El confinamiento decretado por el estado de alarma a consecuencia de la crisis del coronavirus ha hecho que millones de personas se las ingenien para buscar entretenimiento en casa. Las nuevas tecnologías son una gran ayuda al respecto. Ver series y películas, jugar a los videojuegos, escuchar música, leer un libro. Sin embargo, están también aquellos que aprovechan estas herramientas para no descuidar sus relaciones sexuales. Y es que muchas parejas están viviendo este confinamiento a distancia. No queda otra que practicar el sexo virtual.
En materia de sexo, las nuevas tecnologías permiten fomentar la intimidad y disfrutar de momentos de erotismo y sensualidad. Durante esta cuarentena, muchas personas han establecido una rutina en la que poder practicar sexo a distancia. No es cuestión, ni mucho menos, de estar todo el día pegado al teléfono móvil o al ordenador.
El cibersexo tradicional
El uso controlado, aceptado y voluntario del cibersexo puede enriquecer una relación de pareja. Ya sea por skype, por teléfono o por cualquier otro medio, los encuentros de cibersexo solo deben darse cuando estemos convencidos de ello. Sentirse cómodo y en confianza es la mejor manera de disfrutar del sexo virtual durante la cuarentena por coronavirus.
En el cibersexo debemos establecer los límites desde el principio y, a ser posible, no tener ningún tipo de complejos. La seducción es un factor clave en este momento, por lo que debemos olvidar la timidez que nos pueda producir la situación. Si estamos con nuestra pareja, por ejemplo, podemos incluso jugar un poco con el ambiente.
El cibersexo es también el lugar perfecto para dar a conocer nuestras fantasías sexuales más íntimas. Una manera de abrir la mente y disfrutar del sexo virtual desde un punto de vista diferente. Recurrir a las fantasías nos hará recordar mucho más el encuentro, lo que supone a la vez un excelente juego de seducción.
El uso del sexting
El sexo virtual puede ayudar a desarrollar la imaginación de las personas. En estos casos, la primera herramienta sexual es el cerebro. La mente erótica nos hace ser libres y creativos. Y, para ello, nos pueden ayudar tener en casa juguetes eróticos o practicar el sexting, el envío de imágenes y/o vídeos de contenido sexual a través de dispositivos electrónicos.
El sexting se ha convertido en una de las mejores opciones para tener sexo virtual durante la cuarentena. Una fórmula que puede avivar nuestro deseo y la excitación, pero siempre que ambos miembros de la pareja así lo deseen. Los dispositivos electrónicos son los canales de envío de las imágenes o mensajes sexuales.
En este sentido, durante estas semanas están jugando un papel muy interesante los chats secretos de Telegram. Estos canales tienen un cifrado especial que no permiten que podamos hacer capturas de pantalla. Tampoco se pueden reenviar los mensajes y estos últimos se autodestruyen. Un medio ideal si hacemos sexting con personas desconocidas.
No hay que olvidar que el sexting en el código legal establece que difundir a terceros imágenes sin el consentimiento de la otra parte es atentar contra la dignidad y la intimidad de la otra persona. Se considera autor del delito tanto a quien haya protagonizado y grabado una relación íntima con consentimiento como a quien reciba las imágenes de otra persona sin haber participado en la grabación.
El telesexo y los juguetes eróticos
Los juguetes eróticos diseñados para dar y recibir placer a distancia son tendencia durante la cuarentena por coronavirus. Estos dispositivos funcionan a través de aplicaciones para móvil o con un mando a distancia. Hay numerosos dispositivos que se conectan al ordenador para que los puedan controlar la pareja incluso a miles de kilómetros de distancia.
Uno de estos últimos se llama Klic-Klic, un gadget sexual 3.0 que precisamente fue diseñado en España. A partir de este dispositivo, hay diversas opciones que se activan a través del móvil. Las aplicaciones móviles para proponer juegos sexuales a distancia son quizás la opción ideal para aquellos que estén empezando en el sexo virtual.
Una de las aplicaciones de sexo virtual para parejas más utilizada durante la cuarentena por coronavirus es Desire. Esta app ofrece retos para mandarse o la posibilidad de crear otros con el fin de jugar un poco. Solo hay que agitar el teléfono para que la aplicación facilite diferentes opciones de mensajes que mandar a la pareja en forma de juegos dulces o picantes.
Solo hay que echar un vistazo a las ventas de juguetes sexuales teledirigidos en estos últimos dos meses. La cifra se ha disparado en todo el mundo.
Las citas online
Aplicaciones de citas como Tinder, Coffee Meets Bagel, Bumble y Grindr están empezando a incorporar funciones de videochat para fomentar las citas online.
En Coffee Meets Bagel, por ejemplo, se realizan ya citas virtuales para entre 10 y 15 usuarios a la vez. Las citas se llevan a cabo a través de una videollamada moderada por un representante de la aplicación. Un participante interesado en otro puede enviar un mail al representante. Y si ocurre un flechazo entre ambas personas, el representante los pone en contacto.
Bumble también está impulsando durante esta cuarentena sus funciones de videochat y de voz para que los usuarios puedan hablar con su cita. Estas videollamadas son muy útiles para que la gente pueda verse un tiempo antes de intercambiar sus números de teléfono. Lo ideal es ver si salta la chispa y detectar que haya química entre dos personas.
Grindr es una de las más conocidas aplicaciones de citas en línea destinada a hombres gays y bisexuales que les permite comunicarse con otros iguales. La aplicación muestra en forma de mosaico las fotografías de los usuarios y permite ver el perfil. Tiene la posibilidad de chatear y enviar fotografías privadas.
Otras fórmulas de sexo virtual
La tecnología sexual se las ha ingeniado para que durante la cuarentena por coronavirus podamos tener una amplia gama de posibilidades de sexo virtual. A las anteriormente mencionadas habría que añadir los clubes de striptease de realidad virtual que hay en la red, las fiestas sexuales que se organizan en la aplicación de videollamadas Zoom o los vídeos caseros y el sexo por cam de páginas webs de porno como Pornhub.
El confinamiento es una inmejorable oportunidad para descubrir nuevas formas de relacionarse y explorar otros elementos de la sexualidad, tales como la intimidad, el erotismo o la seducción. Es un momento perfecto para conocer al otro, para interesarnos y para saber qué es lo que le excita.
Confinados no podemos tocarnos, pero podemos potenciar otros sentidos y practicar la comunicación sexual y las fantasías. Y si practicamos sexo virtual con desconocidos, no debemos olvidar la faceta de preservar nuestra intimidad y hacerlo con total seguridad y confiados de lo que estamos practicando.