Exhausta y con pintura cayéndole a chorros, la diva abrazada a Taylor Kinney para la portada de V Magazine. Después de predicar a sus fans que tengan relaciones sexuales medidas Gaga no se corta ni sabiendo que millones de personas verán su trasero y el de su prometido después de "hacer el amor en un lienzo un domingo en Chicago", según ha declarado la propia protagonista.
A la pareja no se le ha ocurrido mejor forma para publicitar su Fundación Born This Way que posar, mediante selfie, y como dios les trajo al mundo. Los ingresos de las 16 portadas en las que ha posado Lady Gaga para la revista irán destinados íntegros a la Fundación. Ambos figuran como administradores, pero será la madre de la cantante la que lleve las riendas de la fundación que ayudará a los jóvenes más necesitados.
Para ello llevaron a cabo su propia performance sexual: "Hicimos el amor en el lienzo un domingo en Chicago en medio del caos. Hablamos de tiroteos. Hicimos el amor en medio del terrorismo y hablamos de cómo los corazones de las personas también están sufriendo en todo el mundo a medida que observan y son testigos de una oleada de violencia. Hicimos el amor en medio de la violencia que vivimos hoy día". Tal y como expresa Lady Gaga, los dos consiguieron disfrutar en mitad del desorden sobre "el lienzo de la paz".
Curiosamente la estrella no sorprendió acudiendo a los Globos de Oro con un discreto Versace donde se llevó el premio por su papel como la Condesa en American Horror Story: Hotel. Parecía que la rocambolesca artista ya no necesitaba golpes de efecto para adentrarse en una etapa más seria y profesional. El morbo se había apagado definitivamente para dar lugar a la verdadera cantante. Nada más lejos de la realidad: Lady Gaga vuelve a sucumbir a la polémica y ayudada esta vez por su novio.