Los amigos lo llaman 'el Canijo', 'el Mori' o 'el Marqués' pero desde este martes, José María Moriche, el marido de Susana Díaz, la presidenta de la Junta de Andalucía, es el 'tieso' más famoso de España. La intervención de la líder del PSOE andaluz en la comisión parlamentaria que investiga un posible fraude en los cursos de formación ha puesto el foco en su consorte, bético, costalero del Cristo de las Tres Caídas de Triana y empleado en una librería.
"Me he casado con un tieso, sí", respondía Susana Díaz, a las insistentes preguntas de la diputada del PP Teresa Ruiz Sillero sobre las nóminas de 700 y 1.200 euros que recibía el marido de la presidenta como auxiliar administrativo de UGT en los cursos de formación subvencionados por la Junta de Andalucía, ahora investigados.
"Un tío normal y corriente, de barrio", explica uno de los compañeros de partido de Díaz. Quien habla es militante del PSOE y ostenta cargo en el Ayuntamiento de Sevilla pero prefiere no dar su nombre. Nadie lo da cuando se habla de la presidenta. Al menos para hablar de su marido. Periodistas locales, vecinos de la pareja, amigos de la infancia, compañeros y adversarios en las filas socialistas, amigos del Partido Popular… nadie quiere dar su nombre pero, con sus testimonios, todos van recreando el perfil de José María Moriche.
'El Mori' es el mediano de tres hermanos. El padre, ya jubilado, fue dependiente hasta los años 90 en una famosa tienda de moda de Triana, 'Los Leones', situada en la calle Callao; la madre, ama de casa. La familia, humilde, vive en el Turruñuelo, una zona de bloques de pisos cercana al Tardón, donde se cría Susana Díaz, un barrio de viviendas sociales entregadas las familias en los años cincuenta. En la calle más larga de la barriada, la calle Juan Díaz de Solis, nace Isabel Pantoja, Chiquetete y Los Morancos.
"Antiguamente tenía su arte, su punto, era gracioso pero la niña [Susana Díaz] lo cambió", explica un amigo de la infancia. "Era un tipo normal, muy buena gente, sencillo pero desde que conoció a la moza cambió, pero un cambio radical", añade. "Y cuando ella llegó a concejala de Triana, él se lo empezó a creer", insiste.
Díaz y Moriche se casan en 2002 en la capilla de los Marineros de Triana, sede de la hermandad de la Esperanza de Triana, una corporación por la que sienten devoción los Moriche. No en vano, José María es costalero del Cristo de las Tres Caídas desde joven. La familia también es devota de la Virgen del Rocío y el marido de la presidenta hacía el camino con 'Los vigilantes de la Raya', un grupo de amigos y hermanos de la hermandad del Rocío de Triana.
"¿Tieso 'el Mori’? Un tieso no se pega un Rocío o una Feria como el que se pega él", confirma otro amigo de la familia. "De tieso nada", añade. Los vecinos narran cómo al marido de la presidenta de la Junta se le ve por el barrio conduciendo un Toyota Land Cruiser o "una motillo". También se le ve con asiduidad desayunando en los bares de la calle Juan Díaz de Solis o "de cervecitas" por la calle Alvar Nuñez, cerca de donde reside el matrimonio Moriche Díaz. "Él es de cerveza y caracoles", detalla un amigo. "Ella en la calle bebe sin alcohol, aunque en su casa tenga una buena bodega de vinos", añade. Ella no conduce.
La pareja vive en el barrio de León, una zona de casas bajas y calles con naranjos en las aceras, alejada del ruido de la ciudad. "Vivir ahí es la ilusión de los trianeros", explica otra de las fuentes. La vivienda, de tres alturas, está vigilada por varias cámaras de seguridad situadas en la fachada, de color crema. La vigilancia también afecta a un solar anexo a la vivienda del matrimonio, recientemente adquirido pero no edificado por una prohibición del PGOU sevillano, que impide la anexión de parcelas. "Una casa allí, en la época en la que la compró Díaz, costaba unos 80 millones de pesetas", detalla un vecino.
"Vida de tieso no lleva", asegura un ex compañero de partido de Díaz y estudiante de Derecho con la presidenta. "Es un casoplón", subraya al otro lado del teléfono. No quiere quedar por miedo a que lo vean. "Ella tiene una red de informadores y prefiero no arriesgarme”, insiste. Ambos, confidente y presidenta, tuvieron mucha relación en el pasado y se conocen bien. "Ella era una chica muy mandona, siempre lo fue, en la vida privada y en la pública", detalla. "Siempre se impone", destaca.
