El empresario y heredero Lapo Elkann ha sido cazado por la revista ¡Hola! de la mano con otra mientras disfrutaban del apreski en Saint-Moritz (Suiza). Se trata de Giulianna Ramírez una escultural modelo venezolana.
El polo opuesto de Marina Peñate, su (ya antigua) novia canaria: la nueva adquisición luce piercing en el ombligo y posa en bikini para Major Models, la agencia que la representa. Cuyas imágenes sacan a relucir su busto de fábrica.
Hace tan solo un mes y medio, Marina Peñate acompañaba a su estiloso novio, Lapo Elkann a la entrega de los Premios GQ. Sonrientes y entregados atendían a los medios. "Orgullosa de estar con mi chico para su premio", compartía la canaria imagen de la compenetrada pareja en el baño de la habitación del Palace de Madrid, donde se alojaban.
Fue la última vez que se les vio juntos. A los días unas indirectas cruzadas en sus perfiles no dejaban lugar a duda: la pareja había cortado, según las malas lenguas por una infidelidad del alocado Lapo.
El italiano cazador de tendencias parecía haber asentado la cabeza (y el ánimo) junto a la española. Después de su noviazgo con Lady Goga, una rica magnate kazaja, que también terminó de manera abrupta al ser víctimas del robo por valor de 3'8 millones (entre joyas y dinero) que sufrieron en un hotel de Uruguay.
El rico heredero del conglomerado Agnelli (Fiat) y dueño de la marca de gafas Italia Independet disfruta de sus continuos viajes a Miami, en los que a buen seguro incluirá a la exótica Giulianna. El cortejo empezó entre ellos en Instagram y -seguramente- acabará allí.