"No crucen las piernas durante el desfile. Saldrán sombras que nos arruinará nuestro trabajo", advertían los fotógrafos a las celebrities que poblaban la primera fila. Los outfits [con los bolsos que comprará medio Madrid el año que viene] de Michael Kors llenaban la pasarela blanca impoluta. Una rebelde Blake Lively se negaba a seguir la imposición de los gráficos. La actriz acompañada por su madre recibía los requerimientos (con algún insulto incluido) de los fotógrafos que sólo pedían que les favorecieran en su trabajo, con un acto sin apenas esfuerzo para los invitados del front row.
Todas los asistentes se resistieron a hacer el gesto natural de cruzar las piernas, y casi automático de toda mujer, sin rechistar. La mujer de Ryan Reynolds fue la excepción. Sus Louboutin beige de gran punta y con suela roja destacaban entre el resto de asistentes al desfile.
Hasta la todopoderosa Anna Wintour y su compañera de trabajo Grace Coddington obedecían pacientes (y conscientes) del trabajo de los periodistas. Mientras veían a una Kendall Jenner sin casi maquillaje pasar, las dos mujeres más poderosas de la moda tenían los dos pies en tierra.
Lo cierto es que desde hace casi un lustro los diseñadores se han apuntado a acercar al público al ir y venir de las modelos. Las fotos (hechas con el móvil) obligan a la cercanía para que los famosos más patosos hagan su personal reportaje que luego descargan en sus redes sociales, con decenas de millones de seguidores, que se transformará en publicidad gratuita. Además, un desfile en apariencia vacío y en el que no se aprecie en las fotos al público a ambos lados da la sensación de soledad y puede repercutir en el prestigio de la firma.
Blake Lively está casada con el actor Ryan Reynolds (ex marido de Scarlett Johansson). "Un día fuimos a una cita doble. Ella iba con otro chico y yo iba con otra chica. Sin duda fue la cita más rara para estas dos personas porque había fuegos artificiales entre nosotros", declaró Reynolds sobre el inicio de su relación entre ambos. La pareja que comenzó siendo amiga ya tiene una hija llamada James de un poco más de un año.
La pareja ha sido siempre discreta hasta el extremo de que la prensa no se ha dado cuenta de muchos de sus movimientos. Ahora explica su relación ante el estreno de la película Deedpool en la que actúa Reynolds. "Haz el trabajo sucio, cambia los pañales, levántate a mitad de la noche. Un ser humano va a salir de tu mujer, ella ya ha hecho suficiente. Solo cambia los pañales", explicaba el marido de la actriz de Gossip Girl a cómo se enfrenta a su papel de padre.
Ryan no ha dejado pasar la oportunidad de promocionar la película Deadpool con sentido del humor para todos sus fans españoles: "Cuero apretado, la cara como un cromo y culito respingón. Pero si ya pasas de los 18… ¡PREMIO! Nos vamos a partir el ojete en cines que da gusto, palabra de DEADPOOL ¡Wasapéalo, tigre!", comparte el actor haciendo gala de un escueto, pero divertido español.