Tras protagonizar la portada de la revista Vogue mostrando todas las grapas de su cabeza, David Delfín (46) ha publicado esta misma mañana una imagen en su Instagram que no ha pasado desapercibida por sus fans. La instantánea pertenece al 12 de abril, momento en el que el modisto junto a su novio Pablo Sáez (28) abandonaron el hospital donde el diseñador fue intervenido de tres tumores cerebrales. "Y nos fuimos a casa", reza el texto.
La respuesta por parte de los tuiteros no se ha hecho esperar y la fotografía ha alcanzado los más de 6.000 likes y casi 500 comentarios en los que personas anónimas le desean al diseñador "mucha fuerza" y "ánimo".
Delfín ha decidido, así, hacer públicos todos los pormenores de la operación a la que fue sometida. Una noticia que dio en exclusiva en su momento EL ESPAÑOL, y que ahora vuelve a ser comentada porque el diseñador quiere mostrar el álbum de lo que han sido probablemente uno de los momentos más difíciles de su vida.
Aunque ahora se encuentra con "fuerza, ganas de luchar, aceptación y entereza", como él mismo relató a Vogue, ha sido duro. "Todo comenzó en enero con unas molestias en la parte derecha del cuerpo y que fueron en aumento. Tenía tres tumores. Era raro, porque normalmente no se presentan así… pero el día 5 de abril decidieron que había que operar. Uno no se podía tocar por la zona en la que está, los médicos ahí no entran; otro estaba bien, se podía quitar sin riesgo de lesiones; y el tercero era complicado pero operable. Era importante que yo estuviera despierto durante la intervención para ayudarles y decirles si todo iba bien", continuó Delfín.
No tiene miedo y actualmente combina sesiones de radioterapia y quimioterapia. Algunas de las secuelas que le han quedado es problemas con el habla, la memoria y la pérdida de fuerza en un brazo. Pero se muestra positivo y quiere poner en marcha una colección de ropa de niño.