El avión en el que viaja la 'honorable señora' Clinton a los mítines de campaña es propiedad de el polémico Dan Bilzerian (35), un jugador de póker de altas apuestas. El dueño del avión es asiduo a la red social Instagram donde plasma su desfasado estilo de vida dentro de la misma aeronave que ahora utiliza Hillary Clinton (68).

Convertido en un conocido playboy, Bilzerian no duda en compartir imágenes de chicas desnudas, rifles de asalto e incluso su propia campaña como presidente con leones vivos como compañeros de viaje. TMZ ha comparado la matrícula del avión que usa la ex Primera Dama que coincide con el del cliente más controvertido de Instagram.

El camino a las presidencia de Estados Unidos que se dilucidará en noviembre se complica para Hillary, la que puede convertirse en la primera mujer (y esposa de un ex presidente) que lleve las riendas de la política internacional. Parece que todo lo que tenga que ver con objetos voladores, incluido su jet privado, suelen ser asuntos que acaban con aterrizajes de emergencia.

Dan Bilzerian estuvo implicado en un escándalo financiero protagonizado por Paul Bilzerian, su padre. La familia se vio envuelta en una supuesta trama promovida por el patriarca del clan que hizo fideicomiso a su hijo en la década de los noventa, época en la que debía 62 millones de dólares a la Reserva Federal. La afición del retoño de la familia a las armas se debe a su época como veterano de la marina de guerra durante cuatro años de servicio, de la que fue expulsado "por una violación de la seguridad en el campo de tiro". 

Los 17 millones de followers de Dan Bilzerian disfrutan de los excesos con los que se pavonea la celebridad de internet. Fusiles de asalto, deportivos excesivos o equipos de chicas siliconadas y en posturas provocativas le acompañan en todo momento.

El multimillonario es jugador profesional de póquer y ha llegado a declarar haber ganado hasta ocho millones de euros en una sola timba. Participó en las Series Mundiales de Póker, pero asegura estar en otras jugadas más lucrativas alejadas de los focos: "Yo juego en partidas privadas con hombres de negocios y famosos. Ellos juegan para divertirse. Yo no me enfrento a profesionales. Ni siquiera me acerco a ellos", sentencia.

Posee un portal dedicado al juego de cartas llamado Victory Poker en el que cualquiera puede apostar, pero el jugador se hace eco de las jugadas más arriesgadas: "Estaba en un tío que solo quería apostar coches o aviones. Solo decían: 'Apuesto un Mercedes'. Un Mercedes de 100.000 dólares, un Ferrari de 300.000 y un Bugatti un millón. Esas eran sus apuestas", habla sobre sus rivales durante las timbas.

Si en enero pasado Hillary prometía "investigar los ovnis si llegaba a la Casa Blanca" porque "los extraterrestres podrían haber visitado de la tierra". Hillary al igual que Houston parece tener un problema con las alturas. 

Dan Bilzerian tiene claro cuales son sus preferencias: "En una era de la más correcta política amariconada, tienes que respetar a la gente que permanece sin filtrar", comparte el díscolo Dan sobre su amigo Donald Trump.

A pesar de que famosos como Jennifer López, Scarlett Johansson o Katy Perry apoyan a Hillary y que a buen seguro hubieran dejado sus aviones privados para las escapadas en campaña de la presidenciable, su arredandor (gracias al cielo) le da la espalda.