En 2011, un listado de los empresarios más importantes de México enumeraba a los hombres-ni una mujer en la relación- más influyentes del país. Estaba Carlos Slim, el Ingeniero, quien desde hace años se reparte el podio del ser más rico del planeta con Amancio Ortega, Bill Gates y Warren Buffett; German Larrea, magnate minero y misterioso; Daniel Servitje, CEO de Bimbo, fundada por su padre... entre ellos, estaba uno al que definían como el iniciador de la fiebre inmobiliaria en Cancún y un amante del arte: Elías Sacal, el hombre con el que Mar Flores ha sido fotografiada recientemente.

Divorciado un par de veces, con tres hijos-una de ellos una it girl llamada Sofía-, su entrada en el mundo de la farándula mexicana se da en 2005, cuando comienza una sucesión de parejas de la televisión y la alta sociedad. La primera fue la cuarta hija del expresidente Miguel Alemán, Alejandra, con la que estuvo varios años. Luego llegaron Adela Micha, una presentadora de Televisa; una modelo, Rebecca de Alba, que fue la supuesta novia de Ricky Martín; la cantante Ana Bárbara, con la que duró un mes; una antigua modelo llamada Marcela Cuevas...

La revista económica Expansión lo describió como "adicto a las cámaras, a pesar de que dice que se maneja con discreción y que no le gusta que hablen de su vida privada, sus romances con mujeres famosas demuestran lo contrario". Aficionado al arte, hasta hace poco era presidente de Federación de Asociaciones de Amigos de los Museos de México, que se dedica a conectar empresarios e instituciones, y es amigo de artistas como Fernando Botero. Prueba de su amor por las Bellas Artes puede verse en que, cuando, durante la boda de su hija, un evento con 1.300 invitados en la Ciudad de México, puso autobuses para que los asistentes pudiesen visitar algunos museos de la capital como el Soumaya o el Nacional de Antropología, según cuenta en un blog Alysa Roever.

Aunque inició sus negocios en el campo textil, es la actividad inmobiliaria la que le ha dado las mayores alegrías. En 1996 funda la Promotora Royal Pacific, a la que luego cambiará el nombre por Bay View Grand. En 1998 lleva a cabo su primer gran proyecto en las costas de Puerto Vallarta. De acuerdo a la publicación especializada RealEstate, fue él quien denotó allí la inversión inmobiliaria con desarrollos como Bay View Grand Vallarta, Porto Fino, Royal Pacific Vallarta, Grand Venetian... este esquema de condominios de lujo lo ha reproducido en otras zonas como Ixtapa, Acapulco, Cancún y Baja California.

Nacido en 1965 en la Ciudad de México, es hijo de Marcos Sacal Aspani, un banquero de origen judío, y tiene cuatro hermanos, menos proclives a entrar en el foco público. Uno de ellos, Harry Sacal, lidera Sofoplus, una empresa de servicios financieros. Alex Simje, Manuel y Salvador, los tres restantes, también forman parte del consejo de administración de la empresa, amén de otros y variados negocios. Según las cuentas de la compañía, Elías es el único de los cinco que no está en el organigrama.

Recientemente la revista Proceso contaba la historia de como tres de los hermanos se habían hecho en 2007 con el edificio de la antigua sede de la Dirección Federal de Seguridad, donde el régimen priista encerraba y torturaba a sus opositores, por 23 millones de pesos, al cambio de entonces sobre 10 millones de dólares. Tras varios cambios de registro y propiedad pero siempre dentro de la familia, ha sido recientemente inaugurado como sede del Confederación Nacional de Organizaciones Populares, vinculada al PRI. Manuel Bartlett, un político mexicano vinculado al opositor Partido del Trabajo, declaró a la publicación que "de monumento a la perversidad pasó a monumento a la corrupción".

DEUDAS PENDIENTES

Tampoco los negocios de Elías han estado exentos de claroscuros. Por ejemplo, el dueño del Oasis, un restaurante en Puerto Vallarta, en la playa Holy, lo acusó de amenazarle de muerte y mandar unos matones a que le dieran una paliza. JP Morgan lo denunció en México y Nueva York para reclamarle el pago de una deuda acumulada de 189 millones de dólares más intereses, a lo que Sacal contestó con una contradenuncia exigiendo 500 millones de dólares por daños y perjuicios. Un par de meses después, las partes firmaban un acuerdo para una reestructuración financiera de la deuda, pero el litigio continúo y de momento es Sacal quien va ganando en los tribunales.

La última de las controversias también fue en Puerto Vallarta, donde tuvo su pistoletazo de salida como empresario inmobiliario. Se le concedió en 2013 el proyecto de remodelación de Marina Vallarta, el primer desarrollo turístico de la zona, y con ello la gestión de los amarres de los barcos. Según denunciaron al poco miembros de la Asociación de Embarcaciones Menores de Puerto Vallarta, por ordenes de Sacal les cortaron la luz y el agua hasta que renovasen los contratos, que habían subido sustancialmente las tasas.

Como se ve, aunque Sacal era poco conocido hasta ahora en España, en su país de origen tiene todo una carrera en el ámbito profesional y sentimental. Reparte sus días entre México, Nueva York y Europa. Además de pasar sus vacaciones en Saint-Tropez, donde tiene un yate. Según la ficha de M&S World Limited, la empresa que tiene en Londres, es residente en Mónaco. Es director de al menos otras tres empresas en Irlanda, Kelquan Holdings Limited, Sacal Holdings y Archaio Limited.