En medio del paisaje canario, Tenerife se enfrenta actualmente a un voraz incendio forestal que ha desencadenado una trágica serie de consecuencias. Esta joya natural, que forma parte del archipiélago canario, está siendo consumida por las llamas en un escenario exacerbado por una ola de calor implacable y una sequía que ha castigado a Europa.
La impotencia ante la magnitud de la destrucción ilustra la cruda realidad de uno de los veranos más afectados por incendios en la región, donde la intensidad y la agresividad del fuego se han visto alimentadas por la negligencia en las zonas rurales y la creciente dificultad para detener la expansión de las llamas.
A medida que el incendio en Tenerife continúa su avance destructivo, las autoridades trabajan en conjunto con numerosos equipos de emergencia para contener la catástrofe. Aunque estos esfuerzos son loables, en ocasiones resultan insuficientes y presenciamos la devastación de miles de hectáreas de bosque, hogares y urbanizaciones reducidos a cenizas, así como otros daños de envergadura.
Ante esta realidad desoladora, es imperativo estar informado y preparado para enfrentar la posibilidad de encontrarse con un incendio. La concienciación y la preparación son armas vitales frente a la posibilidad de enfrentar situaciones extremas que demandan una respuesta rápida y precisa.
¿Cómo actuar ante el fuego? El 1-1-2 Canarias lo explica
El 1-1-2 Canarias, a través de sus plataformas en redes sociales, ha emitido una guía esencial para todos los residentes de las Islas Canarias sobre cómo actuar en caso de encontrarse atrapados en medio de un incendio forestal. Dado el aumento del riesgo durante la temporada estival debido a las altas temperaturas y la sequía, el organismo de emergencias ha subrayado la importancia de estar preparados ante esta amenaza.
El procedimiento recomendado comienza con la prioridad de comunicarse con el 1-1-2 para alertar sobre la situación. A fin de evitar la congestión de las líneas telefónicas, se insta a evitar realizar llamadas innecesarias. En escenarios de densa humareda, se aconseja cubrir boca y nariz con un pañuelo húmedo, además de mantenerse hidratado. La instrucción principal es abstenerse de atravesar la zona, tanto a pie como en vehículo.
Cuando el foco del incendio es reducido, se sugiere explorar opciones para extinguirlo, ya sea utilizando ramas para batir las llamas o empleando agua y tierra. Si estas medidas no resultan efectivas, se enfatiza la importancia de retirarse de la zona, descendiendo ladera abajo y en dirección opuesta al viento.
Un aspecto crítico resaltado por el organismo es la planificación de una ruta de escape, teniendo en cuenta la dirección del fuego. La recomendación es dirigirse hacia áreas sin vegetación o aquellas que ya han sido afectadas por el incendio. Un consejo crucial cierra la guía: "No huya hacia barrancos". La importancia de actuar de manera segura y con conocimiento en estos momentos críticos se reitera a lo largo de las directrices proporcionadas por el 1-1-2 Canarias.
Recomendaciones para los afectados por el humo del incendio en Tenerife
La Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias ha emitido una serie de directrices fundamentales para afrontar situaciones de incendio forestal, como la que actualmente se está desarrollando en la isla de Tenerife. Entre estas recomendaciones destacan evitar salir al aire libre y asegurarse de cerrar puertas y ventanas en los hogares.
En este sentido, la Consejería recalca que los expertos hacen hincapié en que el humo de los incendios forestales contiene una mezcla de gases y partículas diminutas que resultan de la combustión de la vegetación, materiales de construcción y otros elementos, lo que puede provocar efectos respiratorios en personas sanas y especialmente en aquellas más vulnerables.
Frente a esta realidad, Sanidad ha compartido una serie de orientaciones dirigidas a la población que reside en las zonas cercanas al incendio forestal que afecta a Arafo y Candelaria, con el fin de afrontar el humo y las cenizas de manera adecuada.
Las recomendaciones, pensadas para los individuos sensibles y los grupos de mayor riesgo en estas circunstancias, incluyen a personas con afecciones respiratorias o cardíacas previas, como asma, bronquitis crónica y enfisema, así como a niños, mujeres embarazadas, adultos mayores y aquellos que realizan actividad física intensa.
Los síntomas principales que estas personas podrían experimentar abarcan la tos, irritación de ojos, nariz o garganta, dificultades para respirar profundamente, molestias en el pecho, palpitaciones, fatiga y agravamiento de los síntomas en el caso de quienes padecen condiciones respiratorias o cardíacas preexistentes.
La Dirección General de Salud Pública, en su intento de proteger a la población de las áreas afectadas, ha presentado las siguientes recomendaciones:
- Evitar permanecer al aire libre y abstenerse de realizar actividades físicas intensas o prolongadas.
- Cerrar puertas y ventanas, y si se cuenta con aire acondicionado, activar el modo de recirculación y asegurarse de que los filtros estén limpios.
- En espacios exteriores, se aconseja utilizar mascarillas FFP2 para prevenir problemas respiratorios y tomar medidas para proteger los ojos si es posible, incluso lavándolos si es necesario.
- Es de vital importancia prestar una atención especial a las instrucciones que emanan de las autoridades de protección civil.
En caso de emergencia, se debe recurrir al número de teléfono de emergencias del Gobierno de Canarias 1-1-2, mientras que para consultas y más información, el 012 (922 470 012) está disponible.