En España, las temperaturas están descendiendo de forma notable y los plumíferos y los abrigos acolchados son los reyes cuando se trata de afrontar al frío de la estación. Son muy resistentes y duraderos, pero, además, gracias a su composición, un abrigo de plumas respira. Por lo tanto, no solo son cómodos y cálidos, sino que permiten la transpiración de la humedad.
Sin embargo, como cualquier otra prenda, una chaqueta de plumas necesita una limpieza exhaustiva y regular. Si no sabes cómo hacerlo correctamente, podrías estropearlo, así que te recomendamos que sigas los siguientes consejos para lavar plumíferos. ¡Vamos allá!
Cómo lavar un abrigo de plumas en la lavadora
- Antes de dar comienzo al proceso de lavado, es muy importante preparar la chaqueta de plumas. Lo primero que debes hacer es cerrar por completo todas las cremalleras. Además, si tiene cierres de velcro, tendrás que asegurarte de pegarlos todos. Por último, dale la vuelta, quita cualquier adorno y retira todo lo que lleve en los bolsillos para evitar que se estropee a lo largo del lavado.
- Después, prepara la lavadora seleccionando el programa de ropa delicada, pero mejor hacerlo con agua tibia. Lo aconsejable es usar una temperatura de entre 30 y 40 ºC. No obstante, si no es posible, mejor utilizar agua fría.
- Cuando vayas a poner el abrigo de plumas en la lavadora, es fundamental que pongas alguna otra prenda en el lavado. Te recomendamos que sean pesadas, como un par de vaqueros, por ejemplo. De este modo, ayudarán a frotar la chaqueta de plumas y mejorarán su lavado. Además, el peso extra ayudará a balancear la lavadora, de lo contrario, esta podría hacer movimientos bruscos debido a la falta de peso.
- Pon en la cubeta del detergente uno específico para lavado a máquina y prendas delicadas, así cuidará las fibras y evitará que las plumas de los plumíferos se apelmacen. Evita el uso de suavizante, es innecesario y podría estropear el abrigo de plumas.
- Por último, pon un centrifugado suave, como máximo a 400 revoluciones, de lo contrario, las plumas acabarán apelmazadas.
Cómo secar una chaqueta de plumas
Una vez completado el proceso de lavado, extrae el abrigo de plumas de la lavadora y ponlo en la secadora. Hazlo con mucho cuidado, pues los plumíferos son muy pesados cuando están mojados, por eso debes evitar escurrir o arrugar estas prendas.
A continuación, programa tu secadora con la temperatura más baja posible. Recuerda cuando vayas a lavar tu abrigo de plumas que debes evitar las temperaturas demasiado altas, pues podrían dañar las plumas o incluso derretir la tela exterior de la cazadora.
Es recomendable que, junto con la chaqueta de plumas, coloques también unas cuantas toallas secas en la secadora. Esto ayudará a absorber la humedad de la chaqueta, de manera que favorecerá su secado.
También puedes usar dos pelotas de tenis limpias para que golpeen suavemente el abrigo de plumas con el movimiento de la secadora. Este acto conseguirá que se esponje y evitará que se apelmacen las plumas y se formen grumos.
El proceso de secado podría extenderse durante, al menos, una hora, pues lo ideal es realizar ciclos de secado entre 5 y 10 minutos. Retira la chaqueta de plumas de la secadora después de cada ciclo y espónjalo con la mano. Repite este procedimiento hasta que el chaquetón esté seco por completo.
En cambio, si quieres secar la chaqueta de plumas al aire, colócala en una superficie plana y evitando los rayos del sol. No debes colgarlo bajo ningún concepto, ya que las plumas se amontonarán en la parte inferior debido al peso. Agita de vez en cuando la prenda durante el proceso de secado para colocar las plumas y distribuirlas por su interior de forma homogénea.
Es importante que te asegures de que el abrigo de plumas esté completamente seco antes de guardarlo, pues las plumas con exceso de humedad podrían generar moho. Para finalizar, sacude bien la chaqueta de plumas para ahuecarla hasta que recupere su forma.
Una vez secos, guardar tus plumíferos colgados en una percha o doblados por las costuras. Pero nunca pongas peso encima de estos chaquetones, perderá su forma, y por ende, su función de aislar del frío.
Cómo lavar los plumíferos a mano
Si no tienes lavadora en casa, también puedes lavar a mano tu abrigo de plumas. Para ello, sumerge la cazadora en agua tibia y pon un poco de detergente para lavar a mano prendas delicadas. Si está muy sucia, te recomendamos que la dejes en remojo alrededor de una hora.
Escurre con tus manos con suavidad el exceso de agua y procede a secarlo como te hemos indicado en el apartado anterior, ya sea al aire o en la secadora.
Ten en cuenta que los rellenos de los plumíferos pueden ser de plumas naturales de pato u oca, o de fibras de poliéster sintéticas simulando dichas plumas naturales. Por este motivo, su lavado dependerá de la composición de la chaqueta.
En cualquier caso, este tipo de prendas precisan de un cuidado especial y no es necesario lavarlas muy a menudo. De hecho, algunos fabricantes incluso recomiendan su lavado en seco. No obstante, si decides lavar tu abrigo de plumas a mano, te recomendamos que sigas estos pasos:
- Para empezar, vierte abundante agua fría en un barreño grande o en la bañera.
- Agrega un poco de detergente para lavar a mano prendas delicadas.
- A continuación, frota el abrigo de plumas con movimientos continuos, pero con suavidad.
- Enjuaga el chaquetón con agua fría hasta que no suelte jabón, por eso te aconsejamos que no agregas mucho detergente.
- Por último, no escurras los plumíferos estrujándolos. Mejor haz compresiones suaves para retirar el agua sobrante. Seca como te hemos explicado y tu chaqueta de plumas estará lista para protegerte del frío de nuevo.