Cristina Valls Taberner y Francisco Reynés esperan su segundo hijo
La pareja está a punto de celebrar los tres años de casados. Viven en Barcelona dónde él ejerce de consejero delegado de Abertis y ella continua con éxito con su marca de moda Chris&Cris.
28 abril, 2016 03:24Noticias relacionadas
Francisco Reynés y Cristina Valls Taberner están de enhorabuena. La pareja una de las más consolidadas de la alta sociedad nacional está esperando su segundo hijo que nacerá a mediados de septiembre.
El consejero delegado de Abertis contrajo matrimonio con la hija del ex presidente del Banco Popular, el 4 de mayo de 2013 en Villa Castiglione Della Pescaia, en la Toscana italiana, en una ceremonia íntima a la que sólo asistieron los amigos y familiares más cercanos.
En mayo de 2014, Cristina daba a su luz a su primer hijo, la preciosa Julieta, con la que la pareja sellaba su historia de amor. La pequeña que guarda un gran parecido con su madre, cumplirá dos años el próximo mes de mayo.
Francisco Reynés llevaba cinco años viudo y con tres hijos cuando conoció a Cristina en una cena en casa de unos amigos comunes. El cariño y la comprensión de Taberner devolvieron la ilusión al consejero delegado de Abertis, que consiguió rehacer su vida.
La pareja afincada desde hace unos años en Barcelona por el trabajo de Francisco, se ha adaptado a la ciudad sin problemas. Cristina ha compaginado la maternidad con su empresa Chris&Cris, que cuenta con un showroom en la zona alta de Barcelona. Allí se pueden adquirir desde la exclusiva línea de bolsos creada por la alemana Tissa Fontaneda (exdiseñadora de Loewe) a corbatas de seda hechas a mano, bufandas o refinados artículos de marroquinería.
Valls-Taberner se prodiga socialmente poco pero es amiga de la Reina Letizia a la que ayuda a conseguir piezas o complementos que esta no encuentra en las tiendas. El pasado puente de diciembre la vimos practicando una de sus aficiones favoritas, el esquí.
En esta ocasión acudió a la estación leridana de Baqueira Beret en compañía de un grupo de amigas y sin su marido. Dicen que le encantaría que fuera niño para completar la parejita. No obstante, ambos están felices con la llegada de un nuevo miembro a la familia Reynés-Valls.