Cómo hacer flan de leche condensada: la receta más fácil y deliciosa

El flan es uno de los postres que más nos gusta. A todos. Sin excepción. Quizá te gusten los flanes de huevo. O los de vainilla. Quizá los de leche condensada o los que no lleven caramelo. Sea como sea, hay miles de formas en las que se puede preparar este postre y, seguro, hay una que te encanta. Si eres de los que tiene predilección por la leche condensada, o quieres probar una nueva receta para hacer un delicioso flan casero, toma nota: vamos a contarte, paso a paso, cómo puedes preparar un suculento flan de leche condensada.

Ingredientes para hacer flan de leche condensada

Los ingredientes que vas a necesitar para preparar este delicioso flan son los que te detallamos a continuación:

• 500 ml de leche entera
• 370 g de leche condensada
• 1 cucharada de extracto de vainilla
• Unas gotitas de zumo de limón y agua
• 5 huevos talla M a ser posible
• 4 cucharadas de azúcar blanquilla
• Si ves que los huevos que tienes son de tamaño más pequeño, S, puedes usar 6. Por el contrario, puedes reducir a 4 si son un tamaño superior.

Ahora que ya tienes la lista de los ingredientes, sigue leyendo para aprender a preparar este flan.

Paso a paso para preparar un delicioso flan de leche condensada

Lo primero que vamos a hacer es preparar el caramelo y, para ello, debemos empezar por calentar el horno a 170º. Mientras el horno se calienta, añadiremos 200 gr de azúcar a una sartén junto a 4 cucharadas de agua. Luego, añadiremos una cucharadita de limón y lo pondremos a calentar durante unos minutos mientras lo vamos mezclando para que no se queme. El caramelo estará listo cuando haya cogido un tono marrón oscuro. Reservamos el caramelo y seguimos con la preparación del flan.

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Para preparar el flan, vamos a batir los huevos y los pondremos en un cuenco. Le añadiremos la leche mientras vamos removiendo y, posteriormente, la leche condensada. Debemos seguir removiendo hasta que todos los ingredientes se hayan mezclado.

El siguiente paso será coger la bandeja del horno y cubrirla con un poco de agua. Más o menos, debe cubrir un tercio de la altura del molde en el que vamos a hacer el flan. Seguidamente, la metemos en el horno y subimos la temperatura hasta los 200°. Mientras el agua empieza a hervir, vamos a poner el caramelo en las flaneras y, encima, le añadiremos la mezcla del flan. Lo cubrimos con papel de aluminio y metemos la flanera en el horno una vez el agua esté hirviendo.

Ahora, debemos dejarlo cocer, aproximadamente, una hora. Sin embargo, debemos ir pinchando el flan con un tenedor para asegurarnos de que está bien hecho y evitar que se nos queme.

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Pasado este tiempo, sacamos la bandeja del horno y dejamos que los flanes se enfríen. Y, ya solo nos queda presentarlos como más nos guste: con un poco de nata, con nueces, etc.

Trucos para que vuestro flan de leche condensada sea único

Seguro que os ha encantado la receta del flan, pero aún la podéis hacer un poco más especial. Cuando estéis mezclando los huevos con la leche, añadid un poco de esencia de vainilla y veréis cómo el resultado os encantará.

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Por otro lado, al cocerse al baño maría, es importante que lo dejéis enfriar bien antes de servirlo. No lo saquéis de golpe de la bandeja. Esperad a que el agua se haya enfriado para retirarlo y, aun así, esperad otros 15 o 20 minutos para consumir el flan.

Si queréis, además, que vuestro flan sea único y superoriginal, podéis comprar flaneras con formas de animales, por ejemplo, o de flores, etc. Hay una gran cantidad de ellas.

Por último, es fundamental destacar que el caramelo casero dará un toque muy personal a vuestro flan. Además, podéis hacerlo más o menos espeso, según lo prefiráis.

¿Por qué es tan saludable el flan?

El flan es uno de los postres más saludables que tenéis a vuestro alcance, ya que solo lleva azúcar en el caramelo y los demás ingredientes son de lo más saludables: huevos y leche.

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El huevo es especialmente rico en proteína de alta calidad, lo que lo convierte en un alimento de alto valor. Además, está lleno de vitaminas, entre ellas, las vitaminas del grupo B, encargadas de la regulación del estado del ánimo. Al ser tan rico en proteína, el huevo es buenísimo para mantener la musculatura, además de incrementarla. Si sois de los que van al gimnasio, sabéis que la proteína es necesaria tanto para la ganancia muscular como para su mantenimiento. Por ello, este postre también está indicado para aquellas personas que no quieran perder su tono muscular por la edad o cualquier otra afección.

Por otro lado, todos conocemos bien el valor nutricional de la leche, alimento que no debe faltar en ninguna dieta; es rica en minerales y en vitaminas, de lo más necesarios para el buen funcionamiento de nuestro organismo.

Como podéis ver, el flan es uno de los postres que más nutrientes nos aportan: es sano y está riquísimo. Además, prepararlo es de lo más simple, por lo que no tenéis excusa para disfrutar de vuestro flan casero. No lo dudéis y probad esta receta que os hemos dado añadiendo un poco de leche condensada. ¡No habrá mejor flan que el vuestro!