Tiene fama de duro. Sin embargo, los que le conocen bien saben que, tras esa firmeza, realmente se esconde un hombre familiar cuya máxima en la vida es proteger a los suyos. Así lo demostraba hace sólo unos días cuando saltaba el escándalo de De Gea. Óscar Tarruella, el manager de Edurne y ex mosso de'Esquadra, comentaba en Espejo Público lo bochornoso que había sido leer comentarios sobre la cantante en redes sociales. "Me parece una vergüenza", confesaba.
Nacido en Guernica y Luno 1970, aunque criado en Castro Urdiales, ese sentimiento protector quizá le venga por formación profesional, ya que antes de dedicarse a la representación de artistas fue mosso de escuadra; o quizá terminó en esa profesión por esa forma de entender la vida.
Sea como fuere, muchos se preguntarán: ¿Cómo pudo terminar Tarruella en el mundo de la música? Aquí entra en acción su poco conocida mujer: Mónica Naranjo. Como ya ha relatado la catalana en alguna ocasión, Tarruella llegó a su vida después de sufrir un robo en su casa y alguien le recomendará su nombre. "Entraron a robar en casa y apareció Óscar, un padre soltero de un niño de siete años, dos corazones", confesaba en una entrevista en La Vanguardia.
Y no sólo llegaría a su vida en lo personal -Mónica adoptaría a su hijo Aitor-, sino también en lo profesional. En el mismo año en el que pasaron por el altar, en 2003, Mónica y Óscar fundaban Alaia Productions, una oficina de representación de artistas y productora audiovisual. "Óscar dejó un trabajo que amaba para estar conmigo. Ahora manejamos todo este tinglado juntos", comentaba en aquella entrevista.
Entre sus artistas se encuentran, obviamente, la propia Mónica y Edurne, y desde hace unos días, el grupo A cámara lenta. Hace unos años también se encontraban en la cartera de artistas de la productora Angy Fernández y Roko. Curiosamente Edurne, Angy y Roko han sido tres de las ganadores de Tu cara me suena.
Y es que, conscientes de la importancia de la televisión como trampolín para lanzar carreras, una de las máximas de Tarruella y su oficina está precisamente en mostrar más accesibles a sus artistas desde la pequeña pantalla. Y así hemos podido ver una gran evolución en la pantera de Figueras, pasando de su ostracismo de los últimos años y su imagen de diva, a una cantante de lo más cercana gracias a sus apariciones como jurado en Tu cara me suena o Pequeños Gigantes.
Lo mismo ha ocurrido con Edurne, que tras su participación en el Festival de Eurovisión y su aparición como jurado de Got Talent, su caché se ha revalorizado. Este verano, además, su gira Adrenalina ya tiene cerradas varias fechas por la geografía española. "Te lo has currado mucho. Eres un ejemplo de bondad, lucha y constancia. Muy orgulloso de ti, pero mucho", escribía Tarruella en Twitter después de que la madrileña cantara en el certamen de la canción.
Allí, en redes sociales, es fácil encontrarle charlando con seguidores de una y otra artista, promocionando sus trabajos, relatando su día a día con humor o mostrando su amor por su mujer e hijo y por sus perros. Y, por supuesto, opinando. No obstante, el hecho de haberse convertido también en un personaje público le ha traído algún que otro disgusto como hace tan sólo unas semanas cuando recomendaba a Chenoa no posar desnuda en Interviú.
Rápidamente los seguidores de la mallorquina criticaron a Tarruella por esas palabras recordándole que tanto Mónica como Edurne habían posado así. Sin embargo, aquellas portadas fueron cuando él no era representantes de ambas. "Si hubiera sido repre de MN en la época de Man, hubiera luchado para que las fotos se publicaran en la reivsta del museo Dalí, no en Man", dijo entonces.