El sencillo truco para eliminar la piel de los garbanzos en menos de un minuto
Si eres de los que tiene malas digestiones cuando tomas garbanzos es posible que se deba a que no retiras su piel. Por ello, nosotros queremos contarte cómo puedes hacerlo con una cucharada de bicarbonato.
10 marzo, 2023 12:30Los garbanzos son alimentos que tenemos usamos mucho en España y es que se pueden preparar de una gran cantidad de maneras diferentes. Sin embargo, son muchos los que sufren de dolor de estómago o de digestiones pesadas cuando los consumen y, en parte, esto es causado por la piel que los recubre.
[Garbanzos fritos: una receta de escándalo en cinco minutos]
¿Cómo eliminar la piel de los garbanzos en un solo minuto?
Si eres de los que sufre de malas digestiones cuando tomas garbanzos es posible que se deba a que no retiras su piel. Por ello, nosotros queremos contarte cómo puedes hacerlo de una forma muy rápida y simple.
Para retirar la piel de los garbanzos, lo primero que debes colocarlos en un recipiente y añadir una cucharada de bicarbonato para 200 g de legumbre. Cuando hayas añadido la cantidad adecuada, será necesario que lo remuevas bien para que los garbanzos se queden impregnados del bicarbonato. Y, cuando ya lo tengas, es momento de ponerlos en el microondas durante un minuto.
Una vez ha pasado este tiempo, añade los garbanzos en un cuenco con agua tibia y frótalos bien para que la piel se desprenda de ellos. Escúrrelos bien y repite el primer paso. Verás que con dos veces será suficiente para eliminar la piel y ya los tendrás listos para consumir.
Valores nutricionales de los garbanzos
Los garbanzos son un alimento muy completo que no deben faltar en una dieta equilibrada. Los valores nutricionales de referencia por 100 g de este alimento son:
- Grasas: 5.5 g
- Hidratos de carbono: 55 g
- Proteínas: 19.4 g
- Fibra: 15 g
- Calcio: 143 mg
- Hierro: 6.8 mg
- Potasio: 1000 mg
- Magnesio: 122 mg
Además, los garbanzos también son ricos en vitaminas A, E y C.
¿Qué beneficios aportan los garbanzos para la salud?
Al contener solo 5.5 g de grasa y 55 g de hidratos de carbono, este alimento es adecuado para todas las dietas por ser muy equilibrado y no tener un gran aporte calórico. Su gran cantidad de calorías también lo hacen ser un alimento indispensable en aquellas dietas para la ganancia muscular. Además, esta gran cantidad de proteínas hace que nos sintamos más saciados, por lo que tendremos menos apetito y conseguiremos reducir algo de peso si lo combinamos en una buena dieta para adelgazar.
Por su cantidad en fibra, este alimento también es perfecto para evitar el estreñimiento. Sin embargo, también es cierto que se deben ser tomados con moderación por aquellas personas que suelen sufrir de hinchazón y gases.
El calcio, como no puede ser de otro modo, nos permite mantener unos huesos fuertes y sanos, a la vez que ayuda en la coagulación de la sangre y mejora en el envío y la recepción de las señales nerviosas. También participa en la contracción y la relajación muscular. Otras funciones de este mineral son las de mantener un buen ritmo cardíaco y ayudar en la correcta secreción de hormonas y otros químicos.
El hierro, por su parte, ayuda a la formación de hemoglobina, mantiene los músculos fuertes, previene los trastornos cognitivos, aumenta la energía, ayuda a reforzar el sistema inmunitario y a conciliar el sueño.
El potasio ayuda a mejorar y preservar la función de los nervios y a la contracción de los músculos. También juega un papel fundamental en el mantenimiento del ritmo cardíaco y ayuda a que los nutrientes lleguen correctamente a las células para que estas puedan llevar a cabo todas sus funciones.
Por último, el magnesio ayuda a mantener el funcionamiento normal de los músculos, ayuda al sistema inmunitario, controla también el ritmo cardíaco, y ayuda a prevenir problemas de los huesos y a ajustar los niveles de glucosa en sangre.
Recetas con garbanzos
Después de haber visto cuáles son los beneficios de los garbanzos para nuestra salud, os vamos a dar pequeñas ideas de recetas muy fáciles de preparar para que los podáis incluir en vuestra dieta fácilmente.
Garbanzos con espinacas
Para preparar unos riquísimos garbanzos con espinacas solo debéis poner a hervir las espinacas hasta que estén bien hechas. Hay que recordar que el tiempo de cocción de las verduras debe ser lo más corto posible para que no pierdan sus propiedades. Aprovechamos mientras hierven las espinacas para limpiar bien los garbanzos y los colocamos en una sartén con un poco de aceite de oliva. Los freímos un poco y les añadimos las espinacas. Lo dejamos que se cueza todo durante unos minutos removiendo bien y ya los tenemos listos para comer.
Ensalada de garbanzos
Preparar una ensalada de garbanzos es muy simple. Para ello, solo vais a necesitar cualquier ingrediente que os guste en la ensalada: lechuga, tomates, zanahoria, pepino, aceitunas, etc.
Para empezar, es importante limpiar bien todas las hortalizas y cortarlas de la manera en la que más nos guste. Las metemos en un bol y añadimos los garbanzos una vez los hayamos limpiado si los compramos de bote. Si los compramos secos, deberemos dejarlos en remojo unas 8 o 12 horas antes de usarlos.
Y, una vez tenemos todo mezclado, ya solo nos queda añadir un poco de aceite virgen de oliva, sal y vinagre. Sin embargo, también podéis añadir aquellas salsas o especies que más os gusten.
Los garbanzos son un alimento muy nutritivo, rico y que podemos preparar de muchas formas distintas, por lo que no es de extrañar que sean de lo más utilizados en nuestra gastronomía.