Muchas son las ocasiones en las que una comida o cena copiosa nos ha provocado una mala digestión que se traduce en dolores de estómago y otras molestias. Y es que debemos tener en cuenta que el aparato digestivo funciona mejor si lo tratamos con delicadeza y evitamos ciertas prácticas y alimentos.
Asimismo, hay muchos remedios caseros a los que podemos recudir, tanto alimentos, como infusiones y hábitos para facilitar la digestión.
Qué es la digestión
La digestión es un proceso mediante el cual los alimentos son transformados en sustancias más sencillas. De este modo, podrán ser absorbidas por cada célula del organismo. Este procedimiento se lleva a cabo en el aparato digestivo, el cual posee una serie de estructuras que permiten estos procesos. Este aparato está formado por el tubo digestivo y las glándulas anexas.
Las glándulas anexas son órganos que generan sustancias destinadas a facilitar el proceso digestivo, y son: el hígado (bilis), el páncreas (jugo gástrico) y las glándulas salivares (saliva).
Por último, la digestión consta de una serie de procesos mecánicos y químicos. Los primeros se refieren a la masticación, la insalivación y los movimientos que se realizan en el tubo digestivo. Gracias a estos procesos, los alimentos se desmenuzan, se emulsionan y circulan a través del tubo digestivo hasta su eliminación.
Cuánto se tarda en hacer la digestión
El tiempo en realizar la digestión varía de una persona a otra, al igual que cambia entre hombres y mujeres. Después de comer, los alimentos tardan entre seis y ocho horas en pasar por el estómago y el intestino delgado. Después llegan al intestino grueso y, finalmente, se eliminan los alimentos no digeridos.
El tiempo promedio de tránsito a través del intestino grueso o colon es de unas 40 horas, con una diferencia significativa entre hombres y mujeres. En los hombres tardan 33 horas y 47 en el caso de las mujeres.
Por este motivo, no conviene realizar comidas muy pesadas ni copiosas, pues a nuestro organismo le costará mucho más digerir los alimentos. Así como también es conveniente comer de forma sana y equilibrada para no tener problemas en el aparato digestivo.
Cómo mejorar la digestión
La digestión es un proceso complejo y muchas personas les restan importancia a ciertas molestias. Pero, en realidad, no es normal tener ardor de estómago después de comer, ni tampoco tener el estómago hinchado o alternar períodos de estreñimiento y diarrea.
Todas estas molestias se producen por alguna causa, y pueden tener algo que ver con ciertos hábitos. Atiende a los siguientes consejos y ponlos en práctica para mejorar tu proceso digestivo.
- Come despacio masticando bien los alimentos: si engullimos la comida sin masticar lo suficiente, podrían verse afectados los demás procesos. Así que la comida debe extenderse como mínimo durante 20 minutos. Este es el tiempo que el cerebro tarda en enviar la señal de saciedad.
- Divide la ingesta de alimentos en cuatro comidas principales: desayuno, comida, merienda y cena. No te saltes ninguna, pues llegar con más hambre a la siguiente es un error. Comerás más rápido y más cantidad, provocando dificultades en el aparato digestivo.
- Si no quieres irte a dormir demasiado hinchado, prueba a adelantar el horario de la cena.
- Las temperaturas extremas irritan las mucosas digestivas, por lo tanto, no consumas las comidas ni muy frías ni muy calientes.
- Se recomienda masticar la comida 20 veces, ya que, si los alimentos no están bien digeridos, la saliva no los emulsiona y las secreciones no actuarán de forma correcta sobre ellos.
- No bebas demasiado líquido durante las comidas, ya que esto favorece la segregación de jugos gástricos y la comida será más pesada. Lo mejor es beberla después de las comidas.
- Come siempre platos equilibrados. Lo ideal es que la mitad sean alimentos cocidos y la otra mitad crudos.
- Calcula las porciones justas para que el estómago no presione el esófago, esto podría favorecer el reflujo.
- Incluye proteínas en cada comida de forma moderada, así favorecerás la secreción de sustancias que intervienen en la digestión. Recuerda que no solo encontrarás las proteínas en la carne, sino también en los lácteos, el huevo y las legumbres.
- No realices ejercicio dos horas antes o durante las dos horas posteriores a la comida. Digerir un alimento es un trabajo muy pesado para el organismo y la sangre se concentra allí. Por este motivo, si los músculos también requieren su presencia, se generará un problema.
Cómo acelerar la digestión
Beber mucha agua te ayudará en el proceso digestivo, tanto al levantarte como entre horas. Los cereales, mejor si los tomas integrales, así como la pasta, el pan y las galletas.
En cuanto a los lácteos, los yogures, aquellos que contienes prebióticos y el kéfir son ideales para favorecer el proceso digestivo. Las infusiones de boldo entre horas estimulan el buen funcionamiento del hígado y el páncreas, favoreciendo así la digestión. Además, tiene un efecto diurético. También hay alimentos que miman tu estómago, como: la alcachofa, la canela, el comino, el hinojo, la cúrcuma, la piña y la papaya.
Seguir unos buenos hábitos también te ayudará a facilitar la digestión y cuidar tu aparato digestivo. Cuando estés comiendo, habla poco y mastica bien, y cuidado con las emociones, pues afectan a la digestión. Procura evadirte de los problemas, al menos mientras comes. Para terminar, respira bien para oxigenar mejor el estómago y favorecer así el proceso digestivo. La respiración ha de ser abdominal y caminar 10 minutos tras la comida también te ayudará.