Normalmente, la ducha es la parte del baño donde más probabilidades hay de que salgan hongos, ya que está más expuesta a la humedad, que es su caldo de cultivo. El agua estancada y los productos de higiene personal facilitan la aparición de hongos, que no son fáciles de eliminar.
En otro post ya hablamos sobre cómo limpiar las juntas de los azulejos del baño, ahora veremos cómo quitar el moho del baño.
Productos eficaces para quitar el moho
El moho, especialmente el moho negro, es difícil de eliminar y el más peligroso ya que, al intentar quitarlo, suele desprender esporas que no son buenas para la salud porque pueden provocar alergias y asma. Además de ser algo antiestético, el moho acaba, a la larga, dañando los materiales del baño, por lo que es importantísimo vigilar que no aparezcan y no dejar de limpiar los baños con frecuencia para quitar el moho.
La primera señal de alarma serán las manchas negras, indicio de que ya está apareciendo moho en nuestra ducha. Es importante quitarlo cuanto antes, por mínimo que sea, y los productos caseros funcionan muy bien y los eliminan de raíz.
Vinagre blanco, agua tibia y bicarbonato de sodio
Para eliminar el moho, mezclamos en un bote o una botella un cuarto de agua tibia con tres cuartos de vinagre blanco y dos cucharadas de bicarbonato. Agitamos con fuerza para que todos los ingredientes se mezclen bien, y vertemos la mezcla directamente sobre las manchas de moho, dejando actuar durante una media hora aproximadamente.
Después, frotaremos con un cepillo fino o uno de pasta de dientes para poder llegar a los rincones más difíciles de limpiar y asegurarnos de que el moho negro ha desaparecido. A continuación, enjuagamos con un chorro de agua de la ducha bien caliente, secando inmediatamente para que no haya restos de humedad, y puedan volver a salir.
Amoniaco con agua
El amoniaco es también un producto muy eficaz para eliminar el moho, especialmente en las zonas más difíciles de limpiar, o las más difíciles de llegar. Mezclamos un buen chorro de amoníaco con agua, y lo vertemos en la zona donde está el moho. Esperamos unos 10-15 minutos a que actúe, y después limpiamos normalmente, secando con un paño limpio para eliminar todo rastro de humedad.
Para prevenir, también podemos utilizar silicona antimoho para las juntas de los azulejos de la ducha, ya que previene que salga moho en superficies húmedas. También podemos frotar con una esponja impregnada en amoniaco, las zonas afectadas por el moho. Después, pasaremos un cepillo fino o un cepillo de dientes, limpiaremos normalmente, enjuagando la zona con un buen chorro de agua caliente.
No nos debemos olvidar de pasar un paño limpio y seco para eliminar la humedad, ya que si no corremos el riesgo de que el moho pueda volver a salir otra vez.
Lejía y agua
Hay productos para eliminar el moho que también funcionan muy bien. La lejía es uno de ellos, y es muy efectiva cuando el moho aparece en los azulejos del baño. Con una mezcla de agua y lejía, aplicada con un paño húmedo, y dejando actuar unos 10 ó 15 minutos, el moho saldrá perfectamente, no nos debemos olvidar de pasar bien por las juntas.
La lejía también funciona muy bien para desatascar los desagües, especialmente los de la ducha. Cuando éstos no están drenando bien, es muy probable que aparezca moho también en las tuberías. Una de las mejores soluciones es utilizar algún producto para desatascar las tuberías, que también funciona bien como producto para eliminar el moho. Basta con verter un chorro generoso en el desagüe, y dejar actuar al menos 60 minutos, tras los cuales podemos echar un cubo de agua bien caliente, con un chorro de vinagre blanco o lejía.
Alternativas a la lejía
Desde el punto de vista de la salud sí puede ser interesante buscar alternativas a la lejía para quitar el moho de los baños. Para eliminar el moho podemos utilizar agua caliente mezclada con alcohol etílico al 80% o bien alcohol de quemar, y también podemos utilizar agua oxigenada mezclada con agua caliente, y utilizar estas mezclas de la misma manera que con el bicarbonato sódico, pasando después un paño limpio y seco para eliminar la humedad.
Cómo prevenir la aparición de moho
Es muy común que el moho aparezca en las duchas, especialmente si queda agua estancada. Si aún no ha aparecido, hay una serie de trucos que evitan que el moho pueda aparecer en el futuro.
Es importante mantener el baño limpio, seco y si nuestro baño tiene ventanas, abierto y ventilado, para que el agua no quede estancada, y se vaya evaporando de forma natural. Secar bien la zona de la ducha después de haberla utilizado es muy importante para prevenir la aparición de moho, porque evitaremos que quede agua acumulada. Esto no solo debe hacerse en la ducha, sino en lavabos, fregadero, o cualquier parte de la casa que tenga exceso de humedad, y en la que pueda aparecer el moho.
Con independencia de que limpiemos el baño todas las semanas, es importante limpiar la ducha con alguno de estos productos, como mínimo una vez al mes. Aunque el moho no haya salido, es conveniente aplicar agua caliente con vinagre blanco o con bicarbonato, o bien echar amoniaco o lejía para después secar bien con un paño limpio. De esta manera, evitaremos que se quede agua estancada, y que el moho pueda salir.