Diosdado sólo amó a Larrañaga
Estuvieron casados 20 años pero tras su separación, siguieron apoyándose. Cuando él enfermo sólo quería hablar con ella
5 octubre, 2015 21:23Ana Diosdado siempre creyó en el flechazo, al menos en el que ella misma tuvo cuando conoció a Carlos Larrañaga en 1977. Supo en ese instante que era el hombre de su vida. Dos años después se casaría por primera vez con él, a pesar de tener asumido que era un conquistador. “Siempre que me preguntaban por él en las entrevistas, decía que era un hombre bueno. Y él me reñía porque decía que eso no vendía. Le gustaba cultivar esa fama de galán que a mi me parece que no le beneficiaba nada“, recordaba Diosdado en una entrevista en mayo de 2015 en Sálvame Deluxe. Larrañaga y ella se casaron primero en Londres en la primavera de 1979 y posteriormente se volvieron a casar en Toledo el 6 de noviembre de 1987.
La actriz y dramaturga fallecía este lunes a los 77 años por una parada cardiorespiratoria mientras asistía a una reunión de la junta directiva de la SGAE. Los últimos años había superado un cáncer de mama, un derrame cerebral y vencido a la leucemia de forma discreta, como ella lo era siempre para todo. Durante 20 años, Carlos y Ana fueron una de las parejas más bien avenidas de la escena española. Diosdado mantuvo hasta su muerte que era el amor de su vida y que siempre le querría, a pesar de que se separaron y él se volvió a casar e incluso tuvo una hija con su última mujer, la también actriz, Ana Escribano.
Sin embargo, los últimos años en los que el actor estuvo delicado de salud, sólo quería hablar con ella. Carlos siempre estaba pendiente de ella, era el que mejor la animaba a seguir adelante con los proyectos profesionales y a levantarse cuando estaba decaída. Diosdado nunca tuvo la llamada de la maternidad, decía que traer hijos al mundo es una gran responsabilidad para la que no estaba preparada.
También hoy es un día triste para los hijos del actor, Pedro, Luis y Amparo a los que siempre estuvo unida y les quiso como a unos hijos. Hoy ellos lloran su ausencia y sólo han tenido palabras de cariño hacia ella “era la mujer más inteligente y buena que he conocido”, decía uno de los hijos del actor. Ellos siempre han defendido que Ana fue la mujer más importante en la vida de su padre. Quizás ahora sigan con esas conversaciones cuando se reencuentren en el más allá. Se marcha una mujer especial por su sensibilidad, educación y conversación.