Es frecuente experimentar la sensación de oídos taponados o presencia de líquido en ellos durante o después de un resfriado, gripe o episodio de sinusitis. Esta incomodidad, causada por la acumulación de mucosidad proveniente de la nariz, generalmente no es motivo de preocupación.
No obstante, la molestia puede variar y, en algunos casos, llegar a ser tan incómoda que se requiera atención médica. En este artículo, encontrarás soluciones para aliviar la obstrucción de los oídos debido a la mucosidad, mejorando así esta condición. Si experimentas un aumento del dolor acompañado de fiebre, es recomendable comunicarte con tu médico.
Consejos para aliviar los oídos taponados
Existe una conexión entre la nariz y los oídos a través de un conducto conocido como la trompa de Eustaquio. Durante un resfriado o gripe, el moco se acumula en la nariz y viaja a través de esta vía hasta llegar al oído medio, donde se estanca. No obstante, en ciertos casos, la trompa de Eustaquio puede obstruirse e inflamarse, impidiendo un drenaje adecuado del líquido acumulado y generando la sensación de oídos tapados.
Consejos para aliviar el dolor de oído
A pesar de esto, salvo en situaciones muy graves, es posible abordar esta condición con cuidados simples en el hogar o mediante la consulta médica. Aunque la audición pueda estar afectada, lo cual podría causar preocupación, la eliminación del moco generalmente restablecerá por completo la capacidad auditiva.
1. Posiciones corporales
Una manera sencilla de intentar deshacerte de los mocos en el oído es posicionarte erguido con un solo pie e inclinar la cabeza hacia el lado donde tengas la congestión. A continuación, sube la cabeza poco a poco sin bajar el pie y con cuidado de no perder el equilibrio. Este movimiento permitirá la salida del moco si su acumulación es leve y su consistencia es líquida.
También puedes tumbarte sobre una almohada de lado apoyando el oído que presenta la congestión. Si el moco es líquido, comprobarás que irá saliendo poco a poco. Aprovecha la noche para dormir del lado que tengas el oído taponado, por la mañana notarás la mejoría.
Cómo eliminar el moco del oído
2. Inhalar vapor de agua
Un gran aliado para los oídos taponados es el vapor de agua. Para ello, pon agua caliente en un recipiente y cubre la cabeza con una toalla mientras tomas el vapor. Puede hacerse solo con agua, pero si añades algunas plantas descongestionantes como eucalipto, menta o manzanilla, que además son antisépticas, te ayudarán a facilitar la eliminación del moco en el oído. Las duchas calientes y los humidificadores también sirven para este fin.
Esta solución es bastante eficaz cuando la congestión está causada por un resfriado o alergia, ayudando a que el moco salga por la nariz. Además, disminuirá la inflamación en la trompa de Eustaquio, lo que mejorará el malestar del oído.
3. Aplicar compresas de agua tibia
Si la solución de los oídos taponados por mocos del vapor de agua no ha dado resultado, puedes ayudar a los mocos a que se vuelvan más líquidos y que sean drenados de forma más fácil con una compresa de agua tibia en el oído afectado.
Además, la trompa de Eustaquio también se desinflamará, pues el vapor en este caso irá directamente al lugar de la congestión. Eso sí, ten cuidado de que la compresa no esté demasiado caliente, podría causar quemaduras en el rostro y el oído.
4. Usar solución salina
La solución de los oídos taponados por mocos más sencilla y eficaz es aplicar agua de mar en la nariz, ayudando a fluidificar y drenar la mucosidad existente. Puedes adquirirla en la farmacia o prepararla en casa con sal gruesa molida y agua destilada.
Mezcla ambos ingredientes hasta que la sal se disuelva y ponla en una olla. A continuación, inclina la cabeza hacia un lado debajo del lavabo y ve echando el agua en una de las fosas nasales. Deja que entre sin aspirar, respirando por la boca. La solución salina saldrá por la otra fosa nasal y, al terminar, debes repetir el mismo procedimiento por la otra fosa. Si entra un poco de agua en la boca solo tienes que escupirla.
5. Utilizar crema mentolada
Otro remedio efectivo para aliviar los oídos taponados es frotar una crema mentolada sobre el pecho. Su olor descongestiona las vías respiratorias y puede ayudar a drenar el líquido acumulado, disminuyendo la presión en la trompa de Eustaquio.
6. Tomar descongestionantes
En caso de que tengas los oídos taponados como consecuencia de un catarro o resfriado, puedes tomar un descongestionante para ayudar a mejorar esta condición. Sigue las indicaciones del medicamento sobre cómo tomarlo y, según mejore el resfriado, el oído medio se irá desinflamando y notarás la mejoría.
7. Visitar al médico
En el caso de que la acumulación de mocos en el oído tenga que ver con condiciones nasales lo ideal es ir al médico, sobre todo si estos episodios se repiten con frecuencia. De lo contrario, hasta que no se averigüe la causa del problema, será difícil encontrar una solución definitiva.
No esperes a que el problema vaya a más, en cuanto se presente el malestar debes descongestionar la nariz y los oídos enseguida. Si los mocos permanecen durante mucho tiempo en el oído, podríamos tener complicaciones y padecer una otitis, o lo que es lo mismo, una infección en el oído medio.
La solución de los oídos taponados por mocos que te hemos ofrecido debería dar resultado, prueba primero con ellas y, en caso de sospechar que hay infección o tengas un dolor agudo, debes visitar al médico de inmediato.