Según coinciden varias fuentes, a Díaz se le conocen dos relaciones previas a la de Moriche. "Y ambos están en el ámbito de poder, están bien situados", especifican. Uno de Triana y otro de Cádiz. "Uno de ellos Francisco Javier López Franco", espeta un amigo de la época de la concejala Díaz.
López Franco es uno de los brazos ejecutores de Díaz en su partido, el que fuera director del Distrito Triana y en la actualidad miembro del Comité Director del PSOE de Andalucía. A ambos les une una relación de amistad que los ha llevado a viajar juntos. "Han viajado muchísimo", explica el ex socialista.
Pero Moriche fue quien acabó llevándola al altar. "Y eso que el padre de ella no lo quería ni en pintura, porque él era un chavalito de Triana, normal y corriente, y el padre de Susana sabía que su hija se merecía algo mejor", confiesa un amigo de la juventud. "Él no había tenido novia formal hasta Susana, antes solo tenía rollitos", añade.
La misma fuente, más próxima a Moriche que a Díaz, explica que ambos se conocen en la plazuela de Santa Ana, donde se sitúa la sede del PSOE en Triana y donde hacen vida muchos costaleros de la hermandad de la Esperanza. "No sé si se conocieron antes, porque ella fue catequista en La O", añade.
José María Moriche estudió en el colegio Vicente Aleixandre, conocido como el Triana en el barrio. "Era un alumno regularcillo", define un antiguo compañero. Se desconoce si acabó los estudios de Formación Profesional que empezó cuando acabó la enseñanza obligatoria. Y su vida laboral arranca en el año 1992 trabajando para Manuel García Tello, fundador de un establecimiento de artículos de peluquería en Triana; un año después lo hace para BAMAR 2000 SA, empresa gestora del Gran Hotel El Coto de Almonte; y en 1998 de reponedor en una ortopedia en la avenida de Hytasa, en el barrio del Cerro del Águila de Sevilla. Su último trabajo conocido es en la cadena de librerías Beta, perteneciente al grupo ZZJ, un proveedor de Canal Sur.
Antes, el ya marido de Susana Díaz, Moriche ejerció como tutor y docente en hasta 46 cursos de formación del Instituto de Formación y Estudios Sociales de UGT. Según consta en la documentación que posee EL ESPAÑOL, el nombre de Moriche aparece en la lista del equipo docente en un expediente en el que se especifica las labores del marido de la líder del PSOE andaluz: "preparación, tutoría, evaluación" de distintos cursos de formación. Tan dispares como 'Infografista de medios audiovisuales', 'Informática de usuario', 'Operador de cámara', 'Editor, montador de imagen', 'Técnico en sistemas informáticos', 'Formador ocupacional' o 'Técnico de sistema de energía renovable'.
Ahora, la Junta de Andalucía pide el reintegro a la UGT de, entre otras partidas, varias nóminas de Moriche, que según aseguró Díaz es auxiliar administrativo. La Administración andaluza explica en la resolución de reintegro que "no se admiten los gastos declarados en concepto de 'NÓMINAS'".
Ese es el motivo por el que el nombre de Moriche salió el pasado martes en la comisión del parlamento andaluz que investiga un posible fraude en los cursos de formación. La portavoz del PP, Teresa Ruiz Sillero, preguntó a Díaz cuánto dinero había entrado en su casa procedente de la formación para el empleo. A lo que la presidenta contestó que los sueldos de su marido estaban entre los 700 y los 1.200 euros y que dejó el puesto cuando ella accedió a la presidencia de la Junta. "Me he casado con un tieso, sí, ¿y qué pasa?", se sacudió la líder socialista.
En ese momento, puso a su marido bajo el foco mediático. "Ella es la dominante, la que lleva los pantalones en casa, si no ¿cómo se explica que dijese eso de su marido?", cuestiona un periodista especializado en política andaluza, que advierte que Díaz usó a su marido para desviar la atención sobre su comparecencia sobre un posible fraude en los cursos de formación para desempleados. Es el precio de ser el marido de Díaz. Un precio que hasta "un tieso" debe pagar.