mecheros y los ceniceros.
- Dejar a un lado las bebidas que contengan cafeína y que puedan aumentar los nervios.
- Comer saludablemente: una dieta mediterránea ayuda en los esfuerzos de dejar el tabaco.
- Dormir por lo menos ocho horas al día.
- Y cada día que pase sin fumar, hay que felicitarse y premiarse convenientemente. Debe imperar la positividad y la confianza en uno mismo.