Valentino suele reunir a su troupe fashionista entorno a su casa montañesa de Suiza. Aunque St. Moritz o Courchevel también se llevan un gran cupo de famosos, la estación de esquí de Gstaad es siempre una apuesta segura, un clásico al que medio Hollywood, la magnates de la banca y famosos sin parangón acuden cada 31 de diciembre. La gran mayoría se reúnen en la cena de Nochevieja del Gstaad Palace a la que acude la familia Missoni, Elton John o Poppy Delevingne.
Un castillo en la ladera del valle al que puedes unirte por 3.520,30 euros cinco noches con desayuno y cena incluidos, no obstante el 30 y 31 de diciembre ya están completos.
Anne Hathaway y Valentino han acudido en numerosas ocasiones para brindar por el nuevo año.
El día 1 de enero las celebrities optan por relajarse en el impresionante baño con vistas a los Alpes.
En el spa del hotel suele haber overbooking para recuperarse de la noche de excesos. Para que la privacidad sea máxima el servicio del castillo ofrece a los exclusivos huéspedes la posibilidad de alquilar salas privadas dentro del spa. Todos los productos con los que embadurnan a los socios transpiran máximo lujo: Sisley y Jardin des Monts son las marcas de referencia.
Andrea Casiraghi y Tatiana Santo Domingo se dejan ver en The eagle ski club, el local de moda de la estación. Las copas de fin de año son seguidas por nobles napolitanos, barones franceses y princesas árabes que se desinhiben en el local mientras beben combinados ocultos de miradas ajenas. Roman Polanski y Bernie Ecclestone son miembros de este club al que podrás acceder por 27.676,50 euros de inscripción.
Nuestros famosos suelen aprovechar estas fechas fechas para escapar de la capital pero, si el trabajo y las citas sociales no lo permiten recurren al Hotel Santo Mauro. Por 315 euros por persona (cena y cotillón) degustan el champagne Mumm y ostras mientras observan como baila Mar Flores o a Beatrice de Orleans en el Salón Chino decorado, con lámparas vintage con forma de piña traídas desde Lisboa, por Lorenzo del Castillo. Lenny Kravitz se ha hospedado en el hotel de la calle Zurbano y David y Victoria Beckham lo eligieron como residencia mientras buscaban casa en Madrid.
La heredera enamorada de nuevo
Marta Ortega solía despedir el año en el Café Rialto de La Coruña. Un Pub sito en la majestuosa Plaza de María Pita a unos metros de su casa base en la ciudad donde reside. El bar recientemente renovado está ubicado en la plaza del Ayuntamiento de la ciudad, considerado el más espectacular de España y presidido por la estatua de la heroína. La hija pequeña de Amancio invitaba a alguno de sus íntimos amigos del colegio Santa María del Mar de los Jesuitas a disfrutar del ambiente, pero el año de su separación prefirió correr la San Silvestre coruñesa.
Según informa el Correo Gallego, Marta Ortega acaba de ser pillada en una cena entre colegas en la que se encontraba su amigo especial (y al que todas las fuentes relacionan con Marta) mientras cenaban juntos en Casa Marcelo, el restaurante de Santiago premiado con una estrella Michelín. A la cita acudió con unos zapatos de Chanel que la transportaron hasta la opción típica y referente culinario regentado por el chef Marcelo Tejedor.
Con esta ya son cuatro las veces en las que la diseñadora y amazona se le ha visto acompañada del jinete. El Master Longines de París, la Madrid Horse Week y el Concurso de Saltos Internacional de Casas Novas han estado entre sus citas siempre con la temática hípica como telón de fondo, pero este último encuentro se han olvidado de los caballos para pasar una velada navideña.
Tampoco Nuñez Feijóo, Marta Sánchez, la familia Domínguez y el modelo Iván Sánchez faltarán por tierras gallegas para celebrar las fiestas entre sus seres queridos. Más de una celebrity despedirá el año en A Quinta da Auga: un palacete del siglo XVIII perteneciente al grupo Relais & Châteaux donde se puede degustar "el costillar de jabalí confitado con manzana asada al queso azul con el erizo de la Ría relleno de su caviar en velouté" regado por vinos dulces. En definitiva, un lugar tocado por la riqueza y la idiosincrasia de la cocina gallega desde un prisma nuevo y sorprendente. Los famosos tendrán asegurada la privacidad entre los más de 10.000 metros cuadrados de la finca.