Máxima de Holanda cumple 45 años. El 17 de mayo de 1971, la monarca holandesa llegaba al mundo en el seno de una familia adinerada en Buenos Aires. Pero lo que menos imaginaba nadie en ese momento era que las buenas relaciones de los suyos le harían a conocer a un príncipe, que se convertiría en su marido, coronándola a ella como reina.

El enamoramiento se produjo cuando una amiga del colegio de Máxima le presentó a Guillermo Alejandro de Holanda, siendo ésta una importante directiva en Nueva York. El flechazo fue tal que un año después la pareja se comprometió. Ella se convirtió en ciudadana neerlandesa y la cámara aprobó un proyecto de ley para consentir el matrimonio. Ningún miembro de la familia real se opuso al casamiento y aceptaron a Máxima de Holanda tal y como era. Incluso le respetaron que fuera católica, mientras que Guillermo era protestante.

La pareja se casó en 2002 y Máxima de Holanda pasó a recibir el título de Princesa de los Páises Bajos. Pero no sería hasta 11 años después cuando se convertiría en la soberana consorte del reino. Un hecho que se produjo gracias a la abdicación de Beatriz de los Países bajos en favor de su hijo.

Junto al rey han formado una gran familia. Su primera hija, la princesa Catalina Amalia, nació el 7 de diciembre de 2003. La segunda, la princesa Alejandra, el 26 de junio de 2005 y su tercera hija, la princesa Ariadna, el 10 de abril de 2007.

EJEMPLO DE ESTILO

Además de ser una de las reinas más queridas de las monarquías europeas, Máxima de Holanda se ha convertido en todo un referente de estilo. Sus apariciones públicas son analizadas al detalle, pero ella siempre pasa el examen con buena nota. Justo unos días antes de su cumpleaños, la reina y su marido Guillermo asistieron a las celebraciones por la conmemoración de la liberación de la ocupación nazi en Holanda y allí Máxima volvió a brillar con luz propia.

Ataviada con un vestido metalizado en oro por la rodilla de la firma Nata y unos zapatos muy elegantes de tacón del mismo color, fue el foco de todas las miradas. Visiblemente un poco más delgada que en los últimos acontecimientos, la monarca demostró que los años le sientan muy bien.