Ni blanca ni radiante va la novia…Si Antonio Prieto, intérprete del bolero, levantase la cabeza echaría a correr. Las novias y sus atuendos nupciales ya no son lo que eran: ni velos tapando la cara hasta llegar al altar, ni bomboneras de bolsito, ni guantes blancos agarrando el ramo…En fin las cosas han cambiado… Y ahora ante la perspectiva de un bodorrio la expectación aumenta: ¿Cómo irá la novia?
Queda menos de una semana para descubrir el secreto mejor guardado de Eva González en Mairena de Alcor. Hervé Moreau, director creativo de Pronovias, tiene que tener todos los pespuntes bien dados y a juzgar por la trayectoria de la firma catalana, el traje, quiero decir los dos trajes que lucirá la modelo serán….unos auténticos trajes de novia¡¡¡ No veo yo a la sevillana luciendo camiseta, vaqueros y deportivas como lo ha hecho la Pedroche en su original boda con Daviz Muñoz en el vestidor de su casa. Pero para gustos…los colores y si no que se lo pregunten a las novias del panorama celeb.
Novias Cupcake. El rosa es su color. Son la versión pastelosa del estilismo nupcial y de esta guisa se casaron Gwen Stefani y Jessica Biel. John Galliano dejó volar su imaginación y confeccionó para la cantante un vestido de seda cuyo color se iba degradando desde el blanco hasta el fuxia terminando con una llamativa cola. Por su parte, la mujer de Justin Timberlake se decantó por un modelo “tarta de cumpleaños” firmado por Giambattista Valli con múltiples capas superpuestas que le daban a la falda un vuelo descomunal.
Novias MonsterHigh. Aritistas como Avril Lavigne y Alaska no dudaron en ponerse en plan “Draculaura” en su día más especial. Voluminosa faldas llenas de tules y encajes negros ofrecen la versión más gótica de un vestido de novia. Para mi gusto la palma se le lleva Avril Lavigne con ramo de flores y marcada raya de ojos a juego con el color del vestido.
Novias Nazarenas. El color corporativo de Podemos fue el elegido por Dita Von Teese en su boda con Marilyn Mason, un espectacular traje de Viviene Westwood, muy en la línea del estilismo de la reina del burlesque. También de morado, aunque virando más hacia lavanda y lila, se casaron la actriz Julianne Moore y la directora Sofia Coppola.
Novias Rainbow. Esta es la versión más divertida de los trajes de novia. Vestidos tuneados acorde a la profesión o vida familiar de los contrayentes. El velo y la falda de Angelina Jolie en su boda con Brad Pitt fue customizado por sus hijos para darle personalidad al Atelier Versace que lució. Hay quien llegó a asegurar que los pequeños se habían inspirado en el estampado de unas cortinas de baño para niños diseñadas por Ikea. La partitura del tema Due Mondi de Lucio Battisti fue la protagonista del vestido de Marica Pellegrinelli, mujer de Eros Ramazzotti. Un diseño de Valentino que tuvo tanto éxito que también lo lució Katy Perry en la entrega de los premios Grammy 2014.
Novias de Oficina. Ellas son fieles a su socorrido pantalón. En su boda, por mucha pompa que haya no piensan renunciar a su comodidad y a su estilismo diario. La mujer de Boris Becker, Lilly Kerssenberg no se rompió mucho la cabeza y apareció ante el altar, siguiendo la etiqueta de Wimbledom, con un traje de chaqueta blanco. La musa de Karl Lagerfeld, la actriz francesa Anna Mouglais decidió que unos pitillos de cuero blanco bajo su diseño de Chanel (lleno de plumas y tul) eran el accesorio necesario para poder levantarse la falda y recorrer las calles empedradas del pueblecito francés San Paul de Vence donde se celebró su romántica boda.