¿Tienes 3 manzanas y 2 huevos? Descubre estos bollitos esponjosos para el desayuno

El pan es uno de esos elementos fundamentales dentro de nuestra dieta para disfrutar en nuestras meriendas y desayunos. En muchas ocasiones se opta por comprarlo industrial, pero existe la posibilidad de preparar unos bollitos esponjosos para el desayuno para los cuáles necesitarás 3 manzanas y 2 huevos, y que ofrecen un resultado más que sabroso.

Siempre es mejor preparar recetas caseras que recurrir a la bollería industrial, y es que siguiendo unos sencillos pasos y con muy pocos ingredientes podrás elaborar en cuestión de minutos unos saludables y deliciosos panecillos dulces perfectos para el desayuno o la merienda, todo ello con una masa artesanal.

Todo lo que tendrás que hacer para conseguir el mejor resultado es triturar las manzanas hasta conseguir un puré fino, y luego mezclarlo poco a poco con el resto de ingredientes para que obtengas una masa homogénea, que tras haber reposado y el posterior horneado, permitirá disfrutar de unos panes caseros de manzana difíciles de igualar. Quedan muy jugosos y esponjosos, y para los más golosos, se puede conseguir que sean más dulces pintando los bollos con un glaseado ligero a base de azúcar y agua.

Ingredientes

Para preparar estos bollitos de pan de manzana para cuatro personas necesitarás los siguientes ingredientes:

• 3 manzanas.
• 2 huevos.
• 4 tazas de harina de trigo.
• 3 cucharadas de azúcar.
• 1 cucharada de levadura de panadería.
• Media cucharadita de sal.
• Media taza de aceite de oliva.

Cómo elaborar pan de manzana paso a paso

Para preparar el pan de manzana se deben seguir los siguientes pasos:

1. Tritura las manzanas: el primero de los pasos a seguir es el de lavar y cortar las manzanas, de manera que elimines la parte central. A continuación, tendrás que proceder a trocear las manzanas en trocitos más pequeños, para seguidamente triturarlos junto con los huevos con la ayuda de una batidora o bien con un robot de cocina hasta que logres obtener un puré de fruta.
2. Tamiza la harina: ahora, en un recipiente amplio deberás tamizar la harina, y añadir el azúcar, la sal y la levadura. Utiliza una cuchara para mezclar los ingredientes, hasta que todos ellos se integren bien los unos con los otros.
   Preparación de la masa del pan: El siguiente paso consiste en la preparación de la masa del pan, debiendo añadir la mezcla de la licuadora al recipiente con la harina y remover utilizando una cuchara para hacer que todos los ingredientes queden bien integrados en la mezcla. Añade el aceite de oliva y amasa con las manos hasta conseguir una masa homogénea. Llegado a este punto, habrá que cubrir la masa con fil transparente y deja reposar durante una hora a temperatura ambiente.
3. Forma los panes: debes precalentar el horno a 180 grados centígrados, para seguidamente proceder a untar la base de un molde redondo con un poco de aceite. Úntate las manos de la misma forma para así formar los panes sin que la masa se te quede pegada. Toma porciones de la masa y vete creando bolas de tamaño medio, colocando las bolas de masa en el molde. Luego cúbrelas con un paño limpio de algodón y deja que reposen durante unos 15 minutos a temperatura ambiente.
4. Hornea los panes: hecho lo anterior, es el momento de introducir el molde con los panes en el horno, para proceder a hornearlos durante 25 minutos. Una vez que haya transcurrido este periodo de tiempo, será el momento de retirar el molde del horno y desmoldar con cuidado para evitar que los panes de manzana se puedan romper.
5. Pintado con glaseado: para finalizar se deben mezclar tres cucharadas de azúcar con un poco de agua hasta conseguir que el azúcar se disuelva, para seguidamente proceder a pintar los panes con el glaseado antes de servirlo. Este último paso es opcional y dependerá de si se busca un resultado más o menos dulce.

La importancia de incluir manzana en nuestra dieta

Estos bollitos sabrosos permiten además incluir manzanas en nuestra dieta, algo que es muy recomendable por las numerosas propiedades beneficiosas para la salud. Entre otras cosas aportan vitamina A y C, son una buena fuente de minerales como potasio, calcio, sodio y magnesio, facilitan la digestión y tiene un alto aporte de fibra que ayuda a disfrutar de un mejor tránsito intestinal, favoreciendo con ello la eliminación de toxinas del organismo.

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Aunque la manzana no destaca entre las frutas con más vitaminas, pero aún así se puede destacar la presencia de vitamina C, un poderoso anti oxidante, además siendo fundamental para la formación de tejidos y para la cicatrización de heridas. Por otro lado, también ayudan a reducir el colesterol, lo que consigue gracias a su aporte de pectina, un tipo de fibra soluble que contribuye a eliminar del cuerpo el colesterol malo.

Asimismo, se trata de una fruta que ayuda a reducir el riesgo de diabetes gracias a los antioxidantes presentes en la manzana, que también ayudan a combatir la resistencia a la insulina, típica de la diabetes tipo 2; y favorecen la pérdida de peso. Esto último se consigue gracias a que contienen una gran cantidad de agua, así como por su elevada cantidad de fibra y todo ello con pocas calorías. Por ello, son una fruta que es ideal para ser incluida en las dietas enfocadas a adelgazar.